Xosé María Fernández Freixanes es un pintor nacido en Pontevedra en 1953.

Vivió el ambiente artístico desde muy pequeño, ya que es hermano del escritor Víctor F. Freixanes, de precoz vinculación e influencia en los medios intelectuales de Galicia. Cursó la carrera de Bellas Artes en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid. Fue becario de la Diputación provincial de Pontevedra. Se vinculó a Atlántica, con cuyas muestras en Bayona, Compostela y Madrid se dio a conocer, como uno de los más inquietos ejemplos de la vanguardia plástica de Galicia.

Durante algún tiempo residió en el País Vasco, tiempo en que su obra acusó una tendencia social y hasta panfletaria. Después se trasladó a Madrid, donde reside habitualmente, si bien nunca se ha desvinculado de su país natal.

Ha realizado murales en centros de enseñanza e instituciones de Galicia, como Ponteceso y Compostela, y exposiciones en numerosas ciudades del país, en toda España y en el extranjero, a partir de 1972, cuando aún no había cumplido los veinte años. Su representación en muestras colectivas de importancia ha extendido su nombre, que goza de un gran prestigio entre la crítica más exigente. Fue seleccionado en la I Mostra Unión Fenosa, en 1989.

Está representado en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, en el de la Diputación Foral de Alava, en Vitoria, y en otros de Galicia y de diferentes ciudades de España, así como en importantes colecciones institucionales, entre ellas la de la Junta de Galicia.

La pintura de Freixanes es eminentemente conceptual y como elementalizada, de concepción por completo abstractiva, aunque no siempre por completo informalista. Vagas insinuaciones de objetos se instalan en amplios fondos neutros, que muestran a veces elementos de "collage", reales o simulados. Es una pintura muy meditada, y sin embargo como al desgaire; tal que si no le preocupara la calidad formal, que al fin posee en alto grado, aunque renunciando a cualquier preciosismo.

La formación cultural del artista le lleva a recordar a multitud de artistas, comenzando por Antoni Tàpies, si bien al fin se impone siempre su propia personalidad. Sus telas, de considerable tamaño con frecuencia, insinúan fondos marinos en los que flotan raros objetos sumergidos, bultos o redes, en un cromatismo deliberadamente asordado, en composiciones que pueden recordar, sin identificarse por completo, tendencias del surrealismo.

La materia, muy tendida, en pincelada ancha y despreocupada, semeja mero boceto, como si la obra no estuviera concluida. Sus formas inconcretas se inscriben en amplios espacios y resultan inquietantes en su apariencia de rascadura, de trazo a primera intención. La personalidad de Freixanes es firme, inconfundible, pese a deambular por corrientes estéticas muy transitadas en esos últimos años.

Bibliografía

• Seoane, Xavier: Identidade e convulsión. Sada, Ediciones do Castro, 1990.
• Castro, Antón: Freixanes. Pontevedra, Excelentísima Diputación de Pontevedra, 1992.
• Castro, Antón: Expresión Atlántica. Santiago de Compostela, Follas Novas, 1984.
• Calvo Serraler, Francisco: 50 años de Arte español.

Madrid, Fundación Santillana, 1985.

• Freixanes, Víctor: Teoría (breve) de la salvación.

Madrid, Galería Juana Mordó, 1990.

• Xesús R. Jares "A mirada global da paz" en el capítulo I "O mundo no que vivimos algúns conflictos e retos urxentes" del catálogo "Construír a paz, Cultura para a paz".

Obras del autor

Obras del autor pertenecientes a la Colección Caixanova