- Determinismo biológico
-
Determinismo biológico
El determinismo biológico es una teoría que consiste en afirmar que tanto las normas de conducta compartidas como las diferencias sociales y económicas que existen entre los grupos, básicamente diferencias de raza, de clase y de sexo, derivan de ciertas diferencias heredadas innatas, y que en este sentido, la sociedad constituye un reflejo fiel de la biología. El determinismo biológico se plantea hoy en términos de determinismo genético, un conjunto de teorías que defienden la posibilidad de dar respuestas últimas al comportamiento de los seres vivos a partir de su estructura genética. Por lo tanto, la conducta, tanto de los animales como del ser humano, obedece a formas que han sido necesarias para la supervivencia de sus genes, y que se extienden a complejos sistemas sociales adaptados a su más favorable proceso evolutivo.
En el caso de los humanos, “máquina de supervivencia” de sus genes, según la definición de Richard Dawkins, al igual que sus características físicas, factores tan controvertidos como son el racismo, la desigualdad social, la competitividad, las guerras, el hambre, las enfermedades, la agresividad, las diferencias entre sexos, el libre albedrío o el altruismo, son justificados por los deterministas biológicos, esencialmente, a partir de factores heredados por los genes, los cuales a su vez se rigen por los procesos evolutivos que operan en la selección natural, establecidos por Charles Darwin en la segunda mitad del s. XIX, difundidos con posterioridad por el darwinismo social y cuyo eco contemporáneo se halla en las teorías sociobiológicas, suscritas entre otros, por Edward O. Wilson o Richard Dawkins, quienes han encontrado en autores como R.C. Lewontin, Steven Rose, Leon J. Kamin o Stephen Jay Gould sus más firmes oponentes, al manifestar en sus críticas que, escudándose en el determinismo biológico, se intenta legitimar el status elitista de determinados grupos de poder sociales, políticos y económicos, en el orden capitalista mundial hoy imperante. Dichos grupos justificarían el ejercicio de su autoridad, dominio y opresión, sobre los “naturalmente” menos favorecidos por la selección natural, en base a una aparente escasez de recursos o al notable y progresivo crecimiento de las poblaciones, factores que en última instancia, según los deterministas biológicos, condicionan la conducta humana.
Críticas al determinismo biológico
El determinismo biológico, por el que aboga la sociobiología contemporánea y que hoy Edgar O. Wilson plantea en términos de determinismo genético, es tachado por R.C. Lewontin, Steven Rose, Leon J. Kamin en No está en los genes (1987), como directo sucesor intelectual del Leviatán (1651) de Thomas Hobbes (1588-1679) y de su célebre máxima: “homo homini lupus”, “el hombre es un lobo para el hombre”, quien anteponiendo los intereses individuales a los colectivos contribuyó en gran medida al establecimiento de las bases de la sociedad burguesa, sustentadas en la competitividad, el egocentrismo, la desconfianza y la depredación humana; hechos naturales e inevitables para Hobbes, puesto que según él la estructura biológica del hombre así lo determina.
Véase también
Categorías: Antropología | Evolución | Filosofía de la ciencia | Teorías sociológicas
Wikimedia foundation. 2010.