Vasco Fernández de Toledo

Vasco Fernández de Toledo, a veces Blas Fernández de Toledo, (Toledo, finales del siglo XIII - Braga, 18 de noviembre de 1372), fue un eclesiástico de origen castellano. Perteneció a una familia de la alta nobleza. Desempeñó varios cargos eclesiásticos en los reinos de Castilla y Portugal durante el siglo XIV.

Biografía

Nació en Toledo a finales del siglo XIII, hijo de Fernán Gómez de Toledo y de su esposa Teresa Vázquez de Acuña. Pertenecía a una familia de la alta nobleza castellana. Su padre fue camarero mayor del rey Fernando IV y hermano del Arzobispo de Toledo Gutierre Gómez de Toledo. Y su madre, una de las nodrizas del futuro rey Pedro I.

Debió ser el segundo o el tercero de siete hermanos. Entre ellos: Pedro Fernández de Toledo, camarero mayor del rey Pedro I; Gutierre Fernandez de Toledo, que ocupó varios cargos oficiales del mismo rey; D. Gómez Carrillo, Maestre de Alcántara; D. Gómez Pérez; Dña. Constanza Fernández; y Dña. Juana Gómez. Hizo sus estudios en Tolosa (Francia), por entonces una de las ciudades más importantes de Europa, donde residió por varios años. También residió por un tiempo en Montpellier. Poco más se sabe con certeza de su carrera eclesiástica, pero en 1320 aparece como canónigo de la Catedral de Toledo y en 1333 como su deán. Ocupó el cargo de canciller mayor con Alfonso XI.^[1] Durante los primeros años del reinado de Pedro I, junto con Juan Alfonso de Alburquerque, dirigió la política del reino. Ocupo los oficios reales de notario mayor del reino de León y de canciller mayor de la reina madre, Dña. María, que compatibilizó con los eclesiásticos.^[1]

En 1343 fue nombrado obispo de Palencia, donde desplegó una actividad extraordinaria a fin de conseguir una verdadera reforma de su clero y de sus fieles, convocando varios sínodos diocesanos de los que se conservan las actas. Fue nombrado Arzobispo de Toledo en 1353, algunos dicen que por intermediación del Cardenal Gil de Albornoz.

Por razones desconocidas, su familia se ganó la enemistad del rey Pedro I. Tras el ajusticiamiento de su hermano Gutierre -que por entonces ejercía el cargo de repostero mayor del rey-,^[1] en Alfaro (1360), por orden de Pedro I,^[1] el Arzobispo fue desterrado a Portugal, cesando de hecho en 1362 en la sede Toledana. Se conserva una carta suya al rey Pedro I, fechada en la ciudad portuguesa de Coímbra a finales de 1361, en la que manifiesta una gran cultura y un gran amor por los libros.

En 1364 el entonces obispo de Coimbra, el también castellano Pedro Gómez de Albornoz (y también desterrado por el rey Pedro I), es trasladado a la sede de Lisboa y el papa encarga a Vasco Fernández de Toledo, que por entonces vivía en la ciudad, de la sede de Coímbra como Administrador Apostólico.

En 1371, Vasco Fernández de Toledo (por entonces arzobispo dimisionario de Toledo y Administrador Apostólico de Coimbra) se encuentra en Aviñón visitando al papa Gregorio XI cuando llega la noticia del fallecimiento del obispo de Lisboa. Immediatamente, el papa nombra a Vasco Fernández de Toledo obispo de Lisboa. Sin embargo, apenas dos meses después, el mismo papa Gregorio XI lo traslada a la sede arzobispal de Braga que, entre tanto, había quedado vacante. Vasco (o Blas) fallece en Braga el 18 de noviembre de 1372.

Notas