El político Ascario Paz Bonilla, nació en Manta provincia de Manabí el 19 de noviembre de 1880 en el hogar de José Estanislao Paz Mecías y María Mercedes Bonilla Ferrín de La Paz de Paz emigrante colombianos, fue el segundo de diez hermanos entre los que constan: Héctor, Ascario, Julián, Jorge, Aquiles, María, Tomaza, Juliana, Angela y Emilia, por sus antepasados corre sangre de militares, siendo su tío abuelo el Gral. Vicente Paz, quien combatió duramente en Colombia la Guerra de lo mil días, murió en Guayaquil el 19 de febrero de 1956, rodeado de sus familiares y amigos más allegados, trasladado a Manta el 20 de febrero por petición de los habitantes manténses, para darle el último adiós a su Adalid; fue honrado en capilla ardiente en el Salón Municipal, sus restos descansan en el mausoleo Paz-Domínguez del cementerio Central de nuestra ciudad.

Primeros Años

Realizó la instrucción primaria en Manta con profesores particulares en su casa, luego de lo cal viejo a Guayaquil para seguir con sus estudios en la Escuela y Colegio Hermano Miguel, graduándose de Bachiller en la especialidad de contabilidad que le sirvió para desenvolverse como contador n sus negocios de importación y particulares que más tarde ejerció en diferentes casa comerciales como la de don Lautaro Apiazu y Don Tadeo Planas en el área de contador y cajero, por su alta confianza y sus relaciones con las más altas esferas sociales de la época desempeñó el cargo de Canciller del Consulado Español, cuyo cónsul era el Sr. Planas y con ésta oportunidad tuvo estrecha amistad con el Sr. Jaime Castells y Lorenzo Tous, quienes le guardaron mucha estimación.

Desarrollo Profesional y Personal

Bahía de Caráquez; con unos años más de experiencia se traslada a Bahía de Caráquez desempeñándose como contador y viajero de la Casa Miranda (Casa Sembrada), ejerciendo las funciones de Primer Jefe del Cuerpo de Bomberos y como periodista en el Diario El Globo, donde conoció a su primera esposa Doña Susana Aveiga de Paz, con quien procreó cuatro hijos varones; Duilio, Roberto, Jorge, y Rodolfo Paz Aveiga. Manta.- En 1912 regresó a Manta como contador y después como viajero de la Casa Sembrada (en la actualidad la Casa Álava, luego de haber sido también la Casa Vicente Gallo), enamorándose locamente de quien fue su segunda esposa Doña Fresia Domínguez de Paz, donde llego a concebir catorce hijos: Fresia Leonor(+), Raúl(+), Lubino(+), Laura(+), Alejandro, Romeo(+), Fernando, Eduardo, Leonor, Gonzalo(+), Ricardo, Adelaila, Medardo, Alfonzo Paz Domínguez y María Luisa, Rita y Flora Paz, ejerciendo luego el periodismo en Manta en Diario El Mercurio con el seudónimo de CARIFE donde nació su afán de lucha y transformación constante de la sociedad siendo sus escritos una visión revolucionario de lo que pensaba y quería para Manta y la provincia.

Vocación Ejemplar

Ascario Paz, fue un hombre con una vocación social, política y cultural muy amplia que llevo siempre en la época en que vivió, el anhelo de ver su Manta querido convertido en el Puerto Principal del Ecuador y del Pacifico, pensamiento que le costó grandes sacrificios en su vida privada, política y social.

Fecunda Actividad

El 16 de julio de 1912 a sus 32 años de edad, se reunió en el local de la vieja aduana con un grupo de compañeros de trabajo, en cuyo acto se constituyó el Primer “Comité del Cantón de Manta”, acompañado de Los Hermanos Gil, Carlos, Pablo y Ricardo Delgado Pinto, Julio Lourido, Ignacio Rodríguez, joven de esa época Carlos Cevallos Barreiro, Flavio Reyes, Lizardo Reyes, Francisco Cantos, Aparicio Flores, Elías Clavijo, Francisco Roca, Carlos Camacho, Jorge Paz y Miño, Alberto Solórzano, José Escobar, Jacinto Moreno y Aquiles Paz. Para esto el 18 de julio del mismo año quedó conformado el primer Comité Pro-Cantonización de Manta con las personas que creyeron en su proyecto de liberación de Manta entonces Parroquia de Montecrísti eligiéndolo presidente Efectivo del Comité y lo conformo con las siguientes personalidades.

Labor que duró 10 años durante ese tiempo formó el, primer comité Pro-Construcción de la Iglesia de La Merced conjuntamente con los demás voluntarios de esa época donde también pertenecía su hermana Emilia Paz, fue estrecho colaborador del Padre Julio Pierregrosse en diferentes actividades sociales, por su alto espíritu de lucha parea con los mas necesitados se alió al reconocido catedrático de ese entonces Justino Cornejo Vizcaíno con quien propusieron instalar el Primer Colegio Secundario, denominado Colegio Mercantil.

Lucha de Obras

También continúo con su lucha por las Obras Portuarias, la Educación, El agua Potable y muchos otros, pasando una década de lucha constante, cuyos gastos fueron cubiertos con dinero de su propio peculio y después de tres rechazos del Congreso a la Cantonización de Manta, creó el comité electoral José Luis Tamayo el 6 de septiembre de 1919 eligiendo como presidente a Don José Flavio Reyes y por petición de Don Ascario Paz, designan candidato a Diputado a Don Sergio Domingo Dueñas para llevar a cabo las diligencias respectivas en el Honorable Congreso Nacional, con lo cual consiguieron elegir Presidente de la República al Dr. Luis Tamayo.

Exposición en el Congreso

El 22 de septiembre de 1922, fue recibido en estrato en el Congreso Nacional para hacer algunas exposiciones sobre el proyecto de Decreto de Cantonización de Manta, decreto presentado por el Diputado Sergio Domingo Dueñas, después de su intervención y deliberación de los Congresistas el 25 de septiembre del mismo año dan como aprobada el decreto de cantonización y el día 29 del mismo mes el Presidente Luís Tamayo le pone el ejecútese y se publica en el registro oficial.

Activa Lucha En su constante y activa lucha encontró fuerte oposición por los montecristenses y derrotismo en algunos de los que lo acompañaban, pero esto no mermó su entusiasmo porque su espíritu de civismo era su bandera de lucha. Civismo Como caballero era muy buen amigo, como periodista muy inteligente, como luchador muy incansable, como ciudadano muy patriótico y como maestro del civismo un inigualable maestro que dictaba su clase en cada plaza en todas las calles, pregonando el derecho del hombre para ser libre.