Desde hace más de 20 años la Fundación Hedwig y Robert Samuel apoya a niños y jóvenes en el ámbito de las formaciones profesionales, especialmente en América Central y en el sur de Asia. Todos los jóvenes provienen de clases sociales discriminadas y reciben a través de la Fundación los medios necesarios y la posibilidad de acceder a una formación profesional calificada.

Contenido 1 Historia 2 La Fundación 2.1 Metas 2.2 El capital de la Fundación 2.3 Proyectos de ayuda 2.3.1 Oferta de capacitaciones 3 Exitos 4 Indice de las fuentes

Historia

La Fundación surgió como iniciativa del matrimonio Robert y Hedwig Samuel, de Düsseldorf, Alemania. El comerciante judío Robert Samuel (nacido en 1871) importaba y vendía tabaco. Proveía, entre otros, a la Casa Real de Wurttemberg. En 1927, dejó escrito en su testamento su voluntad de crear la Fundación. Después del fallecimiento del matrimonio (ellos no tuvieron hijos), la Fundación debía ocuparse de obras de bien.

Luego del fallecimiento de Robert Samuel, en enero de 1931, la Fundación fue fundada, el 3 de junio de 1932, con la autorización del Ministerio de Justicia pruso. Con el establecimiento de la Fundación, la misma fue equipada con la casa comercial en la Konigsallee (avenida de los reyes) en Dusseldorf como capital social de la Fundación. Posteriormente, las autoridades y organizaciones nacionalsocialistas intentaron apropiarse de los bienes supuestamente judíos. Pero los organismos estatales se bloquearon mutuamente y como las metas de la Fundación, inteligentemente, no se limitaban a personas judías, la Fundación Samuel tuvo la suerte de sobrevivir al tercer Reich.

Luego del fallecimiento, tal como figura en el testamento, la Fundación Hedwig y Robert Samuel comenzó con su trabajo caritativo. Los recursos que a partir de la segunda mitad de los años 1970 le entraron a la Fundación como ganancia del patrimonio, fueron utilizados en primera instancia y en su mayor parte, para la necesaria y urgente renovación y el tejado de la propia casa comercial en la Konigsallee. La realización de las finalidades de la Fundación se tuvo que postergar todavía por esta razón. Sin embargo también en esta fase, ya se brindaron pequeñas donaciones para proyectos sociales, principalmente en Duesseldorf.

Entonces más adelante, con la terminación de las medidas de preservación de la casa comercialy con la constitución de una infraestructura propia, le fue posible a la Fundación, fomentar también proyectos grandes. A primeras donaciones para medidas de mejoramiento en los hogares de ancianos urbanos “Gallberg” y “Flehe” en Duesseldorf, le siguieron prestaciones de ayuda para los especialmente necesitados sociales. De esta manera, por ejemplo, se llevó a cabo una medida de asesoría para niños de los complejos de vivienda de contenedores en Schmiedestrasse, se mejoró la infraestructura de un asilo nocturno de la ciudad y se financió la asesoría en las tareas de la escuela para hijos de habitantes extranjeros. Todas estas medidas, no hubiesen sido posibles sin la ayuda de la Fundación Samuel, ya que no existía una obligación de presupuesto por parte de la ciudad.

A mediados de los años 80 la Fundación Samuel ensanchó por primera vez su ayuda a necesitados sociales hacia el extranjero. Movidos por la lenta pero constante pobreza que cada vez crecía más en los países subdesarrollados del mundo, la Fundación Samuel, en el transcurso de los años, concentró su trabajo de forma creciente en estos países. A donaciones iniciales a las organizaciones activas en la cooperación de desarrollo, como la organización “Gente para Gente” o el “Friedensdorf Internacional”, le siguieron prestaciones de ayuda directas a personas e instituciones en países subdesarrollados.

La mera promoción de proyectos aislados, se convirtió pronto en trabajo operativo de la Fundación en los diferentes países. Así surgieron – en una relativamente corta sucesión transitoria – la representaciones de la Fundación en el extranjero. 1987 en Costa Rica, 1989 en Nicaragua, 1993 en la India y 2002 en Tailandia.

La Fundación

La Fundación es una fundación de bien común y de derecho privado que se ocupa principalmente de fomentar formaciones profesionales. Su sede central se ubica en Düsseldorf, Alemania. La Fundación Samuel lleva a cabo proyectos de ayuda y realiza sus actividades, sobre todo, en América Central (Costa Rica y Nicaragua) y Asia (India y Tailandia). Los fondos para financiar nuestros proyectos de ayuda provienen de los réditos del capital de la Fundación, donaciones y financiaciones conjuntas. Se puede estar seguros de que los fondos de la Fundación se invierten en proyectos que responden a sus exigencias en cuanto a calidad y aspectos centrales de lo que desea fomentar.

Metas

La Fundación Samuel es la fundación de las formaciones profesionales. Su meta: estimular a través de la educación profesional de grandes estratos de la población el desarrollo de los países más pobres y aliviar las necesidades de las personas. El centro de atención del trabajo de la Fundación son los niños y jóvenes, ya que sólo a través de ellos es posible romper el círculo vicioso de la pobreza y las faltas de perspectivas.

La Fundación Samuel quiere ofrecerles a personas pobres y socialmente necesitadas la posibilidad de que con su propio esfuerzo puedan mejorar sus condiciones de vida. La actividad de la Fundación tiene como objetivo ayudarlos a que ellos se ayuden a sí mismos, ya que el progreso personal y social sólo puede surgir de la fuerza y voluntad de los propios interesados. La Fundación Samuel se ha concentrado en fomentar formaciones profesionales, debido a que la capacitación es el mejor camino para desarrollarse personal y socialmente.

El capital de la Fundación

Junto con las donaciones, los fondos para financiar los proyectos provienen en primer lugar de las rentas y réditos del capital obtenidos del edificio “Hohenzollernhaus”. El edificio, de seis pisos, con una fila de locales comerciales está ubicado en la renombrada avenida “Königsallee” en Düsseldorf. Además de la sede central de la Fundación, en el edificio se encuentran, entre otros, la joyería Wempe, la marca de ropa Tom Tailor y la oficina de servicios Word-Wide Business Centers.

El edificio fue adquirido por Robert Samuel en 1907. Luego de las reformas realizadas por el renombrado arquitecto Hermann von Endt, el señor Samuel, importador de cigarros, utilizó el edificio para almacenar y vender cigarros así como para oficinas. El nombre del edificio surgió, supuestamente, de la actividad de Robert Samuel como proveedor de la Casa Real de Hohenzollern, en Württemberg.

En la Segunda Guerra Mundial, una bomba incendiaria destruyó el edificio. Después de la guerra, paso a paso, el edificio fue reconstruido y ampliado. Luego de la restauración completa y de la reconstrucción del histórico techo, a principios de los años 80, el edificio “Hohenzollernhaus” es la base financiera más importante para las actividades de la Fundación.

Proyectos de ayuda

El punto central de la actividad de la Fundación es apoyar a niños y jóvenes en el ámbito educativo y de formaciones profesionales. Se ofrece a niños y jóvenes la posibilidad de aprender un oficio calificado y obtener un diploma. Los niños y jóvenes que reciben ayuda, además de provenir de clases sociales discriminadas, deben tener ciertas caracteristícas prometedoras de éxito. La enseñanza que se imparte es gratis y, en parte, están incluidos las comidas y los costos de transporte.

El sistema educativo de la Fundación se basa en el principio de fomentar y exigir simultáneamente. Por este motivo, los jóvenes que desean ser apoyados, además de ser carenciados, deben contar con un determinado nivel escolar, personalidad y el respaldo familiar. Durante la formación profesional, se espera de los jóvenes un rendimiento y un nivel de participación por encima del promedio general. Esto se debe a que se cree que sólo así los jóvenes podrán tener éxito en el mercado laboral.

Todas las formaciones profesionales ofrecidas tienen como meta oficios manuales, técnicos o de servicios, ya que para su aprendizaje no es necesario una educación escolar elevada. Esas formaciones son rápidas y orientadas a la práctica. Además demuestran tener una demanda elevada y perdurable. Solamente en Tailandia se fue hecho una excepción. Debido a las estructuras rurales de la zona donde se lleva a cabo el trabajo, una educación escolar general ofrece las mejores perspectivas de desarrollo para los jóvenes.

Oferta de capacitaciones

• Costa Rica
  • Refrigeración Industrial
  • Refrigeración en Transporte
  • Aire Acondicionado Industrial
  • Mecatrónica Automotriz

• Nicaragua
  • Supervisión Técnica de Obra
  • Asistente Administrativo
  • Asistente de Administración en Turismo
  • Mecatrónica Automotriz

• India
  • Sastre

• Tailandia
  • Educación escolar general

La oferta de capacitaciones para los becados consiste en cursos diarios que duran como máximo 21 meses. Al mismo tiempo, la Fundación ofrece cursos nocturnos para personas que ya tienen trabajo y cursos especiales de perfeccionamiento durante los fines de semana . Los cursos constan de una fase introductoria de unos dos meses, un período de 6 a 12 meses con las materias propiamente dichas, y una práctica de 2 a 3 meses. La orientación práctica y la preparación de los estudiantes para el trabajo real tiene, en todas nuestras formaciones, prioridad absoluta. Todas las formaciones incluyen un período de práctica de dos a tres meses en los establecimientos de los empresarios que colaboran con la Fundación. Durante la práctica, los estudiantes aprenden la forma de trabajar y cómo son los procesos productivos habituales del mercado. Además, con esas prácticas se tiene la esperanza de que los jóvenes sean contratados apenas terminada su formación.

Los mercados laborales actuales, con sus dinámicos cambios exigen más que conocimientos técnicos. Por esa razón, no se limita a proporcionar solamente conocimientos técnicos. El trabajo está dirigido a una formación profesional integral. Con ese fin, los estudiantes reciben clases de inglés y computación.

Una parte importante de las clases es, además, “la incentivación de la personalidad” de los estudiantes. Ellos provienen, sin excepción, de medios sociales discriminados. Además de todas las privaciones económicas, muchos de ellos han crecido con problemas de educación, salud y sociales, han vivido en la calle y han consumido drogas. Algunos fueron criminales, otros fueron víctimas de violencia y abusos. Con la ayuda de esos “entrenamientos para la personalidad”, se trata de mitigar las consecuencias de ese pasado y de poner a los jóvenes en forma para el futuro. Como parte del entrenamiento para la personalidad, los estudiantes deben realizar trabajos sociales. Los mismos pueden ser actividades en las instalaciones del centro de capacitación o servicios de ayuda de la Fundación para otras instituciones. Los jóvenes, en forma gratuita, renuevan jardines de infantes o escuelas, limpian parques públicos, o cuidan a niños en horfanatos. De esa manera, les se transmite a los estudiantes conciencia de conducta social y al mismo tiempo, se mitiga el problema de que los jóvenes se sientan rebajados al recibir ayuda, ya que de esa forma, pueden y deben aportar algo para su formación profesional, lo que al mismo tiempo fortalece la seguridad en sí mismos.

Además de la actividad central de las formaciones profesionales, la Fundación Samuel apoya proyectos específicos de los cuales nos enteramos a través del trabajo que realizamos. De este modo, desde 1990 apoya al Centro de Salud El Tepeyac, en Nicaragua. También en Costa Rica, el país vecino, participa activamente en otro proyecto: en San Isidro, se mantiene junto con las autoridades responsables del lugar PANI (Patronato Nacional de la Infancia) dos albergues para niños en los que los pequeños, víctimas de violencia, encuentran un refugio que les ofrece vínculos similares a los de una familia. En Alemania, la Fundación es fundador y socio de la organización KiD gGmbH, una institución clínica en Duesseldorf especializada en niños víctimas de abusos. Además, la Fundación apoya regularmente a jóvenes estudiantes de la Academia de Arte de Duesseldorf.

Exitos

Hasta ahora, más de 3.900 jóvenes han concluido con éxito los programas de formaciones profesionales. Hasta un 90 % de ellos ha conseguido tres meses después de su graduación un puesto de trabajo calificado acorde con su oficio.

Indice de las fuentes

Página web de la Fundación Samuel