Matanza Aguas Blancas

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Matanza Aguas Blancas es (escribe una breve introducción). Además, él/ella (di cuáles fueron sus premios).^[1]

Historia

Antecedentes

El 28 de junio de 1995 se suscitó en México, específicamente en el Estado de Guerrero uno de los acontecimientos más impactantes sobre el abuso de autoridad de los últimos tiempos.

Ernesto Zedillo siendo entonces Presidente de la República, dejó que ciertas instituciones legales funcionaran por sí solas y sin la intromisión del PRI, como se había dado durante todo el tiempo que el sistema llevaba funcionando. Sin embargo, estas instituciones solo podían llevar a cabo sus funciones de una manera “regular” con la presión que en ellas llegó a ejercer el presidente, justo lo que Zedillo se oponía a hacer.

Una de las pruebas más grandes a las que se enfrentó el cambio que proponía Ernesto Zedillo fue la matanza de Aguas Blancas, Guerrero. Este lugar, ubicado en una región agrícola pobre, que durante años había albergado a la OCSS (Organización Campesina de la Sierra del Sur), la cuál ponía resistencia y luchaba por mejores tierras, salarios justos para campesinos y maestros, policías corruptos y violentos, y por habitantes que se oponían al régimen priísta, fue testigo de una de las pruebas más dolorosas del gobierno zedillista.

El gobernador del estado era Rubén Figueroa Alcocer, priísta, heredero del sistema, con cuatro generaciones que habían gobernado Guerrero. Una de las ventajas con las que contaba y presumía Figueroa Alcocer era la de ser compadre de Zedillo, por el hecho de que este había asistido a una boda de su familia.

El 28 de junio de 1995, 24 campesinos de la OCSS y otros pasajeros, viajaban en una camioneta para dirigirse a un mitin a una ciudad cercana. Al pasar por Aguas Blancas hallaron el camino cerrado y sufrieron una emboscada por parte de policías del estado quienes dispararon de una manera arbitraria contra los campesinos. Al final del ataque escurría sangre por todos lados de la camioneta y sus ocupantes se encontraban muertos o heridos. Hubo 17 muertos y 20 heridos, pocos salieron ilesos.

A partir de estos hechos se van a dar una serie de situaciones y de acontecimientos que cambiaron en gran parte la vida de este país y la relación que los medios de comunicación mantenían con el gobierno. Un hombre clave para esto fue Ricardo Rocha.

Ricardo Rocha, periodista y conductor, trabajaba para Televisa aunque las políticas de la empresa nunca habían sido de todo su agrado. Rompía con las reglas convencionales a las que estaba la televisión mexicana acostumbrada. Creó un programa televisivo llamado Detrás de la Noticia, en la que mostraba reportajes especiales los fines de semana. Rocha presentó varios programas sobre Aguas Blancas. En febrero de 1996 sin embargo, un video llegó a sus manos y esto cambiaría para siempre el rumbo de la investigación y la verdad que el sistema del PRI había estado difundiendo los últimos ocho meses.

La divulgación de estos videos cambiaría al 100% el rumbo de la investigación, el presidente tendría que intervenir en lo sucedido, la Suprema Corte de Justicia investigaría por fin los hechos y la Figueroa Alcocer dejaría el cargo de gobernador de Guerrero. Samuel del Villar fue otro elemento clave para la investigación. Abogado y miembro del PRD este hombre dedicó tiempo a la investigación real de los hechos, estuvo cerca de los testigos y denunció lo que había pasado en Aguas Blancas sin obtener resultado alguno. Vivió algún tiempo en guerrero y presentó toda clase de denuncias tanto en tribunales estatales como federales sin poder lograr que se responsabilizara a Figueroa Alcocer de los hechos ocurridos.

Desarrollo

A través de tres periódicos que escogimos, La Jornada, El Universal y Excélsior, podemos relatar los hechos del 28 de Junio de 1995, entre las poblaciones de Paso Real y Aguas Blancas, en la Sierra de Coyuca, donde se registro una matanza de campesinos a manos de la policía, las versiones varían de lo que paso en el lugar, así como la cifra de muertos y heridos, dependiendo del periódico del que hablemos.

El relato es que a las 11 de la mañana del día 28 de Junio de 1995, en el camino que lleva de la comunidad de Paso Real a la comunidad continua, Aguas Blancas, 60 campesinos que iban en un camión Torton, fueron baleados por un grupo de policías, los cuales adjudicaron la culpa a los campesinos, que según los oficiales, llevaban armas de fuego, lo cual termino en una matanza de 16 campesinos, aparte de 19 heridos y 8 desaparecidos, según la jornada; de 14 muertos y 23 heridos, de los cuales 2 eran policías, según el boletín especial del gobierno; de 18 muertos y 21 heridos, según el universal, y; 14 muertos y 21 heridos según Excélsior. De estas cifras podemos destacar los 8 desaparecidos de los que la jornada habla.

De los que iban en la camioneta, manejada por Mauro Hernández (La Jornada), 30 personas, que se supone iban a un mitin para exigir el suministro de insumos agrícolas que el gobierno del estado les había prometido, eran de la Organización Campesina de la Sierra del Sur(OCSS), la cual es una organización social que se dedica a defender los derechos de los campesinos y que tenia presencia en 5 municipios de la sierra de la Costa Grande, así como muchos de sus integrantes eran ex perredistas, y los otros 30, simplemente iban a vender sus productos. Otra razón por la que irían a hacer el mitin, era que el pasado 24 de mayo había desaparecido Gilberto Romero Vázquez, miembro de la OCSS, y hacían responsable a la presidenta municipal, María de la Luz Núñez Ramos.

La versión de los campesinos es que ellos no levaban armas, que los policías estaban en un reten, y que al momento de ver el camión, empezaron a disparar, sin siquiera pedir que se parara, ya que los campesinos no tenían armas, no se pudieron defender y simplemente se cubrieron de las balas, dejando según ellos, a muchas personas inocentes muertas, ya que ni siquiera tenían que ver con la organización. Según las palabras de uno de los campesinos, Marcos Carranza Arizmendi, “Ningún campesino llevaba armas de fuego” y también Concepción Hernández Rodín, que perdió a su hijo en la emboscada aclaró “Veníamos puros pasajeros, ninguno llevaba armas, no hubo ningún enfrentamiento, traíamos maíz, unos venían enfermos, murió muchas gente inocente”, lo cual dejaba en claro la versión de los campesinos encontradas en el periódico la Jornada.

La versión del gobierno fue que, habitantes del estado de Tepetixtla que llevaban armas de fuego de alto calibre, machetes, varillas y palos, encabezados por José Asunción Domínguez, Mario Sánchez Flores y benigno Guzmán Cruz, los tres identificados como miembros de la OCSS, agredieron a los policías, quienes repelieron el ataque, y así fue como empezó la balacera. Según el conflicto empezó cuando se le dio un machetazo al comandante Lorenzo Roque Cortez. Gustavo Olea Godoy, quien fungía como Director General de la Policía Judicial del Estado, hablo de que la camioneta fue detenida para una inspección rutinaria, en un reten instalado a petición de los mismos habitantes de la población. También, el chofer del Torton Saúl Luna Nava (EL universal), confesó haber sido secuestrado y obligado a llevar a los campesinos a la siguiente población, y también afirmó que había visto que los primeros en disparar habían sido los campesinos que iban en su unidad.

En el párrafo anterior, se ve claramente que cambia el nombre del chofer anotado por la Jornada, así como la declaración del segundo chofer, la cual solo se encuentra en el Universal y en el Excélsior, por lo cual se infiere que una de estas dos declaraciones está mal o distorsionada.

A las 6 de la tarde del mismo día, mandaron a tocar las campanas de Coyuca de Benítez, con el objetivo de juntar campesinos para hacer un plantón fuera del palacio municipal del mismo lugar. Hubo una concentración de 400 personas, los cuales pedían, la entrega de los cuerpos de sus familiares que habían sido llevados al Servicio Médico Forense de Acapulco y la investigación y esclarecimiento de los hechos que se habían presentado en la mañana. Héctor Ponce Padilla, líder local del PRD, fue detenido por la policía Judicial del Estado por 3 horas, y amenazado con matarlo si no levantaba el plantón frente al palacio municipal. Mientras se llevaba a cabo el plantón, estaban reunidos en una bodega particular, en donde no se dejo entrar a ningún medio y que estaba resguardada por los mismos policías de la mañana, el alcalde de Coyuca, Jesús Herrera Velázquez; el secretario de gobierno, Rubén Robles Catalán; el director general de seguridad pública del estado, Rosendo Armijo de los Santos; y el director de la Policía Judicial, Gustavo Olea Godoy.

En una marejada de declaraciones de los dos bandos, tanto de la izquierda, que buscaba el esclarecimiento de los hechos, como del gobierno, que defendía la operación policiaca que termino en una masacre, se entablaron los hechos contados por cada bando. El Co-presidente del PRD en Guerrero, Saúl López Sallano, condeno los hechos diciendo, “ No se puede tolerar un gobierno que masacra campesinos”. Así como, David Molina Francisco, dirigente del PRD en el municipio, dijo que el día anterior a los hechos, llegaron 10 camionetas y dos autobuses llenos de policías, y también que desde la mañana habían estado sacando las cosas personales del presidente municipal, y que también el día anterior se había efectuado la misma acción.

Ya en el DF, la diputada perredista, Leticia Burgos Ochoa, pidió ante el congreso un esclarecimiento de los hechos. También, según las declaraciones del gobernador del estado de Guerrero, Figueroa Alcocer, “La actitud violenta de los lugareños provocó el enfrentamiento”, así como también, que uno de los dirigentes de la OCSS, Benigno Guzmán Cruz, tenía varias órdenes de aprensión por homicidio, secuestro y lesiones. La Comisión de Derechos Humanos y Pueblos Indios del CEN del PRD, mando una carta al Presidente Zedillo, en la cual exigía una investigación y esclarecimiento de los hechos. La jornada fue el periódico que narró mejor lo sucedido, dándole un espacio importante en la portada a la noticia y también narrando las dos partes, tanto la del gobierno, como la de los campesinos, pero si, dándole más importancia a los campesinos, solo se tiene que leer la portada para saber a quién le iba a disparar, “16 campesinos asesinados en Guerrero”, y los sub titulares, “Emboscada de la policía: sobrevivientes; repelimos una agresión: Autoridades” y también, “Versión de que algunos fueron rematados; unos agricultores iban a vender y otros a mitin”.

Por otro lado, el Universal puso en su portada, en un pequeño espacio donde solo cabía el titulo, en la parte inferior derecha, “Chocan campesinos y policías en Guerrero; saldo 18 muertos”. En este periódico se le dio menos importancia de la que tenía, solo se redujo a narrar parte de los hechos y darle prioridad a las declaraciones del gobierno. Y por último el Excélsior, también en un pequeño recuadro, puso, “Enfrentamiento; mueren 14 campesinos”, y después, “Agredieron a policías en Coyuca de Benítez: PJ”, y también se infiere, por lo leído, que estaba completamente a favor del gobierno, no se tomo la molestia, ni siquiera de poner en duda las declaraciones.

La diferencia entre estos periódicos deja un recuadro de duda ante la realidad de los hechos, sin embargo, se puede inferir mucho de la verdad leyendo entre líneas de estos periódicos, y también tomando en cuenta no solo las acciones de ese día, sino todo el movimiento social que se había venido formando meses, e incluso años antes, siguiendo con una trayectoria de guerra sucia entre el gobierno y los campesinos buscando sus derechos como mexicanos.

Conclusión

Lo que podemos concluir de esto es la negligencia, irresponsabilidad y falta de respeto hacia la dignidad humana por parte del gobernador Alcocer Figueroa. Lo sucedido en Aguas Blancas muestra la total falta de respeto por parte del sistema hacia los habitantes de todo el país.

Es lamentable que a pesar de haber sido testigos de los agravios que sufrieron estos campesinos, en México sigamos quedándonos de brazos cruzados al ver como las autoridades abusan de su poder, de cómo en este país no se hace justicia y que las maniobras políticas siguen teniendo más poder que la justicia misma, y más lamentable es que los ciudadanos no hagamos nada. Un ejemplo claro de esto es el caso del gobernador de Puebla, Mario Marin y sus llamadas telefónicas y el abuso de autoridad que hubo en contra de Lidia Cacho y simplemente la Suprema Corte de Justicia tuvo que actuar por la presión del presidente en declararlo inocente, ya que Calderón necesitaba la ayuda del PRI para que se aprobara la Reforma Electoral.

En México no aprendemos de nuestra historia, simplemente porque no la conocemos.

Referencias

• Poder Judicial de la Federación (2003). La Facultad de Investigación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Los Casos León y Aguas Blancas. ( 2 a Ed. ) México, D.F., México. Suprema Corte de Justicia de la Nación.

• Dillon, S., Preston, J. (2004). El Despertar de México. Episodios de una Búsqueda de la Democracia. México, D.F., México. Oceano

• (28/06/1995).16 campesinos asesinados en Guerrero. La Jornada. 18

• (29/06/1995).Chocan campesinos y policías de Guerrero; saldo 18 muertos. El Universal. 17.

• (29/06/1995).Enfrentamiento: Mueren 14 hombres. Excélsior. 18.

Enlaces externos

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