- Colegiata de Santa María de Arbas
-
La Colegiata de Santa María de Arbas es una iglesia que se encuentra situada en Arbas del Puerto, al norte de la provincia de León (España) y pertenece al Ayuntamiento de Villamanín.
Es paso obligado para quienes van de peregrinación a Santiago de Compostela, pasando previamente a visitar la Catedral de San Salvador de Oviedo, recorriendo el tramo conocido como Camino Asturiano.
Desde León, ciudad por donde pasa el denominado Camino de Santiago Francés, los peregrinos subían hacia el norte para visitar San Salvador, pasando por Pola de Gordón, Arbas, Casa Tibigracias, Puente de los Fierros, Campomanes, Pola de Lena, Mieres, Olloniego, La Manjoya y Oviedo, donde se enlaza con el Camino de Santiago de la costa o Ruta del Norte. Es conocido desde la Edad Media el dicho de "quien va a Santiago y no visita al Salvador, va a casa del criado y no visita a su señor", existiendo varias frases para referirse a lo mismo, como "quien va a Santiago y no visita al Salvador, visita al criado y deja al señor" o "quien va a Santiago y no visita al Salvador, sirve al criado y deja al señor".
Contenido
Historia
En torno al año 1092, una comunidad monástica, más concretamente canónigos regulares de San Agustín, se asentó en el pueblo de Arbas. Dada la posición estratégica de dicho pueblo en la ruta hacia San Salvador de Oviedo y el asentamiento de la comunidad religiosa, en el año 1116, aún no conservándose documento al respecto, según el historiador Menéndez Pidal, fue fundado un hospital por orden del conde Fruela, cuya finalidad era la de ser albergue de peregrinos en su paso hacia Oviedo.
Pese a ser una construcción muy tosca y pobre, destinada básicamente a guardar el ganado de la comunidad, tuvo su importancia y relevancia ya que aparte de a los peregrinos, servía de alojamiento a los pobres que así lo solicitaban. Se le conocía también como “Casa de los Probes”.
Precisamente la existencia de ese hospital fue la que propició que durante el reinado de Alfonso IX, más concretamente en el año 1216, se empezara a levantar, junto al albergue, la Iglesia de Nuestra Señora de Santa María de Arbas. El templo sufrió una serie de transformaciones a lo largo de los siglos, entre las que podemos destacar el adosamiento a la nave norte de unas capillas góticas. También podemos hablar del pórtico de entrada que se cubre con una crucería, donde predomina la ornamentación de ciertas partes con formas alusivas al Camino de Santiago, como pueden ser la cruz de la Orden de Santiago.
En el año 1693 concluye la construcción de una torre, adosada a los pies de la iglesia, donde se ubicó el coro, y que fue concebida para hacer las funciones de pórtico. Con posterioridad, concretamente en el año 1723, se construye la llamada "Casa del Abad", que se corresponde con la actual residencia de los sacerdotes oficiantes de la zona.
Durante la guerra civil española, la iglesia fue saqueada, siendo la imagen original de la Virgen pasto de las llamas en el año 1936, y siendo sustituida por una copia, obra del escultor Seoane Otero, de la Virgen del Monasterio de Gradefes. La imagen original forma parte de las reliquias de San Isidoro de León.
En los años 60, la Dirección General de Bellas Artes encargó al arquitecto Luis Menéndez Pidal Álvarez la restauración del edificio, siendo su última morada, puesto que su sepulcro se encuentra en el muro septentrional de la colegiata.
Ha sido declarado Monumento Histórico Artístico desde el año 1931.
Estilo
Se puede catalogar a la Iglesia como genuina representante del eslabón entre el románico leonés y el asturiano. Un románico tardío que busca un acercamiento con la estética gótica, a la vista del carácter vegetal de la mayoría de sus capiteles.
Este estilo tardío recibe el nombre o es conocido como Arte 1200, con una estética más depurada y ciertamente, sombría. El conjunto de por sí es sobrio.
Se puede decir, a la vista de todo el edificio, que en él se reflejan y entremezclan varios estilos. Gótico en la semicúpula del ábside central, con características de las usadas en las Catedrales castellanas de Toro, Zamora y Salamanca, y románico astur en casi todo el resto, por lo que no es descabellado pensar en la intervención de dos tipos de artistas, dadas las formas tan diversas que se encuentran.
Estructura
Se puede decir que la iglesia tiene planta basilical formada por tres naves, modelo no habitual en los edificios eclesiásticos de la provincia de León, destacando la central por su altura y anchura, siendo rematadas todas ellas por ábsides de forma cuadrada, los laterales y semicircular, el central.
En su origen, la cubierta de la nave central consistía en un artesonado de madera que con el tiempo fue sustituido por tres bóvedas de terceletes (nervio suplementario de las bóvedas de crucería, que arranca del ábaco del capitel para terminar en las cadenas), en tanto que las laterales lo hacen con las de tipo arista.
Las naves están separadas por cuatro pilares cruciformes con columnas, en número de cuatro también, adosadas sobre plintos, todos ellos ornados con una gran variedad de bolas, flores y garras. Destaca asimismo, la falta de crucero.
La portada principal, que se sitúa en el lado meridional, está protegida por un pórtico del siglo XVIII, y se compone de arco de medio punto, así como tres arquivoltas, alzándose sobre un zócalo.
Existe en el lado occidental otra portada que se apoya sobre dos mochetas, las cuales están decoradas con un oso y un buey. Es de arco de medio punto y tímpano liso. La decoración escultórica de todo el edificio destaca por la presencia de figuras de animales, motivos geométricos y figuras humanas, así como motivos vegetales. Se puede hablar también de una tercera portada, cuyos restos aún se pueden ver en la zona norte de la iglesia, pero desaparecida al adosarse al edificio una capilla
Leyenda
Como suele ocurrir al hablar de este tipo de edificaciones, existen leyendas respecto de las mismas, siendo la más conocida respecto de la Colegiata de Arbas la del buey y el oso, que se remonta al siglo XVIII.
Según las creencias populares, dos eremitas que vivían en el lugar donde se estaba construyendo la iglesia, tenían dos bueyes que usaban para acarrear los materiales para la construcción de la misma, pero una noche, un oso devoró a uno de los bueyes. Pero uno de los dos monjes carreteros, en lugar de rendirse a lo que había ocurrido, unció el oso al yugo junto con el otro buey y desde ese momento ocupó el lugar del buey muerto.
Por esa razón se representan ambos animales en la portada del lado occidental, ¿o se puede decir, que al estar representadas las imágenes, eso dio lugar a la leyenda?. En referencia a esta leyenda, en el escudo de Villamanín, aún cuando el escudo representa más, en realidad, al antiguo Concejo de Arbas que a la totalidad del territorio de La Tercia, la definición heráldica reza "Escudo de gules, una colegiata de oro mazonada de sable y surmontada su nave de una testuz de toro y una cabeza de oso, ambas de oro, puestas en faja. Al timbre corona real cerrada".
Enlaces externos
Categorías:- Iglesias de la provincia de León
- Colegiatas de España
- Arquitectura románica de la provincia de León
- Arquitectura en España en el siglo XIII
Wikimedia foundation. 2010.