El Sistema de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México (conocido como SIMAT por sus siglas) es el área del Gobierno del Distrito Federal que se encarga del monitoreo y vigilancia de la calidad del aire en la Ciudad de México y su zona metropolitana. El SIMAT se consolidó en diciembre del año 2000 a partir de la integración de los diferentes programas de monitoreo de la calidad del aire de la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno del Distrito Federal.

Al concluir el 2008 el SIMAT tenía en operación 47 estaciones de monitoreo, 36 ubicadas en el Distrito Federal y 11 en el Estado de México. El SIMAT está integrado por cuatro subsistemas: la Red Automática de Monitoreo Atmosférico (RAMA), la Red de Meteorología y Radiación Solar (REDMET), la Red Manual de Monitoreo Atmosférico (REDMA) y la Red de Depósito Atmosférico (REDDA).

El SIMAT difunde cada hora el estado de la calidad del aire a través de su Índice Metropolitano de la Calidad del Aire a partir de los resultados de la medición de la concentración en el aire de ozono (O₃), dióxido de azufre (SO₂), dióxido de nitrógeno (NO₂), monóxido de carbono (CO) y pártículas menores a 10 micrómetros (PM₁₀).

Historia del monitoreo de la calidad del aire en la Ciudad de México

El aire aparece hoy día como el principal objeto de preocupación entre los distintos problemas ambientales que se enfrentan en la Ciudad de México. Este problema comenzó a ser relevante a partir de 1940, cuando el carácter centralista del proceso de desarrollo desencadenó una aglomeración industrial y poblacional. Esta última variable llegó a presentar tasas de crecimiento superiores al 3% anual.

En ese momento histórico se apoyó el crecimiento de una industria orientada a cubrir la demanda interna de productos, dada la instrumentación de una política de sustitución de importaciones. El gobierno facilitó condiciones extraordinarias de mercado, además de infraestructura urbana a capitales nacionales y extranjeros. El sector rural se avocó a brindar materia prima para la industria y mano de obra barata, iniciando un proceso de migración creciente que más tarde dio lugar a la formación de cinturones de pobreza.

La Ciudad de México inicia una expansión urbana acelerada que alcanza a los municipios vecinos del Estado de México, en un proceso de conurbación que continua hasta la presente década. Esto provoca la disminución de áreas boscosas, pérdida de terrenos destinados a la producción agrícola y déficit en el suministro de agua potable.

El deterioro de la calidad del aire se evidencia cuando la visibilidad disminuye; al inicio de la década de los 40 fluctuaba entre 4 y 10 Km y al iniciar la década de los 50 fluctuaba entre 2 y 4 Km. Esta situación motivó la preocupación de autoridades y científicos por conocer los riesgos sanitarios asociados con la exposición a la contaminación atmosférica.

Así se inician los primeros esfuerzos por conocer las concentraciones de los contaminantes atmosféricos de la Ciudad de México, dando lugar a un proceso histórico en el que han intervenido numerosas instituciones y que continúa en la actualidad con la integración del SIMAT.

Enlaces externos

• Sitio oficial del Sistema de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México
• Sitio oficial de la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno del Distrito Federal
• Sitio oficial del Gobierno del Distrito Federal
• Informe de la calidad de aire en la Ciudad de México 2007