Monopamba

Monopamba
Bandera Escudo
País  Colombia • Departamento Nariño • Región Andina Ubicación   Temperatura 17 °C° C Población Gentilicio Monopambeño (a) Alcalde Carlos Emilio Chavez Mora (Alcalde Municipal)

Monopamba, junto a San Mateo y El Páramo es uno de los tres corregimientos del municipio de Puerres, departamento de Nariño, Colombia.
A Monopamba están asignadas las veredas de Desmontes Bajos, Desmontes Altos, La Playa, El Pailón y El Verde.

Toponimía

Según la tradicion oral, existen dos versiones sobre el origen del nombre de Monopamba.

1. El nombre fue colocado por los llamados "caucheros" y quiere decir Pampada o pampa de los monos.
2. Los primeros habitantes encontraron al llegar al sitio donde está ubicada la localidad, un mono con la cabeza achatada o "pambo", de allí nació el nombre Monopamba.

Aspectos Generales

Geografía

Monopámba está situado sobre el margen izquierda del rio sucio, formado por las primeras aguas nacidas de la propia cordillera oriental de Los Andes; donde se encuentra el cerro “El Precipicio”.

Límites

Monopamba ocupa la región oriente del municipio de Puerres, sus limites son: Al norte con el municipio de Pasto, al sur con el municipio de Córdoba, al este con el departamento de Putumayo y al oeste con la región de la cabecera municipal de Puerres.

Orografía

Hidrografía

Es regado por los rios: Sucio, Afiladores y El Playas, y por las quebradas: El Peje, La Honda, Quebrada de Piedras.
El nombre río sucio, principal fuente de agua del corregimiento fue puesto por el color de sus aguas, color café, las aguas de este río en la parte alta de la serranía, bañan grandes zonas de zarza en todo el paramo, por este motivo sus aguas son oscuras.

Economía

• Agricultura: La región es conocida localmente por la producción de panela orgánica; además del cultivo de caña panelera se siembra maíz, frijol, y hortalizas. Es conocido localmente por la siembra de un tubérculo típico llamado "combo" o "yota", producto que, junto a la panela, es caracteristico a nivel municipal.

• Ganadería: Es tradicional la crianza de ganado vacuno, equino, porcino. También es importante en su economía la crianza de aves de corral y de cuyes.

Para la alimentación de los diferentes animales de granja de cultivan pastos como: kikuyo, gramalote, micay, puntero y ultimamnte pasto miel.

Fiestas

Monopamba es enteramente Católico y por ello las principales fiestas que se realizan son religiosas.

• Festival de las Orquideas: Se realiza el dia 20 de marzo de todos los años, allí podras encontrar las mejores variedades de flores naturales que produce la regiòn.
• Fiesta de la Virgen de Fátima: celebración religiosa llevada a cabo en Monopamba a finales del mes de mayo.
• Fiesta de la Virgen del Carmen: patrona de los conductores y motoristas, se lleva a cabo en el mes de octubre en las veredas de Desmontes Altos y Bajos.
• Fiesta del Señor de los Milagros: llevada a cabo en Monopamba a finales del mes de noviembre, son consideradas las fiestas patronales y se desarrollan después de las fiestas patronales del municipio.

Otras celebracion que se desarrolla son los Carnavales de negros y blancos como es tradicional en todo el departamento de Nariño los días 5 y 6 de Enero.

Instituciones

Monopamba cuenta con un Centro Educativo para educación primaria en cada una de sus veredas y con la Institución Educativa Monopamba de educación secundaria en la modalidad agropecuaria.

Reseña Histórica

Vista de Monopamba en 1987

Colonización y Fundación
Por el Cerro El Precipicio, que es actualmente la principal entrada a Monopamba, fue por donde transitaron los primeros colonos desafiando la crueldad de sus caminos y el intenso frio causante de la muerte de muchas personas.

Anteriormente la región al este del cerro El Precipicio (cordillera de los andes) pertenecía a la comisaría especial del Putumayo, años mas tarde fue agregada al departamento de Nariño y luego dividida a cada municipio, fue así como la región de Monopamba con sus distintas veredas le fue asignada al municipio de Puerres.

Las actas y documentos referentes a este trabajo se encuentran en los archivos de la gobernación de Nariño, esta resolución señala que: desde la Quebrada Blanca, hacia el suroeste corresponde a el corregimiento de El Llorente y todo lo que queda situado sobre la margen izquierda del río Sucio incluyendo el río Afiladores, afluente del anterior, fue asignado al municipio de Córdoba; el rio Sucio que más abajo toma el nombre de río Guamuez es el afluente del rio Putumayo.

El primer colono que llegó a tomar poseción de la región de Monopamba fue José María Pinchao, oriundo del corregimiento de San Mateo del municipio de Puerres, quien hizo campaña con seis personas más; llegaron a un convenio verbal para colonizar la región en donde todos serían los dueños de esta tierra, es decir, se situaron en el pie de Monopamba junto al río donde él le llamaba “el salado”. Allí se construyó el primer campamento, desmonte y sembraron algunas semillas.

Estas seis personas antes de dos meses decidieron salir a la cabecera municipal, así José María Pinchao hombre, vivió completamente solo y como decía él mismo "acompañado de Dios, a quien rezaba y le pedía todos los días por mi bien".

José María Pinchao, era de contextura delgada, 1.70m de estatura y le faltaba una mano, le habían amputado la mano derecha hasta el codo y así en esas condiciones decidió no abandonar la crueldad de la misma naturaleza, sufriendo todas las adversidades de la vida, como la escasez de sal, panela, manteca, etc.

Muchos años vivió sin comer sal, dulce ni carne, en vista de esto consideró que era una buena idea cocinar con el agua del salado donde tomaban los animales, fue así como se invento un horno de piedras y cocino el agua del salado hasta que se redujera (consumir) y quedará un poquito acida y con esa agua preparaba los alimentos y vivió por muchos años.

La promesa que él hizo, era de nunca dejar que la candela se apagara, y así lo hizo. Los únicos que lo visitaban eran los animales salvajes como la danta, el tigre, osos y muchos otros que muy seguramente buscaban comérselo y que el los sacaba del rancho tirándoles tizones encendidos.

El señor José María Pinchao entró a tomar posesión de esta tierra el 12 de octubre de 1912, después de mucho tiempo se dió cuenta que al otro lado del río Sucio vivía otro colono, con el que era muy difícil comunicarse ya que los ríos permanecían muy caudalosos por las permanentes lluvias. El otro colono era Manuel Benavides quien vivia con su esposa Sixta Coral y sus hijos.. Años más tarde Manuel Benavides le vendió un marranito el cual crio y engordo con el proposito de invitar a su familia (año 1920). Le costó mucho trabajo convencer a la señora para llevarlos a Monopamba.

José María Pinchao estava casado con Bernarda Gelpud de Pinchao y sus siete hijos se llamaba Eliseo, Rosario, Pedro, Celso, Hermelinda, Sara y José Ismael. En el año 1930, llego a Monopamba la familia de Manuel Ortiz Castro y Bertila Figueroa de Ortiz con catorce hijos: Diomedes Alonso, Gustavo, Jesús, Lucas Emilio y Artemio; Luz Angélica, Aura Otilia, Oliva Martina y Alegría. En este tiempo la familia Pinchao ya estaban situados en el terreno Plano de Monopamba, ya tenían cultivos de caña de azúcar, maíz, guineos, patatas, frijol, etc. Manuel Ortiz Castro le compró a José Ismael Pinchao una parcela sembrada de caña de azúcar con un rancho de paja. Más tarde construyó junto con sus hijos una casona más bien grande; pisos y paredes de tabla aserrada y techo de astilla, esta casa así construida sirvió de casa de posada; donde llegaban todas las personas que entraban a conocer, otros a colonizar o a comprar entables o posiciones ya hechas. Esta casa fue el único lugar en el que todas las personas entraban de los distintos municipios de Nariño.

Con el correr de los tiempos, llegaron de Bogotá y Medellín ingenieros y mineros estadounidenses que buscaban una ruta hacia el Putumayo en busca de petróleo, también incursionaron muchos sacerdotes hasta esta región.

Primera escuela en Monopamba

Con el paso de los tiempos Manuel Ortiz Castro vió la necesidad de una escuela, entonces levanto el entusiasmo de otras personas y en compañía de Agustín Gelpud hicieron viaje para Sibundoy-Putumayo para hablar con el Obispo y solicitarle una escuela, el Obispo prometió que en un año enviaría una profesora y así lo hizo; la primera profesora en Monopamba fue Rosa Clelia Cabrera quien trabajo con humildad y entrega durante dos años en una casona grande que se construyo para ese fin; cubierta de paja, paredes de "palos rollizos", esta casona también sirvió como capilla al mismo tiempo. Rosa Clelia Cabrera fue remplazada por Pastora Huertas del municipio de Puerres, esposa de Julio González, también profesor.

El primer año que trabajó la señora Pastora y don Julio González como profesores, tuvieron la suerte de ser visitados por un sacerdote del corregimiento del Encano. Este valiente sacerdote se llamó Augusto Samaniego, quien lleno de valor y coraje acompaño de cuatro hombres fornidos y aperados de todo lo necesario para pasar la inmensa selva, se internaron en la selva haciendo trocha y hasta subiéndose en los árboles muchas veces para dirigirse y saber por dónde iban, al cabo de doce días de sufrimiento y lucha, llegaron a Monopamba, para los pobladores fue una gran sorpresa ya que fue el primer sacerdote en llegar a esta región olvidada por muchos años; ya que para Colombia Monopamba no existía, ocho días estuvo entre los pobladores, aconsejo que no desmayaran, les dijo que con sufrimiento y esfuerzo se construye patria grande y que persistieran porque en un futuro Monopamba sería un gran pueblo. Luego se regreso para el pueblo en compañía de algunos colonos quienes fueron a llevarlo de regreso y a conocer la trocha, así lo hicieron; llegaron al Encano y de allí nos fuimos a conocer la ciudad de Pasto y conocer la ciudad de Pasto y conocer también los carros. Luego salimos muchas veces ampliando la trocha; más tarde por la misma trocha llegamos al caserío de los alisales por donde quedaba más cerca para llegar a Pasto. La señora Pastora Huertas y el señor Julio González fue la segunda profesora de Monopamba.

Precisamente con la influencia de dichos profesores, fueron visitados por el señor Obispo del putumayo Fray Placido, en el año 1938; Obispo capuchino de Sibundoy; en compañía de dos sacerdotes, quienes acompañaron a los habitantes de Monopamba por dos semanas, hicieron una semana de misión con gran éxito, luego se resolvió el regreso de la comitiva a Sibundoy. Más tarde, después de varios años, se dieron cuenta que un caserío llamado Llorente que pertenece al Municipio de Córdoba, ya habían nombrado un inspector de policía. Se fueron a Llorente, y se encontraron con un señor que se llamaba Rafael Bravo, quien confirmo que estaba allí como inspector de policía desde hace dos meses que estaba allí ejerciendo ese cargo, comento que nadie había pasado a saludarle ni a preguntarle qué era lo que hacía, al entablar esta conversación con don Manuel Ortiz le dijo que lo llevara para Monopamba para organizar la inspección de policía, el señor Bravo tenía una señora joven y un niño pequeño , en ese mismo momento hicieron maletas y bajaron para Monopamba, y se establecieron e la casa del señor Manuel Ortiz donde funcionó por varios meses la inspección de policía, más tarde por iniciativa del señor Eliseo Pinchao, quienes por insistencia de don Manuel , el señor Pinchao ya mencionado, hizo construir unas piecitas junto a su casa de habitación pero independiente, donde funcionó por varios años la inspección de policía. El señor Rafael Bravo dirigió cartas oficiales a la gobernación de Pasto dando cuenta de este acontecimiento; los habitantes de Monopamba por su parte hicieron un memorial firmado por todos. Don Gustavo Ortiz Figueroa viajo personalmente a Pasto y consiguieron que la gobernación nombrara en propiedad al señor Rafael Bravo como inspector de policía departamental de Monopamba. Así fue como se creó la inspección de policía.

En la casa de don Eliseo Pinchao, funcionó varios años, hasta que más tarde lograron construir la casa ya más formal e independiente para el funcionamiento del despacho de la inspección de policía, se construyeron, paredes y piso de tablas y el techo de astilla, precisamente en el mismo lugar en donde se encuentra actualmente. Años más tarde, cambiaron al señor Bravo y en su reemplazo nombraron como inspector de policía al señor Segundo Revelo de Córdoba, quien llevo de secretario al señor Eusebio Mejía, también de Córdoba, con la presencia de estos señores y el entusiasmo que los caracterizaba, se logro hacer muchas cosas para el bien de la región. En primer lugar se construyo un puente colgante sobre el río Sucio que se ubicó 1 Km más arriba del puente actual, fue un puente construido con cables únicamente peatonal. Luego se propuso construir la escuela, un mes duró la explanación del lugar en donde se construiría (Actual Institución Educativa Monopamba Sede 2), después de muchos meses estuvo construida con el piso y las paredes de tabla y el techo de astilla. La profesora que inauguró la nueva escuela fue Ana María Paz de Sibundoy Putumayo. Para ese entonces ya habían muchas personas viviendo en Monopamba.

Por esa época Gustavo Ortiz Figueroa fue el único dirigente cívico de la región, trabajando a favor de la misma. Fue quien citó a todos los moradores con el fin de abrir la primera calle, llena de troncos, muros de piedras y huecos enormes; en tres días de trabajo lograron terminar la calle.

Ruta a Orito

Años mas tarde arribaron dos ciudadanos estadounidenses, uno de ellos de apellido Walter, acompañados de seis cargueros, llevando toda clase de víveres y herramientas, acamparon en la casa de Manuel Ortiz, allí permanecieron durante doce días, esperando que se mejorará el tiempo, el propósito de estos extranjeros era llegar a Orito y conseguir el petróleo, como no pudieron avanzar más por el invierno, salieron para Puerres.

Años más tarde los habitantes de Monopamba fueron visitados por un sacerdote capuchino, llamado Fray Miguel de Ipiales, con el entusiasmo de este sacerdote se construyó la primera capilla, el piso de tierra, las paredes de tabla y el techo de astilla, en el mismo lugar en el que hoy se encuentra situada la capilla. Don Manuel Ortiz regalo una de las campanas. Este sacerdote entusiasmo tanto a la gente para que contribuyeran y para que comprar los ornamentos de celebrar la santa misa y tenerlos en propiedad y de este modo no tener que llevarlos cada vez que se entraba hasta Monopamba, así se hizo y el fray Miguel pero nunca se supo si se compraron los ornamentos.

Más tarde con el correr de los años llegó hacer inspector de policía el señor Manuel Ortiz Castro por voluntad de todos los moradores, se firmó un memorial reclamándolo y se lo envió a Pasto, la gobernación lo nombro inmediatamente. En aquel entonces el doctor José Elías del Hierro, un gran político Nariñense era ministro de minas y petróleos y nombro secretario general al señor Gonzalo Pérez Castro Primo del señor Manuel Ortiz Castro, cuando los moradores de Monopamba se enteraron de esta noticia, escribieron un oficio firmado por el inspector de policía, en dicho oficio se pedía que por favor se ayudara a construir un puente grande sobre el rio sucio, que tanta falta le hacía a la región, pues no alcanzó a demorar dos meses y se tuvo respuesta del doctor Gonzalo Pérez aceptando con mucho gusto la petición, hizo la donación de ochocientos mil pesos (800.000) para la construcción de dicho puente, además el fue quien contrato al ingeniero para llevar acabo dicho proyecto, el ingeniero se llamó Carlos Souza ( Ciudadano estadounidense).

El mismo doctor Gonzalo, ordeno al señor alcalde de Puerres, para que se adjudicara y entregara los cables que el municipio había tenido en rio Tescual, material que había sobrado del anterior puente llamado doña Ignacia Que felicidad sintieron al recibir esta noticia los habitantes de Monopamba, fue así como don Manuel Ortiz Castro y su hijo Gustavo Ortiz Figueroa fueron a la alcaldía de Puerres para recibir los cables, pero el gran problema era llevarlos hasta el lugar en el que se establecería el puente, entonces se fueron para la hacienda de un amigo de don Manuel llamado Rafael Rodríguez quien les facilito una yunta de bueyes a los que les colocaron uno de los cables y se adentraron en la montaña, caminaron todo el día, sin comer porque no tenían dinero, dejaron este cable muy entrada la montaña y se regresaron al otro día por el otro cable hasta Puerres después de mucho esfuerzo lograron llevaron el otro cable hasta donde estaba el otro. Al otro día entraron hasta Monopamba y levantaron el entusiasmo a la gente, don Gustavo Ortiz Figueroa como líder cívico fue de casa en casa notificando a la gente para salir a traer los cables; explicándoles la importancia que tenia la construcción del puente grande sobre el rio sucio para pasar con carga y animales. Había mucha gente a la cual no le interesaba para nada este tipo de cosas, pero al final concertaron y la mayor parte de la gente salió el día citado y se reunieron en el lugar donde estaban los cables. Se distribuyeron 20 hombres en cada cable, cargándolos al hombro, subieron lento hasta llegar al cerro, luego cogieron la bajada, nadie descanso ni comió hasta que los cables estuvieron en el lugar que correspondía. A la semana siguiente, tuvieron que salir a traer al ingeniero, que llego a Puerres con los materiales para la construcción del puente; eran cuarenta bultos de cemento y doce bultos de hierro, una vez más el líder cívico tuvo que ir a notificar a todos los habitantes para salir a Puerres a traer al señor ingeniero y sus materiales; el hierro lo habían acondicionado como un bulto. Detrás de la casa del señor Manuel Benavides en la Playa, construyeron una fragua y siguieron el trabajo que duró más de ocho meses; al cabo de este tiempo quedó terminado el puente.

Para recibir el trabajo de este puente fue comisionado Octavio Chavez alcalde de Puerres, quien se traslado a recibirlo la obra, en la inauguración bailaron celebrando la culminación de tan importante proyecto para la región. Este puente fue construido en el año 1953 y Manuel Ortiz Castro (Inspector de Policía), decretó que este puente se llamaría "Pérez Castro", esto fue comunicado al Gonzalo Pérez Castro. En aquellos tiempos el inspector de policía convocaba a los colonos y gentes más distinguidas para que contribuyeran con una cuota económica para comprar una res y después se citaba a la gente para que salieran al paramo a arreglar los pasos que eran intransitables, estas labores se realizaron varias veces. Más adelante José Mará Pinchao designó lugares para la construcción del cementerio, la capilla y la plaza, de este modo como en la parte alta donó una hectárea para el cementerio, los habitantes de Monopamba ayudaron a desmontarla y fue así como quedo lista; ya que anteriormente los muertos se enterraban en lo que hoy se llama La Playa junto al río Afiladores en un terreno en el que solo había piedras, luego citaron a los colonos de Monopamba y Gustavo Ortiz Figueroa trazó el camino al cementerio. En inspector como autoridad de la región hizo construir una casa en la plaza frente a la capilla que sirvió como mercado y presto otros servicios a la comunidad. Entre las muchas andanzas que hicieron los colonos de Monopamba por las montañas de Guamuez (por que así se llamaba este lugar anteriormente) encontraron un lugar propiamente para construir una hidroeléctrica de grandes proporciones, este lugar esta situado frente a lo que hoy se conoce como Pizarras, en la misma margen izquierda del rio sucio, de Monopamba mucho más abajo; hay unas playas grandes de terreno firme a la orilla del rio, tiene una caída vertical, más de un kilometro de altura, y utilizando las aguas del rio playas, aguas que se unen a las del rio sucio formando más abajo una cascada admirable, que vale la pena conocer. Las aguas de este rio playas son cristalinas y en su recorrer nadie las utiliza. La creación de una planta eléctrica produciría una gran cantidad de energía lo cual beneficiaría a la región.

Referencias

1. Información tomada de Bibliografía que reposa en la biblioteca de la Institución Educativa de Monopamba.ver mas informacion

http://monopamba.blogspot.com/