- Pilar López de Ayala
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Pilar López de Ayala
Pilar López de Ayala 
Nombre real Pilar López de Ayala Nacimiento 18 de septiembre de 1978 (31 años)
Madrid,
EspañaEstatura 1'66 m Ficha en IMDb Premios ganados Premios Goya Mejor actriz
2001 - Juana la locaPilar López de Ayala (Madrid, 18 de septiembre de 1978) es una actriz española. Empezó trabajando en series de televisión como Menudo es mi padre, dirigida por Manuel Valdivia y Guillermo F. Groizard. De ahí pasó a Al salir de clase y pronto dio el salto al cine con Báilame el agua. Su personaje de Rocío, una gaditana de clase media alta en la película Besos para todos le valió la nominación al Goya como Mejor actriz revelación. Pero su confirmación definitiva vino con el papel protagonista en Juana la Loca de Vicente Aranda, que le valió un premio Goya a la mejor interpretación femenina interpretando a Juana y la Concha de Plata a la mejor interpretación femenina en el Festival de Cine de San Sebastián.
En 2005 estrenó Obaba de Montxo Armendáriz, película por la que obtuvo una nueva nominación en los Premios Goya, esta vez, como Mejor actriz de reparto. Obaba fue propuesta por España a los Oscar 2005, aunque finalmente no quedó nominada entre las cinco candidatas a Mejor película extranjera.
Contenido
Biografía
El primer referente que cualquiera que tenga alguna idea de quien es Pilar López de Ayala, hace al hablar de la actriz es el de la serie Al salir de clase, folletín televisivo noventero en el que primaba más el consumo rápido que la búsqueda de la calidad. Normalmente a la hora de destacar este punto en la carrera de Pilar López de Ayala, hay una intención de burla, de menosprecio por haber participado en un producto que no destacó por su calidad, no nos olvidemos de que estamos en España, y aquí no se perdona el éxito ajeno. Ciertamente no era aquella serie un producto memorable más allá de la nostalgia de una época pasada, pero sí ofrecía a los actores elementos de valor incalculable, como la adquisición de experiencia, el ser conocidos por el público, la posibilidad de que algún cineasta se fijara en ellos, y algo más mundano y a la vez más difícil de conseguir en cualquier trabajo: cierta estabilidad económica. No fue la única serie televisiva en la que trabajó, estuvo en Menudo es mi padre con El Fary, en Yo una mujer con Concha Velasco y en alguno de los primeros capítulos de Hospital Central. En el 95 participó en la película infantil El niño invisible, entre 1999 y 2000 hizo tres cortos: Cuando vuelvas a mi lado, El paraíso perdido y Aviso de bomba. Probablemente haya un cuarto corto El Candidato, pero no he podido comprobarlo, de hecho, me ha sido imposible encontrar ninguno de los cortos de Pilar López de Ayala. También en el 2000 participó en la película La gran vida en la que trabajaban Carmelo Gómez y Salma Hayek, cinta que vi en su día, pero no recuerdo la aparición de Pilar López de Ayala, y por desgracia, me ha sido imposible encontrar esa película (el cine español es lo que tiene) supongo que sería un papel muy secundario. Por supuesto desde entonces hasta hoy ha desarrollado una carrera cinematográfica muy interesante en la que ha podido haber mejores o peores películas, pero en la que nunca se puede decir que haya hecho un mal trabajo.
Es muy difícil ver una serie como Al salir de clase, y distinguir talento entre sus actores, de hecho en aquellos maravillosos noventa, cuando mis compañeros de piso y yo veíamos aquella serie solo pensábamos qué actriz era la más guapa (por decirlo de una forma educada). Ya en aquel momento destacaba una chica que no solo era guapa, tenía una voz muy especial. Pero lo cierto es que lo de Pilar López de Ayala era vocación, no buscar un sueldo fijo en una serie de chicos y chicas de 25 años que decían estar en C.O.U. En el año 2000 participó en una película de bajo presupuesto basada en una novela corta de un escritor poco conocido: Báilame el agua. La chica mona de serie televisiva se metió de lleno en el papel de una joven de provincias que abandona su hogar y acaba en el Madrid más cruel, enamorada profundamente de un poeta bohemio, relación que le lleva a la heroína y a la prostitución. Como quien se lanza al vacío, Pilar López de Ayala decide que quiere demostrar y comprobar cuál es su capacidad como actriz, ya no se trata de encontrar trabajo en el mundo de la actuación, ni de ser conocida, ni de estar guapa, se trata de actuar, de profundizar en un personaje que desciende a los infiernos y parecer verosímil. Los resultados no se reflejaron en taquilla, ni en un reconocimiento considerable por parte del público, pregunten por ahí a ver si alguien conoce Báilame el agua, la novela o la película. Lo cierto es que la cinta obtuvo cierto reconocimiento en el festival de cine español de Toulouse donde Pilar fue premiada por su interpretación así como también obtuvo el premio Sant Jordi. Éste fue el primer momento en la carrera de Pilar que según mi opinión marcó un antes y un después. En Báilame el agua Pilar dio a conocer su capacidad de transformación y su compromiso con el personaje más allá de la vanidad de estar favorecida en pantalla.
Dando un pequeño salto llegamos al segundo momento más importante de su carrera: en el año 2001, el veterano director Vicente Aranda la elige para interpretar a Juana la Loca. Una vez que Pilar demuestra que es capaz de interpretar a un personaje cuya vida está al límite, se ve metida en una interpretación intensa con abundantes toques histriónicos. Pilar se ve en el centro de una producción de época, nunca antes (ni después) el peso del protagonismo absoluto había caído sobre ella de forma tan notable como en esta ocasión. Si tenemos en cuenta el talante introvertido o tímido que parece tener la actriz cuando es entrevistada, el de Juana la Loca debió ser su interpretación más complicada, no solo por los momentos de locura, sino por las escenas tórridas que tanto aparecen en la filmografía de Vicente Aranda, que en realidad no eran tan explícitas como en otras películas del director catalán, pero lo suficientemente comprometidas como para que la actriz lo pasara mal. En una entrevista sobre el tema Pilar, que solo contaría 21 años respondía ruborizada “aun estoy descubriendo mi cuerpo” tratando de justificar lo que no tenía por qué. Como es habitual en su carrera, su profesionalidad se puso por encima de todas estas circunstancias. Personalmente pienso que quien se empeña en calificar a las actrices basándose en las veces que han aparecido desnudas o en escenas de sexo suelen equivocarse, hay quien opina que llevar a cabo estas escenas es un signo de entrega al personaje, y hay quien piensa que no hacer este tipo de escenas es más profesional, alguna vez he leído que el prestigio de Pilar reside en el hecho de no haber abusado de enseñar su cuerpo. Yo creo que hay distintos tipos de actores, pensemos en Robert de Niro y en Jack Lemmon: el primero se caracteriza por las intensas caracterizaciones de sus personajes, es capaz de engordar, de convertirse en un atleta… mientras que Jack Lemmon no presentó más cambios físicos en sus películas que los que le imponía el paso de los años, no creo que podamos decir por esto que uno es mejor que otro, simplemente son distintos. Por esta razón no creo que Pilar López de Ayala sea mejor o peor que otras actrices que han hecho más escenas de alto contenido erótico, basar nuestro criterio en ese aspecto es simplista. Huelga decir que desde mi punto de vista sea cual sea la decisión que una actriz tome en este sentido, ésta debe ser tomada con respeto y consideración por parte del espectador.
Retomando el tema que nos ocupa, damos de nuevo un salto en el tiempo y llegamos a la película Bienvenido a casa. Creo que este es otro momento importante en la carrera de Pilar; si en Juana la Loca la actriz tuvo que dar rienda suelta a su genio, a su nervio y a su fuerza, en Bienvenido a casa crea un personaje de sentimientos contenidos. Eva, el papel de Pilar en esta película, se pasa toda la cinta conteniendo sus reacciones: alegrías, decepciones, recuerdos, deseos, tristezas… En el minuto 22 de la cinta, hay una secuencia que dura unos 25 segundos, en ese escasísimo periodo de tiempo Pilar (Eva) presenta con un leve cambio en sus gestos hasta cuatro estados de ánimo distintos. La contextualización de la escena es la siguiente: Eva le dice a su novio Samuel (Alejo Sauras, también de la cantera de Al salir de clase) que está embarazada, ante semejante noticia, Samuel se queda atónito sin saber qué decir. Esta falta de reacción por parte de Samuel hace que Eva salga de casa para ir a trabajar sin despedirse, claramente decepcionada. Después de esto, en una escena sin diálogo alguno, Samuel espera a Eva en la salida del trabajo, al verlo Eva presenta sorpresa, pero una sorpresa contenida, camina hacia él y al tratar de contener su sorpresa, cambia su gesto por el de expectación. Cuando finalmente están juntos, Samuel se acerca a Eva y le dice algo al oído (que el espectador no necesita escuchar) y el rostro expectante de Eva se vuelve alegre, pero siempre conteniendo las emociones. Finalmente, Eva mira a Samuel y hace un gesto que a veces, si hay suerte, hacen las mujeres, se quedan mirando muy serias, y ladean levemente la cabeza: es su forma de pedir un beso (la de cosas que han pasado en este mundo por gestos así). Toda esta secuencia tiene lugar en 25 segundos. Con esta película, Pilar termina de convertirse en una actriz total, capaz de interpretar escenas violentas, escenas donde los personajes llegan al límite de sus fuerzas y de su cordura y también escenas intimistas, en las que una mínima alteración en el gesto lo cambia todo.
Báilame el agua (2000)
Fue dirigida por Josecho San Mateo y el guión se basó en la novela homónima de Daniel Valdés, que también adaptó el guión. La novela es más un relato del narrador omnisciente que nos cuenta los sentimientos de los personajes que una presentación un nudo y un desenlace, elementos narrativos que sí aparecen en la película dando a ésta una unidad de acción clara, elemento del que carece la novela. Fue la primera película en la que Pilar López de Ayala profundiza en su profesión de actriz, mostrando a lo largo de la historia una metamorfosis en el personaje, que acaba reflejándose tanto en su aspecto físico como en la evolución de su concepción del mundo y la realidad. María (Pilar López de Ayala) se va del hogar familiar, procedente del norte por algún problema que le hace no querer hablar con su familia, ni pedir ningún tipo de ayuda, viéndose obligada a soportar una vida dura en Madrid. David (Unax Ugalde) es un chico que también ha abandonado el hogar familiar en busca de una forma de vida muy particular, deseo que sale al exterior en forma de poesía. David y María se enamoran, pero frente a su amor está el universo real llamado Madrid, que les impondrá unas circunstancias que pondrán a prueba su amor. Dura y desgarradoramente emotiva supuso para mí el descubrimiento de una gran actriz y el vislumbre de una carrera artística que podría convertirse en leyenda. Es señalable la banda sonora de la película, especialmente Los Secretos con la canción “Pero a tu lado” y Antonio Vega con “El sitio de mi recreo” canción a la que le debo más felicidad de la que soy capaz de escribir. Músicos que, dicho sea con el mayor y sincero respeto, podrían haber sido protagonistas de la historia que cuenta “Báilame el agua”.
Besos para todos (2000)
Dirigida por Jaime Chávarri narra las primeras experiencias sexuales en un lupanar de unos jóvenes de buena familia que estudian medicina en el Cádiz de los años 60. La película presenta la división social de una España en pleno franquismo pasando por todos los estamentos sociales de la época, siendo este contexto el telón de fondo de una suerte de historia de amor entre los protagonistas interpretados por Eloy Azorín (Ramón, chico católico y aplicado) y Emma Suárez (Vicky, prostituta y artista de variedades). Hay un desfile de personajes secundarios en el que encontramos entre otros al cura (que cuida de la maltrecha conciencia de Ramón), y a La Montijo (madame del prostíbulo y/o sala de variedades “Pay Pay” y jefa de Vicky y sus compañeras). Entre estos y otros muchos personajes secundarios aparece Rocío (Pilár López de Ayala), una chica de buena familia gaditana cuyo novio deja embarazada antes de desaparecer, situación insostenible dentro de su contexto social. De todos los personajes secundarios que sirven de marco para la historia de amor entre Ramón y Vicky, destaca la divertida Rocío, que con su gran problema se pasa toda la película loca por conquistar a Ramón y conseguir así un padre para su hijo. En esta película Pilar cambia completamente de registro respecto a su película anterior, completando su caracterización con un muy logrado acento gaditano y una actitud que va desde la situación ridícula al dramatismo de una situación desesperada para ella. Esta actuación le valió la nominación para el Goya a la mejor actriz revelación en el 2000.
Juana la Loca (2001)
El veterano director Vicente Aranda eligió a Pilar López de Ayala para encarnar a Juana de Castilla, apodada La Loca por sus manifestaciones histriónicas motivadas por un amor u obsesión hacia el hombre con el que estaba obligada a contraer matrimonio, Felipe de Habsburgo (interpretado por Daniele Liotti), situación de locura que se veía alimentada por las continuas infidelidades de Felipe apodado El Hermoso y la muerte de su madre Isabel La Católica. La relación entre Felipe y Juana está enmarcada por los enfrentamientos políticos entre quienes eran fieles a Castilla y su heredera y quienes querían declarar loca a la reina y encerrar a Juana de Castilla en favor de los intereses de Felipe de Habsburgo. Perfectamente ambientada, Juana la Loca hace que el protagonismo absoluto recaiga sobre Pilar López de Ayala, situación que no se ha vuelto a repetir, ya que cuando no ha sido secundaria, ha tenido un protagonismo compartido, no por ello afrontando cada papel con total profesionalidad y aceptación de que su trabajo solo es una parte de un todo, y que su posición es la que marca el guión y el director. Este trabajo le supuso ganar la Concha de Plata del Festival de San Sebastián, cuyo aforo se rindió ante la actriz, y el Goya a la mejor actriz protagonista.
El puente de San Luis Rey (2004)
Película basada en la novela homónima del escritor Thornton Wilder que en 1927 le supuso al autor grandes beneficios económicos y el premio Pulitzer de Narrativa de 1928, aspectos que solo me parecen reseñables por lo incomprendido que resulta para mí tanto éxito por una novela a la que aparte de cierta elegancia, no le veo nada de especial más allá de ser algo entretenida. Supongo que mi criterio estará de algún modo viciado si actores como Robert de Niro, Harvey Keitel, F. Murray Abraham, Kathy Bates, Gabriel Byrne, Geraldine Chaplin y la siempre impecable Pilar López de Ayala decidieron entrar en el proyecto de la directora, guionista, productora y actriz Mary McGuckian, prolífica mujer de la que yo, por mi profunda ignorancia, no conozco absolutamente nada. La novela está ordenada de forma cíclica, partiendo del juicio que se le hace al hermano franciscano Junípero por su estudio teológico del incidente fundamental, la ruptura del Puente de San Luís Rey, “el más lindo del Perú” haciendo que una serie de personas se precipiten al vacío. Wilder realiza en la novela una analepsis en el que a lo largo de tres capítulos, repasa la vida de tres personas que murieron en la ruptura del puente para volver de nuevo al juicio. Es en ese flashback (término más apropiado para el análisis cinematográfico que para el literario) donde todos los personajes y sus circunstancias quedan perfectamente ordenados, recordando esta disposición de acontecimientos al de algunas películas de Ingmar Bergman, donde los acontecimientos están debidamente presentados por un título que a su vez nos sitúan en el tiempo y en el espacio. Es precisamente esa falta de orden y mezcolanza de personajes y acontecimientos la que hace que la película resulte difícil de seguir, carente de unidad de acción y confusa. En lo que a Pilar López de Ayala se refiere, éste supuso un trabajo después del parón más largo de su carrera en el que además de tener que medirse con grandes actores (dificultad superada con nota) supuso su primer trabajo en inglés, además de tener que bailar en su papel de actriz de teatro del siglo XVIII, y tener que someterse a largas sesiones de maquillaje por las circunstancias de su personaje. Un gran esfuerzo que por desgracia no estuvo a la altura de los resultados obtenidos.
Obaba (2005)
Obaba es una película del director navarro Montxo Armendáriz basada en la novela Obabakoak, del escritor vasco Bernardo Atxaga, que es una colección de cuentos que tienen como trama marco un lugar llamado Obaba, donde se mezcla magia y realismo, lo que no se debe confundir con Realismo Mágico Hispanoamericano. La película sólo puede recoger una pequeña parte de las historias que el extenso libro que Atxaga narra. El tiempo real o presente en la película tiene lugar en la actualidad; la estudiante Lourdes (Bárbara Lennie) viaja a Obaba para realizar un trabajo videográfico que le lleva a un estudio de las gentes del pueblo y sus costumbres. Con este argumento se mezclan los flashbacks inspirados en los relatos de Atxaga. El relato de la maestra que en la película encarna Pilar López de Ayala se llama en el libro Post tenebras spero lucem, y en él tiene un desenlace distinto, más apropiado que el que se da en la película: quien esté intrigado que lea el libro. En la película, la historia de la maestra acaba mezclada con la de Esteban Werfell. El papel de Pilar López de Ayala es el de una mujer alejada de su familia y de su novio que tiene que vivir en un pueblo aferrado a una manera de vivir donde la privacidad no existe y el enjuiciamiento al prójimo es práctica habitual. La soledad de la maestra es cada día mayor, y se transforma en una necesidad de encontrar el amor y mitigar el deseo. En este papel, la actriz aprovecha su aspecto delicado para mostrar un personaje débil que inspira ternura y a la vez indignación por las circunstancias que su situación le obliga a superar. Por este trabajo, Pilar López de Ayala fue nominada al Goya a la mejor actriz de reparto que finalmente fue para Elvira Mínguez por su trabajo en “Tapas” de José Corbacho y Juan Cruz. Al criterio de cada uno dejo la cuestión de si el veredicto fue adecuado o no. Como curiosidad, destacar una escena especialmente bonita en la que Pilar López de Ayala canta un villancico en vasco, demostrando que los acentos y las lenguas no son un problema para ella; por ahora ya ha hablado con acento gaditano, en inglés y en vasco, más adelante veremos que también se atreve con el francés.
Bienvenido a casa (2006)
Hablar de David Trueba es para mí hablar del autor de uno de los mejores guiones de la Historia del Cine Español y probablemente del Cine Universal. Habrá quien piense que exagero pero ¿por qué habría eso de preocuparme? solo es cine. Estoy hablando de la genial “Los peores años de nuestra vida” dirigida por Emilio Martínez Lázaro que más adelante dirigirá a Pilar López de Ayala en “Las 13 Rosas”. En el caso de “Bienvenido a casa” David Trueba no solo escribe sino que también dirige una película en la que desde una perspectiva muy personal, se atreve a defender lo que desde otros frentes muy distintos también se defiende, la familia, demostrando desde mi punto de vista, que grupos sociales que en España parecen estar unos en las antípodas de otros, en realidad se parecen más de lo que salta a la vista, pero en fin, España siempre es otra historia. David Trueba se atreve a ser en “Bienvenido a casa” lo que algunos no dudarían en llamar cursi, pero que yo llamo humano, construyendo una historia que sirve para crear una imagen de mi generación y su estúpida indecisión ante la vida. Una generación que creyéndose libre actúa en contra de su propia felicidad construyendo su soledad y su miedo a la vida y a la muerte. Los cínicos argumentos habituales en nuestro tiempo para ridiculizar valores tradicionales, son esgrimidos por personajes que el guionista y director sabe convertir en entrañables a pesar de sus estrafalarias conclusiones. Dejando a un lado “Juana la Loca” donde el protagonismo absoluto recae sobre Pilar López de Ayala, en toda la cinematografía de la actriz, solo hay tres películas donde su protagonismo es compartido a partes iguales por ella y el actor que hace de su pareja. Me refiero a “Báilame el agua” a “Bienvenido a casa” y a “En la ciudad de Sylvia” donde comparte protagonismo con Unax Ugalde, Alejo Sauras y Xavier Lafitte respectivamente. En el resto de sus películas solo ha hecho papeles secundarios, que aunque estén brillantemente interpretados, no dejan de ser secundarios. Señalada queda la llamada de atención para quien puede interesarle.
Alatriste (2006)
Después del éxito literario que cosechó en su día, y que sigue cosechando la serie de novelas de El Capitán Alatriste era lógico que se hiciera una película, de hecho pienso que Arturo Pérez-Reverte concibió esta posibilidad desde un principio. Alatriste se convirtió en el proyecto más caro del cine europeo. El problema del proyecto es que partió desde el principio de la idea de meter las siete u ocho novelas (no sé cuántas eran), lo cuál hacía que el guión fuera complicado y enrevesado, si ya es difícil meter una novela en una película, mucho más será meter siete u ocho en un solo guión. Creo que deberían haber hecho una saga de películas más cortas y dinámicas. No obstante yo he leído algunas de las novelas de la serie del Capitán Alatriste y disfruté de la película, y a pesar de que oí opiniones negativas, la película triunfó en taquilla. La participación de Pilar López de Ayala en la película es mínima, lo cual no quiere decir que sea desdeñable, pensemos en John Turturro en El Gran Lebowsky, su aparición no pudo ser más breve y la vez más memorable. Hay quien pensará que la participación de Pilar López de Ayala es casi inapreciable, pero desde mi punto de vista, es enigmática. Pilar López de Ayala hace el papel de una mujer frágil, totalmente sometida a los designios del infame Malatesta, no se da en ningún momento una explicación de por qué el personaje de Pilar López de Ayala actúa como actúa y no quiero especificar más para no ser spoiler, pero es precisamente en esos detalles que no se cuentan donde radica la belleza del personaje.
En la ciudad de Sylvia (2007)
Entre las informaciones que aparecieron en Internet meses antes del estreno de “En la ciudad de Sylvia” encontré esta sinopsis que creo que escribió el propio José Luis Guerín, pero no estoy muy seguro: “Un chico en una ciudad, mira a una chica. Después mira a otra.” Con esta simpleza se presentaba la última película del director del documental “En construcción”. El argumento es sencillo, un chico se enamora de una chica llamada Sylvie en Estrasburgo. Seis años después el chico vuelve a esa ciudad a buscar a Sylvie. En este viaje, el chico se dedica a mirar a su alrededor siendo consciente de cada detalle que le rodea, mira mujeres, las dibuja, escribe notas, se deja embriagar por el sol y los sonidos de una ciudad tranquila y vieja hasta que en un momento dado, ve a una chica que parece ser la tal Sylvie, a la que persigue, convirtiéndose la película en un muestrario de la ciudad de Estrasburgo y sus rincones. Se trata de una película sin apenas diálogo que se convierte en una metáfora de la búsqueda del amor como la búsqueda de algo idealizado que no necesariamente tiene que ver con la realidad, sino más bien con una imagen infantil y pura del mismo. Ésta es la primera película en la que Pilar López de Ayala actúa en francés, teniendo que estudiar los diálogos fonéticamente, un esfuerzo más en una carrera profesional llena de obstáculos superados.
Las 13 rosas (2007)
Carlos Fonseca publica en abril de 2004 “13 Rosas Rojas”, un libro que cuenta la historia de 13 chicas jóvenes asesinadas por la represión franquista. En el 2007 Emilio Martínez-Lázaro se inspira en ese estudio histórico para rodar “Las 13 Rosas” creando una película que pertenece a lo que ya es un subgénero dentro del cine español, que es el subgénero del cine español de la Guerra Civil. Generalmente, este subgénero se caracteriza por contar la historia de la Guerra Civil Española desde el punto de vista del bando republicano, y esta película no es una excepción aunque aun así, vemos secuencias en las que se reconoce que los que habitualmente aparecen como buenos en estas películas, en realidad no lo eran tanto. Precisamente vemos esto en las escenas en las que aparece Pilar López de Ayala en el papel de Blanca Brisac una madre y esposa católica que durante la guerra, se ve obligada a ocultar sus imágenes religiosas, porque era peligroso que éstas fueran encontradas en zonas ocupadas por los republicanos. Emilio Martínez-Lázaro usa la historia trágica de estas chicas para crear una película que parte de lo que serían las vidas de unas chicas jóvenes de la época para acabar centrándose en el hecho que por desgracia las hizo famosas. En esta película el papel más fuerte y decidido es el que interpreta Verónica Sánchez. Pilar López de Ayala mantiene una actitud de debilidad y firmeza a la vez frente al resto de actrices, todas convencidas de los ideales que defienden hasta el final, sin embargo al personaje de Blanca Brisac se le da un papel especial, siempre está con sus compañeras, pero al mismo tiempo mantiene sus creencias, lo cual hace que la sentencia que finalmente acabó con ellas no fuera solo cruel, sino también incoherente.
Solo quiero caminar (2008)
En 1995 Agustín Díaz-Yanes dirigió su primera película de la que también era el guionista, estoy hablando de “Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto”. En ella aparece el personaje de Gloria Duque interpretado por Victoria Abril, ése es el único nexo de la “Nadie hablara…” con “Solo quiero caminar”. La última película de Agustín Díaz-Yanes es una historia de venganza. Gloria Duque sigue siendo una ladrona, y a lo largo de los años ha hecho amistad con otras tres mujeres que la acompañan en sus robos. Una de ellas acaba casándose con un mafioso mexicano y acaba viviendo allí, pero es maltratada hasta el punto de quedar en coma. A raíz de estos acontecimientos, Gloria Duque y sus amigas deciden robar al mafioso que ha maltratado a su amiga como venganza. Pilar López de Ayala es una de las amigas de Gloria Duque, junto con Ariadna Gil y Elena Anaya. La película decepciona en lo que se refiere al ritmo narrativo, en general Elena Anaya y Pilar López de Ayala están muy desaprovechadas, sobre todo Elena Anaya que desde luego pude dar mucho más que lo que se le pidió. En cuanto a Pilar López de Ayala encontramos cierto cambio de registro, de su dulzura y habitual fragilidad sigue quedando algo, pero la vemos desenvolverse con cierta soltura en escenas de acción en las que se ve obligada por primera vez a la acción cuerpo a cuerpo y al uso de armas.
Filmografía
- Medianeras (2009)
- Lope (2009)
- Sólo quiero caminar (2008)
- Comme les autres (2008)
- Las 13 rosas (2007)
- En la ciudad de Sylvia (2007)
- Alatriste (2006)
- Bienvenido a casa (2006)
- Obaba (2005)
- El puente de San Luis Rey (2004)
- Juana la Loca (2001)
- Besos para todos (2000)
- Báilame el agua (2000)
- La gran vida (2000)
- Aviso de bomba (2000)
- El paraíso perdido (1999)
- El niño invisible (1995)
Televisión
- Hospital central (2000)
- Al salir de clase (1997-2001)
- Menudo es mi padre (1996)
- Yo, una mujer (1996)
Premios
Festival Internacional de Cine de San Sebastián
Año Categoría Película Resultado 2001 Concha de Plata a la mejor actriz Juana la Loca Ganadora Premios Goya
Año Categoría Película Resultado 2005 Mejor interpretación femenina de reparto Obaba Candidata 2001 Mejor interpretación femenina protagonista Juana la Loca Ganadora 2000 Mejor actriz revelación Besos para todos Candidata Enlaces
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