Carlos Sentí Esteve (Valencia, 1920, Valencia 1993) fue un periodista, ensayista, crítico de arte y médico español.

Biografía

Carlos Sentí Esteve nació en Valencia, en 1920. Estudió Magisterio y comenzó los estudios de Medicina en la Universidad de su ciudad, que se vieron truncados por el estallido de la Guerra Civil. Al finalizar la contienda, fue nombrado Jefe Nacional de Prensa del Sindicato Español Universitario, lo que despertó su vocación periodística que ejerció hasta su jubilación. Se graduó en la Escuela Oficial de Periodismo (EOP) de Madrid en 1951. Y aunque profesionalmente siempre trabajó en la radio y en prensa, continuó aisladamente los estudios de Medicina, licenciándose ya con sesenta años de edad y, aunque estuvo colegiado, nunca ejerció esta segunda profesión. A mediados de los años cuarenta, Sentí regresó a su ciudad natal, dejando sus tareas en el SEU de Madrid, y colaboró activamente en los tres diarios de esta ciudad, Levante, Las Provincias y Jornada, ingresando como redactor del primero de ellos en 1957, al tiempo que fue fundador, desde 1950, de la emisora de Valencia de RNE de la que fue jefe de redacción. Especializado en temas literarios y artísticos, fue autor de libros de versos como “Dos Rompientes”, y de prosa como “El denario de papel”, “Cuentos del meridiano cero”, “Las veinticuatro y una horas” y colecciones de cuentos previamente publicados en la prensa. En 1960 ganó el Premio Valencia de poesía por el libro “Dos rompientes” y consiguió diversos galardones en distintos certámenes de la Olimpiada del Humor y el Premio Nacional de Teatro Universitario por la obra “El anfitrión del destino”, escrita en colaboración con el también periodista Manuel R. Cuevillas. En opinión de su amigo y periodista Rafael Brines Lorente “Sentí fue un crítico de arte, que unía al conocimiento de la plástica un fino sentido de la expresión. Alcanzó gran raigambre entre los valencianos por sus comentarios, críticas y reportajes en prensa y radio y, sobre todo, por sus amenas intervenciones en tertulias, charlas y cenáculos, donde logró divulgar la labor de los artistas y promocionar el arte entre el gran público”. Su nombre está incluido en la “Gran Enciclopedia de la Región Valenciana” (1973), en el “Diccionario de Artistas Valencianos del siglo XX” (1999) y en el libro "artistas valencianos del siglo xx" (2000). Falleció en Valencia, en 1993.

Carácter e idiosincrasia de su obra

Carlos Sentí Esteve, cuya labor en este terreno se prolongó cerca de cuatro décadas, fue uno de los más conspicuos críticos de arte valenciano. Periodista, médico, coleccionista, conferenciante y conversador, fue un intelectual de amplias miras. Autor además de novelas humorísticas, fue además un excelente y cálido poeta lírico y un formidable comentarista de arte. Su poderosa personalidad intelectual y las características de su obra, tan original, formalista, enjundiosa y atractiva, cargada de cultura, humor e ironía, le han convertido en uno de los personajes de la “intelligentsia” más emblemáticos de la segunda mitad del siglo XX. Un personaje que hay que rehabilitar y recuperar, situándolo en el lugar que merece por sus méritos, sobre todo en el terreno de la literatura y de la crítica de arte, donde fue protagonista principal. Carlos Sentí compaginó la profesión periodística y la crítica de arte en emisoras de radio y en la prensa diaria de Valencia, con la actividad literaria, centrada principalmente en la novelística, la poesía y la dramaturgia, en las que impregnó un sello de humor e ironía sarcástica a sus obras. Sin embargo, fue en el campo de la crítica de arte donde su nombre alcanzó un enorme prestigio y popularidad tanto entre el público general como entre los artistas que lo respetaban y admiraban por la profundidad de sus comentarios, su elevada cultura y su forma personal de interpretar el hecho artístico. Fue en la sección de arte y exposiciones de la emisora radio Nacional de España y del periódico Levante, en donde realizó una encomiable labor a favor de la difusión del arte y en la promoción de los artistas, y muy especialmente de los más jóvenes. Alcanzó el respeto de todos por la coherencia, la honestidad y la justeza de sus comentarios de críticas y exposiciones, con términos certeros y con una profundidad de miras extraordinaria sobre lo que trataba de emitir una opinión. Y ello porque manejaba cautamente unos profundos conocimientos sobre arte, una sensibilidad a flor de piel y un dominio técnico de la escritura. Carlos Sentí poseía un admirable bagaje cultural fruto de sus estudios de Magisterio, Periodismo y de Medicina –cuya licenciatura consiguió mientras trabajaba- como de su afición por la lectura y su pasión por la literatura, sobre todo, de los clásicos. La conversación con él deparaba una de las experiencias dialécticas más extraordinarias, pues sus comentarios y observaciones estaban repletos de anécdotas, de citas de los clásicos y de amenidad. Ello hizo de él un interlocutor hábil y un conferenciante abrumador con una capacidad para transmitir sus ideas de una manera amena y hábil. Así, un programa de arte o una conferencia suya era siempre una experiencia enriquecedora por el alcance y la consistencia de sus puntos de vista. Además estaba su prosa, su estilo literario perfecto, ágil y cáustico, donde siempre prevalecían sus enormes conocimientos y sensibilidad, que a veces se remansaba en lo poético mientras en otras era capaz de matizaciones filosóficas y hasta humorísticas, pues siempre fue un poderoso intelectual humanista lleno de sarcasmo e ironía. Carlos Sentí fue uno de los primeros críticos de arte en alinearse en la punta más destacada de la vanguardia valenciana de los años cincuenta, sesenta y setenta, y conectar su sensibilidad con los acontecimientos artísticos que acontecían en el extranjero, principalmente en París. En sus comentarios apoyó la creación de los distintos grupos de vanguardia que surgían en Valencia – Parpalló, Arte del Mediterráneo, Arte Actual, Equipo Crónica, Equipo Realidad, Antes del Arte- y como jurado de importantes premios locales- Marzo, Ateneo Mercantil, Primavera- apoyó a jóvenes artistas y abrió nuevos caminos artísticos. A veces en compañía y a veces en solitario.