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Ananías Maidana
Ananías Maidana Nombre Ananías Maidana Nacimiento 26 de julio de 1924 (85 años)
Encarnación, ParaguayOcupación Profesor, escritor, político Nacionalidad Paraguayo Ananías Maidana (n. Encarnación, Paraguay; 26 de julio de 1924) es un profesor y político paraguayo, secretario general del Partido Comunista Paraguayo entre 1989 y 2007, y candidato a senador por la Alianza Patriótica Socialista en el 2008, coalición política en la cual el PCP participa. Durante la dictadura de Stroessner, estuve preso por 24 años.
Contenido
Infancia y juventud
Ananías Maidana nació el 26 de julio de 1924 en Encarnación, Paraguay, donde cursó sus estudios primarios en la Escuela Normal Nº 4 “Clementina Irrazábal”, en la cual también prosiguió sus estudios secundarios. A escasos tres meses de la culminación de los mismos, sufrió persecución de parte de los gobernantes de turno, debiendo trasladarse a Asunción, donde vivió en la semiclandestinidad y semilegalidad.
Deseando terminar su profesorado se inscribió en la Escuela Normal Nº 2, y ahí fue buscado por la policía, llevando equivocadamente a otra persona que fue torturada, como era rutina en la época.
Inicios en política
Ananías Maidana comentó que en su juventud fue colorado, llegando inclusive a militar en las filas de la juventud de dicho partido. Sin embargo, en 1940, a los 16 años, Maidana se convierte en comunista, luego de ver como, según él, eran explotados unos obreros en una fábrica.[1]
En 1947, por participar en la lucha por la democracia y la justicia social en las filas de la Juventud Comunista Paraguaya, contra la dictadura del General Higinio Morínigo, fue apresado, torturado y trasladado a la Cárcel Pública de Asunción, que estaba ubicada donde hoy funciona la Universidad Católica.
En los años 1947/49 eran cerca de 4.000 los presos políticos, de todas las corrientes políticas, figurando entre ellos 132 jefes y oficiales del Cuadro Permanente del Ejército. En esta forma se castigó la insurrección democrática que se conoce como la Revolución de Concepción (marzo-agosto/47).
Todos los presos sin excepción eran salvajemente torturados, pudiendo nombrarse al Mayor Franco, hermano del Coronel Rafael Franco, y al Tte. Cnel. Vázquez. Después la mayoría fue confinada o desterrada. Ananías Maidana, junto con otros dirigentes y militantes revolucionarios pasaron nuevamente a la clandestinidad.
Militancia y encarcelamiento
En 1950 fue apresado en la calle y golpeado brutalmente con pistola y con fusil, arrastrando hasta hoy días las secuelas de esos golpes.
Logró salir en 1952, gracias a la solidaridad nacional e internacional y mediante las gestiones de los familiares, los cuales en todos los tiempos jugaron un papel vital para salvar la vida y conquistar la libertad de los presos.
En lugar de salir al exterior, al exilio, donde se contaba con cierta seguridad, Ananías pasó nuevamente a la lucha clandestina contra el régimen autoritario represivo imperante entonces.
Bajo la dictadura de Stroessner era buscado intensamente por la policía y el 3 de junio de 1959, cuando participaba de la conducción democrática y unitaria antidictatorial, fue apresado y golpeado en plena calle. Mediante la violencia represiva la dictadura pretendió aplastar un gran movimiento popular que tenía de epicentro al movimiento obrero y estudiantil. Cabe recordar que la clase obrera, en su mayoría sindical dirigida por colorados, realizó una huelga general que quebrantó la base social de sostenimiento del gobierno. A esto se sumó la gran huelga y las manifestaciones estudiantiles y juveniles de abril, mayo y junio de 1959, que produjo una crisis en el Partido Colorado.
En ese tiempo comienza un nuevo calvario para Ananías Maidana, que duraría 20 años de encarcelamiento en calabozos de castigo y en el campo de concentración de Emboscada, junto con sus camaradas el Profesor Antonio Maidana (después secuestrado-desaparecido el 27 de agosto de 1980), el Profesor Julio Rojas, Alfredo Alcorta, entre centenas de presos de todos los partidos políticos y del movimiento social.
En la Comisaría 3ª Ananías estuvo durante 17 años en un calabozo de 1,7 × 4,7 con otros 15 presos políticos, calabozo que fue bautizado “el panteón de los vivos”, pues allí no tenían luz ni ventilación. El baño se encontraba dentro del calabozo, y allí tenían que hacer sus necesidades. Pasaban semanas y meses sin ver la luz del sol.
En una oportunidad, Monseñor Benítez, con una delegación de 6 diputados y 6 senadores chilenos hicieron una visita para saber cuáles eran las condiciones de encierro en el Paraguay de Stroessner. No pudieron entrar debido al hedor que despedía el calabozo.
Uno de los visitantes solidarios, al ver la humedad y las condiciones horribles en que se encontraban los detenidos, atinó a preguntar si cuántas horas llevaban detenidos ahí en esas condiciones, a lo que los presos contestaron que hacía cinco años que sobrevivían en esas condiciones infrahumanas. El comentario de los chilenos fue que habían recorrido varios países de Asia, África y Oceanía, y que jamás habían visto esas condiciones tan inhumanas como las que existían acá. Recalcaron enfáticamente que era una ignominia tener a seres humanos en esas condiciones, más aún como castigo a estos hombres por sus ideales de redención social.
Cuando los Obispos católicos reclamaban la libertad de estos presos enterrados en vida, Stroessner les contestaba cínicamente: “No se preocupen porque ellos están condenados a morir en prisión”.
Cuando la solidaridad nacional e internacional era muy fuerte, Stroessner confesaba: “Estos no son mis presos”, dando a entender que estaban a cargo de los altos mandos, subordinados a la CIA, que era la que imponía las estrategias durante la “Guerra Fría” y la “doctrina de la Seguridad Nacional”.
A finales de la década del 70 fueron encerrados en el Campo de Concentración de Emboscada junto con centenas de luchadores sociales y políticos, especialmente de origen campesino. Y liberado en 1978, fue condenado al exilio, yendo a Suecia y luego a la Unión Soviética, desde donde denunció los crímenes de Stroessner y promovió la solidaridad con nuestro pueblo, a través de una intensa labor periodística y política.
Caída de la dictadura
Apenas derrotado Stroessner en 1989, Ananías Maidana retornó al país para sumar su esfuerzo a la lucha por una verdadera democracia con justicia social, en camino hacia una sociedad sin explotados ni explotadores, hacia la construcción del socialismo en el Paraguay. Desde ese año, asumió el cargo de secretario-general del Partido Comunista Paraguayo, que ejercería hasta 2007.
Actualidad
Actualmente, Ananías Maidana es uno de los dirigentes históricos del PCP, y se presentó al cargo de senador para las elecciones del 20 de abril de 2008. Sigue trabajando para fortalecer la democracia, y para que se haga justicia en el caso de las víctimas de la dictadura. Es presidente honorario del PCP desde 2007.
Referencias
Bibliografía
- Antonio Bonzi: Proceso histórico del Partido Comunista Paraguayo (Un itinerario de luces y sombras), Arandura Editorial, Asunción 2001.
- Entrevistas varias con militantes del Partido Comunista Paraguayo
Véase también
Predecesor:
Julio RojasSecretario General del PCP
1989 - 2007Sucesor:
Najeeb AmadoCategorías: Nacidos en 1924 | Marxistas | Comunistas del Paraguay | Activistas de Paraguay | Opositores a la dictadura de Stroessner
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