Lancelot Ernest Holland

Lancelot Ernest Holland (Banbury, Inglaterra 13 de septiembre de 1887- Atlántico, 24 de mayo de 1941) fue un marino con el grado de vice-almirante en la Real Marina Británica, comandante del Escuadrón de Cruceros de Batalla durante la Segunda Guerra Mundial y que falleció a bordo del HMS Hood en la Batalla del Estrecho de Dinamarca, el 24 de mayo de 1941.

Biografía

Nació en Banbury en 1887 en el seno de una numerosa familia dedicada al negocio de la cerveza, tenía además 6 hermanos más.

Lancelot Holland se unió a la Royal Navy el 1902 recibiendo instrucción a bordo del HMS Britannia especializandose en la rama de artillería. En 1903 fue trasladado al oriente sirviendo en el HMS Eclipse y el HMS Hampshire^[1]

En 1911, realiza un crucero de instrucción a bordo del HMS Excellent, un buque escuela de artillería recibiendo el grado de teniente de Marina. ^[2]

En 1926 recibe el grado de capitán de navío y durante el período de mayo de 1929 a febrero de 1931 fue capitán del buque insignia para el 2 º escuadrón de cruceros, a bordo del HMS Hawkins. Fue además nombrado como Comandante de la Orden del Redentor.

Asume en el periódo 1934- 1935 como comandante del HMS Revenge y en 1936 recibe el ascenso a Comodoro de Flota y asume como jefe de Intendencia en Portsmouth hasta 1937.^[3] Asciende como vice-almirante en 1941 y se le asigna el comando del 1er. Escuadrón de Cruceros de Batalla y es segundo en el escalafón naval de la Home Fleet.

El 12 de mayo de 1941, en preparación para acción inminente, aborda en Scapa Flow al crucero de batalla HMS Hood y conforma una escuadra de combate junto al HMS Prince of Wales (en trabajos de terminación) y una formación de destructores en previsión de interceptar al acorazado Bismarck avistado en Noruega.

Vida final

El HMS Hood, orgullo de la Royal Navy y buque insignia de Holland.

El 23 de mayo de 1941, recibe la orden de interceptar la formación alemana compuesta por el crucero pesado Prinz Eugen y el acorazado Bismarck que cruza el estrecho de Dinamarca buscando salida al Atlántico. La formación inglesa navega en silencio radial y a toda máquina toda la noche para poder cruzar la T del enemigo en la amanecida.

Los cruceros HMS Suffolk y HMS Norfolk hacen seguimiento del enemigo por radar e informan de la posición de la formación alemana. Holland destaca a los destructores en una ruta un poco más al norte en previsión de que el enemigo decida retornar. Solo el HMS Hood y el Prince of Wales siguen hacia el oeste.^[4]

La formación alemana es detectada por hidrófonos a eso de las 5 de la mañana y Holland decide esperar contacto visual a la amanecida antes de interceptar la formación y favorecer a las direcciones ópticas de tiro artillero.

Una vez detectada visualmente, el vice-almirante Holland decide acortar las distancias lo antes posible y ordena apuntar hacia el buque de cabeza que asume que el acorazado Bismarck. A 24 km de distancia, Holland ordena abrir fuego sobre el buque incorrectamente identificado como el Bismarck cuando aún no alcanza la distancia para oponer su blindaje lateral y esto gatilla la contenida respuesta alemana de abrir fuegos y de este modo la trayectoria balística enemiga lo expone en su escuálido blindaje horizontal, un serio error táctico que permite a los alemanes, que cuentan con mejores estaciones directoras de tiro artillero, centrarlo a la 6a. andanada. El HMS Hood explota en una dantesca explosión y se parte en dos, Holland aferrado al puente del compás se hunde con la parte proel del Hood en menos de tres minutos, solo se salvan tres tripulantes de un total de 1415 hombres de mar.^[5]

Notas

Muchos historiadores han criticado la gestión táctica del Holland en la batalla del estrecho de Dinamarca principalmente por provocar una respuesta adelantada del enemigo mientras estaba en fase de acercamiento. Uno de ellos, el barón Burkard von Müllenheim-Rechberg sobreviviente del Bismarck, en su libro: Acorazado Bismarck; Historia de un sobreviviente, critica la táctica de acercamiento de los ingleses.

Referencias

Enlaces externos y bibliografía

• El hundimiento del Bismarck, Ludovic Kennedy. Collins/Fontana, Glasgow, 1975.