Raúl Campero Núñez (Nayarit, 29 de noviembre de 1919 - † Sonora, 31 de octubre de 1980). Desde que era muy pequeño y cuando sus padres vivian en Colima, Raúl quiso ser soldado. Su padre, que había participado en la Revolución, en la que destacó en la campañas en Jalisco, llegó a ser Coronel sin haber cursdado estudios para ello. Por eso Raúl se propuso ser soldado y se trazó como meta llegar al Colegio Militar. Igresó a él cuando tenía 18 años. Era un muchacho de piel morena clara y muy delgado; tanto que suponiendo ademáas que era de Colima y no de Nayarit, sus amigos le llamaban Colimote Rodilón. Muy pronto destacó en los deportes, principalmente en boxeo, futbol, tumbling y equitación.

Su primer maestro de salto fue el capitán Francisco Carrandi; después recibió instrucción del Capitán Heriberto Anguiano de Fuente. Siendo cadete, a borde del buque "Durango" realizó una gira a Chile, formando parte de una delegación militar, deportiva, comercial y artística, integrada por casi 500 personas. Dio exhibiciones de tumbling y de salto y cuando regresó de esa excursión se graduó como Subteniente y se incorporó al Regimiento de Caballería, donde logró notas tan buenas que al año siguiente alcanzó el grado de Teniente en la XXI zona militar. En 1942 comenzó a perfilarse su futuro; al competir en varios concursos obtuvo triunfos importantes y atrajo la mirada de Mariles, quien ya era el jefe de la Asociación Nacional Ecuestre, de inmediato pidió que Raúl fuese trasladado a la capital, lo que logró después de muchos trámites. En septiembre de 1943 Raúl fue nombrado instructor de la Asociación. Era un hombre noble, muy humano, su carácter era alegre y sabía ser buen amigo. Poco después comenzó a montar a Hatuey y a destacar con él conquistando importantes premios en Norteamérica, y en abril de 1946, haciendo equipo con Mariles, Alberto Valdés y el Capitán José María de Incháustegui, ganó la prueba por equipos del II Concurso internacional, diás después ganó otra prueba por equipos, ahora con Valdés y José Eduardo Pérez. Más adelante en otro concurso empató con Saucedo Carrillo y concluyó venciendo en la prueba de precisión. El de 1947 no fue un año muy grato, todo sucedió en los últimos meses: por un lado, repentinamente Mariles le quitó a Hatuey, dividiendo así uno de los mejores binomios no sólo del país, sino del mundo entero; el cambio decepcionó a Raúl porque había trabajado mucho con Hatuey, con el que logró importantes victorias . . . en el Madison Square Garden se adueñó del White Stone y días después en Toronto, del trofeo Cóndor, obsequiado por el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Por el otro, sufrió un fuerte golpe en la pierna derecha y muy lastimado fue a competir en Nueva York y Toronto. Aun así logró un segundo y un tercer sitio en el Madison. Campero no se arredró, buscó un nuevo caballo y fue a Jalisco, donde encontró a Jarocho. Y sobre los lomos de Jarocho se lanza Campero en pos de la imortalidad deportiva. Roma es apenas el inicio.

Roma, 1 de mayo de 1948.- Inicia el equipo ecuestre mexicano su gran gira final preolímpica. Enfrenta a partir de hoy en la Piazza di Siena a los mejores jinetes europeos. Viene de realizar una exitosa excursión por pistas norteamericanas, pero este es otro mundo, el mundo de la historia, de la prosapia ecuestre. Titular principal del diario La Afición: Gran triunfo de los Caballistas Mexicanos en Roma. Decía la nota informativa "El Capitán Raúl Campero, montando al caballo de media sangre Jarocho, hizo el recorrido perfecto, dentro del límite y ganó el primer lugar . . . Con esta prueba el Capitán Campero Nuñez ratificó una vez más, su gran calidad de jinete, de héroe de la equitación mexicana, ya que en casa y en el extranjero ha logrado triunfos tan resonantes, tan grandes,

Londres 10 de agosto de 1948.- Mariles ya ha dado la lista de participantes para la Prueba de los tres días: Mariles-Parral, Campero-Tarahumara y Joaquín Solano Chagoya-Malinche; sin embargo, para Campero fue un momento muy duro cuando le notificaron que no estaría en el Premio de la Naciones, porque para esa prueba se había preparado. Y así lo demostró, sobre Jarocho, con su extraordinaria campaña en la gira por europa previa a los Juegos. En Vichy, Mariles le había insinuado que ambos estarían en los Tres Días. No podía hacer nada. ¿Como, si Mariles era el jefe y él ordenaba que jinete y que caballo competirían? Raúl se sentía decepcionado, como cuando le quitaron a Hatuey. Pero no era un hombre que se venciera tan fácilmente; si iba a montar a Tarahumara, lo haría de la mejor manera. Y lo hizo, por eso se sientió tan satisfecho y orgulloso de esa medalla, aunque nunca pudo ocultar que más importante que todo eso fueron sus victorias en Roma, Monteccatini, Lucerna y Vichy, en donde entre otras cosas, demostró ser mejor jinete que el mismo Mariles.

Campero, que monto el peor caballo nos señaló la falta de cooperación y dirección que hubo en el equipo durante el desarrollo de esta prueba, sobre todo al terminar la fase de fondo, pues su caballo al terminar estaba agotadísimo y no había asistente que se lo detuviera para ir a la báscula como es obligación; el Capitán Gracida y Uriza se encargaron de atenderlo y una señora desconocida dwel público se quitó una manta con la que se cubría de la lluvia y se la dio para que taparan al caballo. En cambio al Jefe, lo esperan tres asistentes y el veterinario.

Dos horas después el nombre y los colores de México quedaban registrados en la historia de los Juegos Olímpicos en el tercer lugar de la competencia de los Tres Días o Caballos de Armas. de los XIV Juegos Olímpicos efectuados en Inglaterra.

El Mayor Raúl Campero murío el 31 de octubre de 1980 en Nogales, Sonora a causa de una paro cardio respiratorio.