- Lucía Íñiguez
-
Lucía Íñiguez
Lucía Íñiguez y Landín Moreno,patriota cubana que nació en el Departamento de Oriente, Cuba,en lo que hoy se conoce como Holguín.
Su familia de rancio abolengo criollo fue de las primeras en coadyuvar a la independencia de Cuba.
Contenido
La unión que dio un general cubano muy valioso
En 1853 Ramón García González contrajo nupcias con la holguinera Lucía Íñiguez Landín, esta no aportó ninguna dote al matrimonio "solo la ropa de mi uso". Posteriormente Lucia heredó del padre y un tío numerosas propiedades en Jiguaní y se trasladaron a esa villa.De esa unión devino dos hijas nombradas Leonor y María del Rosario, y un hijo Calixto, que andando los años sería uno de los más grandes Generales de la epopeya cubana.
En pie de guerra
Al iniciarse en La Demajagua la Guerra de los Diez Años Lucía Íñiguez arengó al hijo de sus entrañas a integrar las filas de quienes defendería su suelo patrio , demostrando así su patriotismo y fervor revolucionario.Heredó Calixto de su madre la serenidad la entrega total a la causa y el ímpetu, por lo que podía estar orgullosa de haber dado a la Patria un hijo de tal temple y tales merecimientos.
Lucía Íñiguez perdió a su esposo y todos sus bienes de fortuna; pero en unión de sus dos hijas, trabajó para ganar el sustento diario y trabajó más todavía en la causa de su Revolución. Colectó fondos para los insurrectos, introdujo proclamas clandestinamente, cosió ropas para los valientes mambises, preparó hilas y vendajes, envió en algunas ocasiones sus escasos y pobres alimentos a los que nada tenían que llevarse a la boca entre el fuego ardiente de los combates heroicos
Día de sangre y de gloria
Un día aciago, el 16 de septiembre de 1874 su hijo Calixto se encontró en el más duro trance de su vida. Separado del grueso de sus fuerzas, acompañado tan solo de sus ayudantes y de un práctico estaba en los instantes en que fue sorprendido, en el potrero de San Antonio de Bajá, por una guerrilla al mando del Teniente Ariza.
Sus acompañantes Castellanos y Planas fueron inutilizados para seguir luchando y el General García al verse perdido irremediablemente, se aplicó el revolver debajo de la barba y se dio un tiro.El proyectil respetó su sagrada existencia y la suerte quiso que sobreviniese hasta 25 años después, cuando estaba ya consumada la obra de la Libertad.Moribundo Calixto García, llevaron la noticia de la captura a su madre que lo adoraba y cuyo temple se apreciaba de conocer mejor que nadie.Al recibir Lucía Íñiguez la infausta nueva de que el General estaba herido, la considero falsa, pues creía que no era fácil su aprehensión por los españoles. Le advirtieron, al fin, que se hallaba, sí, en poder del enemigo, pero en estado gravísimo, ensangrentado, como que el proyectil le había salido por la frente. Ante la ruda revelación, creyolo muerte antes que rendido y cuenta la Historia que aquella matrona admirable exclamó: -“Ese, ese es mi hijo Calixto”.
Su nariz dejó de inhalar, mas su alma aún perdura en su ciudad natal Holguín viva y reluciente
Cargada de años y de virtudes dejó de existir la augusta dama el 7 de mayo de 1906.De esta forma moría una mujer que no solo había entregado su cuerpo y alma a la causa de los cubanos de hacerse libres del régimen colonialista impuesto por España sino también aquella que fue capaz de entregar hasta el su fruto más preciado, su hijo.
Categoría: Cubanos
Wikimedia foundation. 2010.