Real Colegio de España

Entrada principal del Real Colegio de España.

Vista del patio interno y la loggia

Vista exterior.

Vista exterior.

El Real Colegio de España, también conocido como Real Colegio Mayor de San Clemente de los Españoles, es un colegio universitario para estudiantes españoles de la Universidad de Bolonia. Es el más famoso de los veinticuatro fundados en la ciudad entre los siglos XIII y XVII y aun sigue recibiendo colegiales de toda España para cursar estudios de doctorado en todas las disciplinas.

Historia

El Real Colegio de España lo fundó el cardenal Gil de Albornoz (1310–1367) mediante disposición testamentaria otorgada en Ancona el 29 de septiembre de 1364. El cardenal instituyó así el colegio, cuya edificación él mismo había contribuido a diseñar, y lo nombró su heredero universal con la finalidad de facilitar el estudio de jóvenes intelectuales españoles en la ciudad de Bolonia, que por aquél entonces ya era un centro de conocimiento consolidado en Europa.

Desde que comenzó a recibir estudiosos en 1369, el colegio ha constituido un punto de encuentro e intercambio intelectual, cultural y de todo tipo, entre ciudadanos españoles e italianos. Desde el principio se convirtió en modelo para la práctica totalidad de los colegios universitarios que comenzaron a surgir en España, como el de la Universidad de Salamanca (el Colegio Viejo, de 1401)(Real Colegio Mayor de San Bartolomé y Santiago) de Granada, así como los fundados en otras universidades españolas de los siglos XV y XVI.,,^[1] llegando su impronta a Hispanoamérica, como así lo demuestra la fundación del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, en Colombia, en 1653.

Entre los colegiales de más renombre que se han hospedado en el Real Colegio de España o los estudiosos que han estado vinculados a la casa albornociana en algún momento, se encuentran algunos de los más ilustres españoles, como Antonio de Nebrija, colegial en 1465, que allí elaboró la primera gramática del castellano; también Antonio Agustín, colegial en 1539; Juan Ginés de Sepúlveda, colegial en 1515 y seguramente uno de los más grandes estudiosos de Aristóteles; Álvaro Figueroa y Torres, más conocido como el Conde de Romanones. En 1793, Leandro Fernández de Moratín también frecuentó el Colegio y su admiración hacia la casa albornociana se constata, no ya sólamente por las referencias de su "Diario" o por su "Oda a los colegiales de San Clemente de Bolonia", sino también por algunas de las anécdotas protagonizadas. Durante su estancia en Bolonia, Fernández de Moratín pudo contactar con las élites teatrales italianas y llegó a desear jocosamente al entonces Rector, Simón Rodríguez Laso, que lo nombraran Arzobispo en México, para así intentar quedarse en el colegio. También Ignacio de Loyola visitó el colegio en 1535, Benito Pérez Galdós en 1888 y el propio Miguel de Cervantes, como así se desprende de la obra "La señora Cornelia", cuya verdadera fuente de inspiración seguramente sigue siendo un misterio.^[2] Debe tenerse en cuenta también que el 24 de febrero de 1530 se realizó en Bolonia la Coronación Imperial de Carlos I de España y V de Alemania. El emperador se hospedó en el colegio durante cuatro meses y desde allí partió el cortejo hasta la Basílica de San Petronio, donde se realizó el acto.

A todos estos ilustres personajes hay que sumar centenares de juristas, filólogos, médicos, científicos y humanistas de todos los lugares de España que durante siglos han desarrollado en Bolonia parte de su formación profesional y humanística. En la obra de A. Pérez Martín "Proles Aegidiana" (Publicaciones del Real Colegio de España, 1979 («Studia Albornotiana») se realiza un pormenorizado detalle de muchos de ellos. Los colegiales de Bolonia han ocupado históricamente altas responsabilidades dentro y fuera de España, en Europa y también en Hispanoamérica en determinados momentos históricos. En la actualidad, otros muchos siguen contribuyendo a la ciencia y la cultura desde sus diferentes lugares de trabajo, tanto en el ámbito público e institucional como en el privado.

El Real Colegio de España de Bolonia representa una institución única en el mundo. Por la idea anticipadora de España que materializa en 1364, por su longevidad y porque durante más de seis siglos ha mantenido siempre un nivel constante de excelencia en todos los ámbitos de conocimiento. Algo que seguramente se explica por su vocación eminentemente intelectual y su total independencia, por la ausencia de injerencia de todo tipo en su organización y actividades, centradas única y exclusivamente en la formación y estudio de sus huéspedes, elegidos en riguroso concurso nacional de méritos. La obra y biografía de cada uno de los antiguos y actuales colegiales, seguramente sea la mayor y mejor contribución de Gil de Albornoz a la vida académica e intelectual española. No obstante, la historia del Colegio, como se señala en su Web oficial (www.bolonios.it), no está exenta de momentos difíciles durante todo este tiempo. En los últimos siglos la casa fundada por Gil de Albornoz ha sufrido diversos intentos de usurpación e incluso alguna tentativa desamortizadora, también ha tenido que afrontar periodos de incertidumbre e inestabilidad, en España y en Europa, pero afortunadamente, de un modo u otro, siempre ha conseguido sobreponerse a la adversidad y recuperar el esplendor que le ha caracterizado desde tiempos ya casi inmemoriales.

El Colegio y Bolonia

El Real Colegio de España está muy vinculado a la ciudad de Bolonia desde el momento mismo de su fundación. Entre los más relevantes acontecimientos históricos deben destacarse incluso algunos previos, como los protagonizados por su fundador, Gil de Albornoz, que ya en 1361 llegó incluso combatir junto a ciudadanos de Bolonia para liberar la ciudad. Complicidad y sacrificio que se reflejan en los propios Estatutos del colegio, cuando lo encomiendan a la perpetua protección de “Los Rectores, Autoridades y Ancianos de la ciudad de Bolonia”, recordando también "su Justicia y loable Gobierno, y generoso favor con que los estudiantes siempre se ven acogidos paternalmente". Gil de Albornoz confía en que su colegio “se acreciente de bien en mejor” con el tiempo y que las autoridades y el pueblo lo protegerán por amor de aquél “que los sacó de una tiránica servidumbre y defendió heroicamente su ciudad” derramando su propia sangre junto a ciudadanos boloñeses.

Otro acontecimiento notable en la vida conjunta del colegio y la ciudad es la propia ceremonia de coronación del Emperador Carlos I de España y V de Alemania ya mencionada anteriormente. Este pasaje tiene una importancia histórica capital porque fue el momento en que el Emperador otorgaba la regia protección al colegio. Podría decirse también que aquél acto hizo por un día a Bolonia capital de España.

Desde entonces, la convivencia entre la ciudad y el colegio no ha cesado y ha procurado no pocos episodios de gran trascendencia. En la actualidad, con cierta regularidad, el colegio alberga diversas representaciones musicales, teatrales y otras variedades culturales en las que participan tanto los colegiales como ciudadanos de Bolonia y algunas personalidades. También patrocina en alguna ocasión eventos culturales en la ciudad e incluso diversas actividades académicas de relieve pueden desarrollarse también en sus salas (conferencias, seminarios, defensa de tesis doctorales, etc). También se reciben con frecuencia visitas de insignes académicos, altos representantes, diplomáticos e incluso algún Premio Nobel. Entre las personas que han tenido la ocasión de conocer la institución en los últimos años se encuentran S.A.R el Príncipe de Asturias, el Premio Nobel de química, Kary Mullis, también el ex-Secretario de Estado de Defensa de Estados Unidos, Robert McNamara, Antonio Garrigues Walker, así como escritores, altos representantes de diversos países, eurodiputados, diplomáticos, magistrados, etc. Todo ello, unido al buen hacer de sus colegiales, su complicidad con Bolonia y sus vecinos, ha hecho que la institución sea muy apreciada y querida por los propios ciudadanos de boloñeses, muchos de los cuales aprecian y conciben el colegio como una institución inseparable de la ciudad, de su paisaje y su historia.

Entre los gestos de complicidad más recientes entre la ciudad de Bolonia y la institución, seguramente deba destacarse la mañana siguiente al 11 de marzo de 2004, cuando la puerta principal del colegio apareció llena de flores, velas y notas anónimas de ciudadanos boloñeses transmitiendo sus condolencias, solidaridad y cariño por el atentado de Madrid. Quienes pudieron presenciar aquél episodio y leer algunas de las notas, describen la escena como «entrañable y sobrecogedora».

Regia protección

Este colegio, precursor de la afamada universidad, destacó y aún destaca por poseer la protección de los reyes de España. Algunos autores señalan que la protección comenzó con los Reyes Católicos bajo la autorización del pontífice Inocencio VIII en 1488. La llamada «regia protección» invocaba la protección de los reyes de España y estaba destinada a ennoblecer aun más las constituciones originales del colegio. No obstante, la protección regia debe situarse en 1530 gracias a Carlos I, como así consta en la inscripción de la capilla del colegio. Esa protección se mantuvo por otros reyes Felipe II y demás monarcas españoles.

Becas

El Real Colegio de España, a través de su patronato, ofrece becas a los mejores estudiantes españoles, incluidos los portugueses, en riguroso concurso nacional de méritos, para que cursen el doctorado en la Universidad de Bolonia y puedan dar continuidad así a la obra instituida en el siglo XIV. La inclusión de ciudadanos portugueses entre sus destinatarios seguramente se explica porque, además de que en otras épocas han existido colegiales de este país, no son pocas voces autorizadas las que entienden que lo correcto es hablar de «castellanos y portugueses, porque españoles somos todos».

Actualidad

Denuncia por discriminación

En 2010 una profesora de Derecho del Trabajo de la Universidad de Sevilla presentó una denuncia alegando discriminación^{[3] [4]} debido a los requisitos para recibir una beca del centro son: ser varón, ESPAÑOL (PORTUGUESES INCLUIDOS), católico, de conducta irreprensible, menor de treinta años, licenciado en España con muy buenas calificaciones, no padecer enfermedad ni defecto físico o psíquico incompatible con el ejercicio de las funciones correspondientes y no ser funcionario público..^[5]

Arquitectura

Proyectado por su fundador, Don Gil Álvarez de Albornoz, quien confió a Matteo Giovannelli (llamado il Gattapone) el seguimiento de la obra, el colegio está estructurado en dos plantas con un patio central porticado alrededor del cual se distribuyen las estancias y que conduce a la iglesia gótica. Las habitaciones de los estudiantes se asoman a la parte externa, que presenta una estructura fortificada y almenada; la fachada exterior fue sucesivamente remodelada en estilo renacentista.

Esta estructura defensiva del conjunto evidencia el objetivo del colegio de gozar de una relativa autosuficiencia respecto a la ciudad. Los estudiantes seguían incluso algunos cursos dentro del colegio mismo «donde se leen las Cathedras, una de Theologia, otra de Canones, otra de Leyes».^[6]

El edificio cuenta con un preciado portal de 1525, obra del Formigine. En el pórtico existe un fresco de Annibale Carracci, que sin embargo se encuentra en pésimas condiciones de conservación. Hay además dos frescos de Bartolommeo Bagnacavallo, mientra que el de Camillo Procaccini, en el ábside de la capilla de San Clemente fue destruido en 1914.^[7] En la capilla hay también un valioso políptico de Marco Zoppo.

La estructura y dependencias del colegio ha sido cambiante durante el paso del tiempo. Así, como se desprende de las descripciones de Juan Ginés de Sepúlveda, puede deducirse que la comida era abundante (pan, vino, 450 g de carne de ternera), si bien — parece ser — a menudo servida fría, puesto que las cocinas estaban lejos del comedor.^[8] En la actualidad la cocina no se encuentra lejos del comedor, aunque sí en una planta diversa, y la comida se sirve en su justo momento.

Notas

A. PÉREZ MARTÍN, Proles Aegidiana, Bologna, Publicaciones del Real Colegio de España, 1979 («Studia Alborno- tiana», XXXI)

SAR el Príncipe de Asturias recibe la máxima condecoración de la Universidad de Bolonia.

http://www.abc.es/hemeroteca/historico-04-10-2001/abc/Nacional/el-principe-de-asturias-recibe-la-maxima-condecoracion-de-la-universidad-de-bolonia_50932.html

Enlaces externos

• Página web del Real Colegio de España
• Rinaldo Froldi, El Colegio de España de Bolonia y la literatura española. http://www.biblioteca.org.ar/libros/89510.pdf
• De Bolonia a las Indias.

http://dspace.uah.es/jspui/bitstream/10017/6163/1/De%20Bolonia%20a%20las%20Indias.%20Los%20Colegiales%20de%20San%20Clemente%20en%20la%20Administraci%C3%B3n%20Americana%20Durante%20el%20S.%20XIII.pdf

• La nación de las Indias en la Universidad de Bolonia

http://e-spacio.uned.es/fez/view.php?pid=bibliuned:ETFSerie4-AC5CD246-B1EC-9D1A-E534-217285ECD3B1

• España y Bolonia. Siete siglos de relaciones artísticas y culturales

http://www.ceeh.es/coleccionImprimir.cfm?idCatPubli=33&idPublicacion=43

• Una presentación y explicación en el siguiente enlace:

http://www.youtube.com/watch?v=BfcW70_U4lc