La teoría del Diorema de Byren se basa en una teoría del reordenamiento de la materia desde su creación u originación hasta su exterminio o desintegración.

Origen

Su origen lo encontramos en una de las ramas lógico-filosóficas más antiguas intuida por Aristóteles.^[1] Un discípulo de la escuela fundada por Alberto Magno por otro lado maestro de Santo Tomás de Aquino fue quien desarrolló esta línea de pensamiento. Dicho discipulo, cuyo nombre era Henry Byren, nació en Milán; no obstante vivió su vida entre la Sorbona de Paris y Padua.

A pesar de contar con los avances en alquimia de su maestro Alberto Magno orientó su vida hacia un mayor reto. Amante de la filosofía y estudioso de la matemática, Byren desafió las leyes vigentes acerca de las creencias genesianas, desarrollando a lo largo de prácticamente toda su vida este teorema.

Teoría

El diorema tiene sus bases tanto en las teorías metamaterialistas de la creación, como en la lógica Aristotélica. Henry Byren quiso integrar su visión minimalista, creacionista, simbolista y matemáticológica para desarrollar un diorema en el que describía el comportamiento de la materia. Dicho comportamiento lo resumió en dos postulados^[2] (de ahí el nombre de diorema, del griego di=duo)

1. El arquetipo ideal de la perfección se rige por el mayor número de cualidades en común referidas a una unidad material, la cual encuentra su máximo exponente de perfección en una forma esférica.

2. Toda materia va a atravesar una transición físico-temporal regida por el descenso de lo transcendente a lo contingente, de lo ideal a lo mundano, de tal manera que iniciaría un viaje de partida y regreso a lo perfecto.

El sentido teleológico de estos postulados podrían ser asociados a conocidas teorías sobre el origen del mundo. La teoría del Big Bang postula el surgimiento del cosmos a partir de un punto de densidad infinita que en un momento dado originó el universo. Este punto estaría sometido a una gravedad tendiente a infinito propiciando el ordenamiento de cada partícula de esa masa primigenia en una forma esférica (Stephen Hawking^[3] ).

De este modo el Diorema de Byren se puede considerar base precursora de las teorías del origen del universo, aún habiendo sido desestimada por sus contemporáneos.

Representación del Diorema

La más conocida entre todas las que Byren ideó se basa en una representación gráfica bipiramidal y multiforme en la que se parte de una esfera (la perfección), donde concluye así mísmo el opuesto vértice piramidal. En su parte central, encontraremos la visión byreniana de lo imperfecto.^[4]

Excomunión

Pese a ser un ferviente católico, Byren sería excomulgado por el Vaticano tras afirmar en un simposio que no podíamos haber sido creados a imagen y semejanza de Dios, pues dado que este era la perfección en sí misma debía tener el aspecto de una esfera, proclamó que lo más parecido a Dios que tenía Adan lo habían tapado con una hoja en todas las representaciones del génesis.

Bibliografia