- Pedro de Gante
-
Pedro de Gante
Fray Pieter van der Moere, conocido como Fray Pedro de Gante o Pedro de Mura (Geraardsbergen, hoy en Bélgica, 1479? - Ciudad de México, 19 de abril de 1572). Religioso franciscano flamenco, uno de los primeros en arribar a México, donde permaneció casi cincuenta años como evangelizador y educador.
Contenido
Biografía
Niñez y adolescencia
Los datos sobre su niñez y adolescencia son escasos, al punto que no se conoce con exactitud su fecha de nacimiento1. Existe sin embargo evidencia suficiente para determinar que era hijo del hermano de Maximiliano de Habsburgo, entonces Emperador del Sacro Imperio Romano. No se sabe con certeza cuando ingresó a la vida conventual, pero permaneció como hermano lego durante toda su vida religiosa, a pesar de que su relación de parentesco con la casa imperial podría haberlo colocado en una posición destacada. De hecho, algunas fuentes sostienen que rechazó el arzobispado de México cuando este le fue ofrecido por su pariente Carlos I de España.
Hacia el Nuevo Mundo
En 1522 el Emperador Carlos V solicita al papa Adriano VI misioneros para los territorios de la Nueva España recién conquistados por Hernán Cortés. Jean Glapion, un fraile franciscano consejero y confesor del Emperador, fue escogido. Glapion logró reclutar a otros hermanos de su orden, entre ellos fray Pedro. Los franciscanos flamencos partieron de Gante el 27 de abril de 1522, arribando a España en julio. Glapion morirá antes de embarcar para América, y los restantes frailes parten el 31 de mayo de 1523, desembarcando en Veracruz el 13 de agosto de ese año.
Fray Pedro y sus compañeros (Juan de Tecto y Juan de Aora) se dirigen a México-Tenochtitlan. Pero la ciudad se encuentra en estado caótico, y asolada por la peste. A sugerencia de Cortés, se trasladan a Texcoco. Allí se dedican a estudiar el náhuatl, comprendiendo la necesidad de comunicarse en la lengua del lugar. Pedro permanecerá en Texcoco un tiempo, mientras los otros dos frailes se unen a la expedición de Cortés a Honduras, en la que perderán la vida.
Educador y evangelizador
Ya de regreso en la ciudad de México, fundará la escuela de San José de Belén de los Naturales, junto al convento de San Francisco. Esta institución estaba dedicada a instruir, particularmente, a los hijos de la nobleza local. En ella adoptará un método de internado similar al empleado por los antiguos mexicas, con el propósito de suministrar educación religiosa y crear al mismo tiempo un grupo misionero que reproduzca y difunda la religión con capacidad de predicar en las distintas lenguas de las culturas de Mesoamérica. En sus palabras, «He escogido unos cincuenta (niños) de los más avisados, y cada semana les enseño a uno por uno lo que toca decir o predicar la domínica siguiente; lo cual no me es corto trabajo, atento día y noche a este negocio para componerles y concordarles sus sermones». Su dedicación fue completa: «En el día enseño a leer, escribir y cantar; en la noche, doctrina cristiana y sermones». Uno de sus alumnos fue Diego de Valadés, hijo de un español y una tlaxcalteca, que será el primer mestizo ordenado fraile en América (1547).
Tiempo después incorporará la enseñanza de artes y oficios. Así, saldrán de la escuela un gran número de artesanos que construirán algunas de las obras religiosas más significativas de este período de la histora de México. Hacia 1525 compondrá una Doctrina Christiana en Lengua Mexicana, presuntamente impresa en Amberes en ese año2. Se compadecerá de la situación de explotación a la que se hallaban sometidos los nativos. En reiteradas ocasiones protestará por ello, primero ante su pariente el Emperador, y luego ante Felipe II. Dirá al primero, en 1552, que «...(estos indios) no fueron descubiertos sino para buscalles su salvación, lo cual, de la manera que ahora van, es imposible... Vasallos de Vuestra Magestad son, la sangre de Cristo costaron, sus haciendas las han tomado, razón será que (Vuestra Magestad) se duela dellos; y pues están desposeídos de sus tierras, que en pago les ganen ánimas». Añade que se atreve a dirigirse al Emperador pidiendo remedio porque «dame atrevimiento ser tan allegado a V. M. y ser de su tierra». En otra carta advierte que «Aviso, como siervo de Vuestra Magestad, que si no provee en que (los indios) tributen como en España (los españoles) de lo que tienen y no más, y que sus personas no sean esclavos y sirvan, la tierra se perderá...», requiriendo que sean «personas libres y que... no sirvan, pues los españoles nunca sirvieron».
Relación con la cultura indígena
De su relación con los indígenas, dirá en otra carta al Emperador que «los tengo a todos por mis hijos, y así ellos me tienen por padre» (Carta del 20 de julio de 1548). Continuará enseñando y predicando hasta muy avanzada edad, y morirá en la ciudad de México el domingo de Pascua de 1572. Dirá de él fray Gerónimo de Mendieta en su Historia eclesiástica indiana: «fue muy querido, como se vio muy claro en todo el discurso de su vida, y en que con ser fraile lego, y predicarles a los indios y confesarlos otros sacerdotes grandes siervos de Dios y prelados de la Orden, al Fr. Pedro solo conocían por particular Padre, y a él acudían con todos sus negocios, trabajos y necesidades, y así dependía de él principalmente el gobierno de los naturales de toda la ciudad de México y su comarca en lo espiritual y eclesiástico; tanto que solía decir el segundo Arzobispo Fr. Alonso de Montufar, de la orden de predicadores: "Yo no soy arzobispo de México, sino Fr. Pedro de Gante, lego de San Francisco"»
Por un lado, se destaca su larga trayectoria como educador y evangelizador. Por otro, se señala que Pedro de Gante tuvo una actuación significativa en el proceso de aculturación de la población indígena, y en la destrucción de su patrimonio cultural escrito. Se cita, como ejemplo de los mecanismos de aculturación, el método pedagógico impuesto en su escuela de San José de los Naturales que el propio fraile relata en una carta al rey Felipe II: «...se juntaron luego, pocos más o menos, mil muchachos, los cuales teníamos encerrados en nuestra casa de día y de noche, y no les permitíamos ninguna conversación (comunicación con el exterior], y esto se hizo para que se olvidasen de sus sangrientas idolatrías y excesivos sacrificios» (Carta del 15 de junio de 1558).
Fue beatificado en 1988, por el Papa Juan Pablo II.
Obras
- Manuscritos
- Catecismo de la doctrina cristiana con jeroglíficos, para la enseñanza de los indios de México: Madrid, Archivo Histórico Nacional, Códice 1257B.
- Ediciones
- Doctrina Christiana en Lengua Mexicana. Per signum crucis. Icamachiotl cruz yhuicpain toya chua Xitech momaquixtili Totecuiyoc diose. Ica inmotocatzin. Tetatzin yhuan Tepilizin yhuan Spiritus Sancti. Amen Jesús (primera publicación ca. 1547, México: Juan Pablos; 1553, Amberes; 1553, México: Juan Pablos, 1555. Edición facsimilar con comentarios ed. por Ernesto de la Torre Villar (México, 1981).
- Catecismo de la doctrina cristiana con jeroglíficos, para la enseñanza de los indios de México, Edición facsimilar con introducción de Federico Navarro (Madrid, 1970) / Justino Cortés Castellanos, El catecismo en pictogramas de Fr. Pedro de Gante (Madrid, 1987).
- Cartas, versos religiosos en mejicano, ed. en: Joaquín García Icazbalceta, Códice franciscano (México, 1941), 212ff.
Notas
- La mayoría de las fuentes lo da por nacido en 1479. Otras señalan 1476, 1490, y hasta una lo ubica ca. 1500. Esta última lo considera hijo bastardo de Felipe el Hermoso, y por lo tanto, hermanastro de Carlos I de España. A este último respecto, la mayoría de las fuentes coincide en considerarlo hijo bastardo del abuelo de Carlos V, Maximiliano de Habsburgo.
- No se ha encontrado hasta ahora evidencia de la presunta impresión de 1525 en Amberes. Las ediciones conocidas se mencionan en la sección Obras.
Enlaces externos
Categorías: Cristianización de México | Beatos franciscanos | Religiosos de Flandes | Nacidos en 1479 | Fallecidos en 1572 - Manuscritos
Wikimedia foundation. 2010.