Fornelos es un núcleo de población que, con otros ocho lugares mas, forman la parroquia de Santa Maria de Baio, en el ayuntamiento de Zas, Partido Judicial de Corcubión, provincia de A Coruña, Comunidad Autonómica de Galicia, España.

Es el núcleo de población situado mas al norte del municipio de Zas y de la parroquia de Baio ya que limita directamente con los municipios de Laxe y Cabana de Bergantiños. También limita por el Oeste con Vimianzo. Es por eso que podemos decir que el lugar de Fornelos hace frontera entre las tierras altas de la Terra de Soneira y la comarca de Bergantiños.

Si bien es cierto que los limites territoriales de Fornelos están claramente delimitados e incluídos en Soneira, desde el punto de vista geográfico y prehistórico está incluido en la unidad del suelo de Borneiro, y no hay mas que pasear por el amplio llano que une ambas poblaciones, así como por Dombate o A Fontefría para darse cuenta de que a pesar de cambiar de ayuntamiento y también de comarca, el paisaje sigue siendo el mismo.

El nombre de Fornelos

Su origen parece aludir a la existencia de fornelos o cámaras de las "antas" que a los antepasados les parecía hornos dentro de las mámoas.

Fornelos también significaría lugar de furnas o de entierros prehistóricos.

Pero el nombre de Fornelos no es exclusivo de nuestro lugar. A lo largo de toda Galicia hay lugares con el mismo topónimo en las cuatro provincias gallegas.

Orígenes y Arquitectura Posiblemente Fornelos tuvo otro asentamiento antes del actual o algún edificio próximo a los actuales. Esto es lo que parece desprenderse de los topónimos de sus tierras de labor. Así tenemos a Agra da Vila, cuyo nombre debe derivar de villa. Pero quién más me llama la atención, son los distintos nombres que componen dicha agra, como por ejemplo: Xan Casado, Carballeira, Palleiro, Abó, Donas, Foxo, etc. ¿Quiere esto decir, que Xan (Juan) Casado fue dueño de estas tierras dónde tuvo algún edificio importante?. Con sus carballeiras (robledales), su zona para los palleiros (pajares), las tierras de los abós (abuelos) y de las donas (esposas), e incluso su foxo (foso) que rodeaba la fortaleza. Un arriendo de 1646 ya hace referencia a estos nombres, y cita: Agra da Vila, Barreiro, Juan Casado, Donas, etc. Todo ello próximo al Camino Real que va para el lugar del Briño.

Cruzando el río está: A viña ¿hubo vides plantas en aquella zona? También está a Agra da Senra (tierra de monte que se hizo labradía) y a Agra do Campo, cuyos nombres indican que son labradíos más modernos.

Comentando estos datos con mi cuñado Gumersindo, me dijo que aún hoy es frecuente ver restos de tejas e incluso de cerámica en tierras de Xan Casado, y que en una ocasión, arando en estas tierras, encontraron una rueda de molino de tamaño reducido, de las que se movían a mano. Él mismo, arando con el tractor, levantó una teja muy grande y gruesa en la leira do Foxo.

Como bien indica su topónimo, Fornelos es tierra de dólmenes. Nuestros abuelos, e incluso sin ir tan lejos nuestros padres, nos decían que todas estas construcciones que rodean Fornelos, fueron hechas por los mouros. Uno que oía estas cosas, preguntaba: ¿Quiénes eran los mouros?. Las respuestas variaban: unos decían que era el nombre de los primeros habitantes de Galicia, otros que eran gigantes con mucha fuerza que habían vivido hacía miles de años, pero todos nos decían que la losa horizontal de A Fornella de Miranda (nombre por el que conocíamos el dolmen de Dombate), que mide 3,76 x 2,63 m, la había llevado una moura en la cabeza, al tiempo que iba hilando con una rueca... Toda una serie de leyendas populares.

Xosé Mª Lema, en su libro “Arquitectura megalítica na Costa da Morte (antas e mámoas)” cita dos mámoas en Fornelos y dice: A anta (dolmen) de Dombate forma parte dunha ampla necrópole que se estende de norte a sur pola parte oeste do Chan de Borneiro. Moi preto dela hai outra anta, a da Gándara, case totalmente destruída. Ó sur de Dombate está a aldea de Fornelos, xa da parroquia de Baio (Zas), topónimo que parece aludir á existencia de túmulos. Recentemente localizáronse nos montes do oeste deste lugar baiés dúas mámoas: a de Suacosta ou Tras do Outeiro e a da Chousa do Monte dos Mouros.

El Clima

Los rasgos generales que caracterizan el clima de esta zona están encuadrados en lo que se denomina como oceánico húmedo en su clasificación de dominios climáticos.

Sus condiciones especificas se basan en la suavidad de las temperatura, en una pequeña oscilación térmica y precipitaciones abundantes con un máximo otoño-inverno y un mínimo en el verano.

En relación al total anual de recojida de precipitaciones, estamos en una área de lluvias considerables, por las perturbaciones del Sudoeste.

Los meses mas fríos corresponden al invierno, que va de Noviembre a Febrero. A partir de Marzo los valores comiezan a subir paulatinamente hasta Julio, configurando una larga y fresca primavera que, al igual que la estación anterior se encuentra dominada por parametros de suavidad. El verano abarca des Julio a Septiembre, con temperaturas superiores a los 18ºC solo en el mes de Agosto, por lo que tampoco podemos hablar de una estación calorosa. De Setiembre hasta bien entrado Noviembre se establece un corto otoño caracterizado por la acusada baajada térmica, verdadera definidora de la estación.

Si la moderación era una de las características definitorias de las temperaturas, no podemos afirmar lo mismo en lo que a las precipitaciones se refiere que, de una manera constante, aunque no en cantidad, están presentes a lo largo de casi los doce meses del año. Esto nos obliga a dejar de lado la calificación de meses secos para hablar de meses muy lluviosos o de lluvias moderadas.

Dadas estas características, podemos deducir que la suavidad de las temperaturas y la humedad constante a lo largo de todo el año una dedicación agricola sin descanso.

Basándonos en la caracterización agroecológica a nivel macroclimático de Papadakis, Fornelos se puede encudrar en el tipo de Invierno Citrus, que es el que se estiende por toda la costa galega y que permite obtener los frutos de moyor calidad, sobre todo si no hay xeadas (heladas). Es el fundamento para el crecimiento del trigo y el maíz. Su segunda clasificación térmica dentro del tipo Mediterráneo Marítimo mantiene que pueden cultivarse sin riesgo, cereales, habas, patatas e higueras, así como los frutales caducifolios y los cultivos de huerta temporáneos y tardíos, si están regados.

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