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Rehabilitación de barrios
La rehabilitación o la revitalización de barrios es un instrumento global para la recuperación integral de ámbitos urbanos, centrales o periféricos, afectados por problemas habitacionales, con el objetivo de mejorar las condiciones de alojamiento de la población y otros aspectos de carácter urbanístico, social y económico, mediante la integración, la coordinación y el fomento de las distintas actuaciones que los agentes públicos y privados puedan desarrollar en dichos ámbitos urbanos[1]
Contenido
Rehabilitación de Barrios en Andalucía
La rehabilitación de barrios que realiza la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio pretende la revitalización de la ciudad construida desde una perspectiva de sostenibilidad urbana, social y económica. Mejorando las condiciones de habitabilidad y de identidad de los vecinos con su barrio y su ciudad. Este proceso innovador se realiza integrando a las distintas Administraciones Públicas, la inversión privada y a los vecinos mediante procesos participativos.
Se trata de un modelo de intervención de las políticas públicas, basado en una gestión integral y multidisciplinar, que utiliza la vivienda como recurso integrador del tejido urbano. Es una de las mayores operaciones de rehabilitación integral de la ciudad impulsada por una Administración Pública.
Historia, génesis periodo 1940-1970
En los años cuarenta se inicia en las grandes ciudades de Andalucía un notable crecimiento demográfico que irá en aumento hasta la década de los sesenta y principios de los setenta y que conlleva en algunos casos triplicar la población de algunas ciudades andaluzas.
Esto originó una situación crítica para el Estado y otras instituciones públicas que tuvieron que afrontar la tarea de intentar resolver el grave problema de la vivienda en las grandes ciudades, convirtiéndose en los principales agentes del crecimiento urbano en este periodo. La periferia de todas las grandes ciudades andaluzas va a empezar a verse salpicada por un grupo de conjuntos residenciales, en su mayoría simplemente apoyados en ejes viarios y desvinculados del resto de la trama urbana.
Estos conjuntos, en muchos casos denominados barriadas para distinguirlos de los barrios tradicionales, son promovidos por la Obra Sindical del Hogar[2] y los patronatos religiosos y municipales. Presentan, por lo general, una calidad desigual. Esta etapa entre 1940-1950, supuso un crecimiento basado en bloques de cierta altura que se dispone en manzanas cerradas tradicionales donde los accesos a las viviendas se relacionan directamente con la calle reservándose el interior para las áreas de servicio. El conjunto de los bloques de cierta altura formalizan barrios de manzanas con calles definidas por las alineaciones de fachadas, con cierta semejanza a la ciudad tradicional.
Sin embargo, en el periodo entre 1950-1960, requerirán una disposición más libre de los bloques de vivienda, será preferible mantener la orientación óptima o la regularidad de la planta a mantener las alineaciones viales continuas. Es decir, la edificación comienza a seguir únicamente sus reglas compositivas sin que el acceso a las viviendas, zonas de aparcamiento etc. tenga porque condicionarlas. Esta nueva forma de construir ciudad de los nuevos barrios residenciales de iniciativa pública se caracteriza por la sustitución del concepto calle-edificio por espacio libre-edificación. Este modelo de crecimiento, planteado desde la Administración y denominado “polígono”, tuvo carácter unitario y cierta dimensión, estando concebidos como áreas monofuncionales destinadas a cubrir las demandas de vivienda.
En todas las grandes ciudades andaluzas surgen estos polígonos, que cambian sustancialmente la imagen de nuestras periferias, ejemplos como Almanjayar en Granada, Tres Mil Viviendas en Sevilla, Palma Palmilla en Málaga, El Puche en Almería, La Paz en Cádiz etc., son algunos ejemplos que jalonan nuestra geografía en esos momentos.
La iniciativa privada se va sumando paulatinamente a esta estrategia, en la época entre 1960-1970. Se produce un aumento de las actuaciones especulativas: barrios de bloques de alta densidad en los que rápidamente se abandonan las tipologías menos rentables de doble crujía siendo sustituidas por los bloques de cuatro crujías (bloques en H), provocando una mayor colmatación urbana y una pérdida de las condiciones de habitabilidad.
El resultado de todas estas transformaciones fueron unas ciudades en principio, de mayor extensión, en situación periférica y mal conectadas con los centros urbanos, de gran variedad morfológica y de una fuerte segregación funcional y social. Sus carencias más alarmantes: escasa recepción por unos modos de vida muy diferentes, incapacidad para dictar comunicación social primaria a sus habitantes, equipamiento social incompleto o deficitario, rigidez de su zonificación[3]
La necesidad de intervenir
Con la entrada de la democracia, se comienzan a solucionar los enormes déficit urbanísticos heredados. Aparecen a partir de los ochenta las primeras políticas urbanísticas de los Planes Generales, que empiezan a dar respuesta a las situaciones que se estaban generando. Los crecimientos de las ciudades más ordenados, hacen que estos “polígonos” en una situación muy periférica de la ciudad comiencen a ser absorbidos por la trama urbana, por lo que actualmente han perdido su condición de extrarradio frente a otras zonas. Sin embargo su problemática urbana y social, y un parque público de viviendas con más de 60 años de antigüedad que no cumplen las condiciones de confort, aislamiento, accesibilidad, eficiencia energética, obligan a una actuación integral y de revitalización urbana a fin de conseguir una ciudad más sostenible.
Definición y objetivos
Para conseguir detener este proceso degenerativo que concurren en determinados barrios y producir la revitalización urbana y social, asegurando su desarrollo sostenible es necesaria la integración estratégica de distintas acciones provenientes de diversos campos: físico, social, laboral, educativo, económico… y la colaboración activa de la población y de las asociaciones de vecinos.
La política de rehabilitación nace del compromiso de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio de impulsar un nuevo modo de intervenir desde las administraciones en los barrios, basado en la participación activa ciudadana, y mediante mecanismos de gestión más ágiles que favorezcan la coordinación de recursos y esfuerzos a escala local para garantizar ciudades donde haya un lugar para todos. En cada ámbito seleccionado se abre una Oficina de Gestión dependiente de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía especilizada en gestión urbana y social, dando respuesta a los problemas de los residentes.
Las estrategias y las acciones que se realizan durante el trabajo de rehabilitación, son diseñadas de manera conjunta y previamente a cualquier actuación, y conlleva entre otras cosas un cambio de actitud en relación con la vivienda y su entorno, pero también a convertir a los residentes en ciudadanos reales de la ciudad donde habitan con sus derechos pero también con sus deberes, superando el aislamiento físico y social que sufre esta población, a fin de que las políticas y las intervenciones que se desarrollen sean sostenibles en el tiempo.
Estos aspectos, de naturaleza por lo general bastante compleja, están íntimamente ligados a la perspectiva integral que las actuaciones deben tener. Esta misma complejidad obliga a un desarrollo temporal de las acciones, y a la necesaria implicación de todas las administraciones y organizaciones como: universidades, fundaciones, ONG.. en definitiva de toda la ciudad, a fin de recuperar la ciudad para todos los ciudadanos.
Para llevar a cabo cualquier acción en el barrio se combinan las actuaciones en la recuperación de la vivienda con un trabajo sobre las necesidades de la familia que la va a habitar, (sus recursos, el entorno que la acoge...), unido además, a políticas educativas, formativas, de empleo y de salud. Todo ello, tiene como objetivo dar respuesta a las demandas de la población residente, como vehiculo capaz de garantizar la conservación e identidad del barrio.
La rehabilitación se convierte así en uno de los objetivos prioritarios de la Junta de Andalucía en materia de vivienda que parte del convencimiento de que, tan importante como crear nuevos barrios, es recuperar los ya existentes y así:
- Mejorar las condiciones de vida de la población residente, propiciando su integración social
- Regularizar el sistema de tenencia sea en alquiler o compra-venta, de los actuales ocupantes.
- Aprender a vivir en comunidad, participar y promover el propio desarrollo de los vecinos de la zona.
- Reequipamiento, dotación de servicios: comercio de barrio, bares-cafeterías… todo aquello que contribuye a una vida normalizada de convivencia.
- Fomentar la formación y la inserción socio laboral, creando empleo y generando riqueza.
- Mejora de la accesibilidad y movilidad, evitando el aislamiento y la inseguridad ciudadana.
El barrio es la “unidad básica” para reconstruir la ciudad, por tanto, la revalorización y el reconocimiento del barrio como espacio vital donde pueden resolverse los múltiples y crecientes problemas de nuestras ciudades es esencial para articular un proyecto de estas características. Devolver a la persona su carácter de ciudadano posibilita que convierta al barrio donde vive en un foco de atracción y de identidad.
Áreas de intervención
La rehabilitación de barrios es un compromiso de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio para dar solución a estas zonas de degradación urbana, social y económica de determinados ámbitos de las ciudades andaluzas. Experiencias como las desarrolladas en la década de los noventa en Trinidad-Perchel en Málaga, Molino Nuevo en Almanjayar Granada y La Chanca en Almería…, instauran los antecedentes del modelo que en la actualidad se aplica a un importante número de barrios de Andalucía. Este modelo se ha implantado y consolidando en las principales ciudades y barrios andaluces de manera progresiva, como son los siguientes:
- Almería : Chanca, Puche.
- Cádiz: Cerro del Moro, El Saladillo- La Piñera de Algeciras
- Córdoba: San Martín de Porres.
- Granada: Almanjayar.
- Huelva: Marismas del Odiel
- Jaén: Polígono las Lagunillas-Puerta de Madrid Andujar
- Málaga: Las Flores
- Sevilla: Polígono Sur, Parque Alcosa 1ª Fase, Barrio Pudio de Coria del Río.
Descripción de la intervención
La rehabilitación de viviendas y edificios, constituye el trabajo esencial de las Oficinas de Rehabilitación de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía en los barrios. Y tienen como objetivos principales señalados en el artº 70 del Plan Concertado de Vivienda y Suelo[4] las siguientes:
- Alcanzar condiciones suficientes de seguridad estructural y constructiva, dotando a los elementos estructurales de condiciones adecuadas en cuanto a resistencia mecánica, estabilidad y aptitud de servicio.
- Mejorar la protección contra la presencia de agua y humedades.
- Mejorar la iluminación natural y la ventilación interior.
- Mejorar las instalaciones de los suministros de agua, gas, electricidad y saneamiento.
- Mejorar las condiciones de accesibilidad mediante la supresión de barreras arquitectónicas y la adecuación funcional a las necesidades de personas con discapacidad.
- Mejorar las condiciones de eficiencia energética.
- Mejorar el acceso a los servicios de telecomunicación, audiovisuales y de información.
- Mejorar la disposición y las dimensiones de los espacios interiores, en el caso de rehabilitación de viviendas.
- La instalación, renovación y mejora de los ascensores y sus condiciones de seguridad, en caso de rehabilitación de los elementos comunes de edificios.
Los trabajos de rehabilitación en zonas comunes están dirigidos a la mejora de las instalaciones (agua, luz y saneamiento), rehabilitación de cubiertas y fachadas, eficiencia energética, recuperación de los espacios comunes y la colocación y/o puesta en servicio de ascensores, mejorando la accesibilidad a las viviendas de personas mayores o personas con problemas de movilidad. Queremos destacar dos aspectos, de estas intervenciones: por un lado la mejora de fachadas y cubiertas lleva unido una mejora ambiental exterior de los edificios que repercute muy favorablemente en la percepción del barrio y del espacio público inmediato, fundamental en la estrategia de mejorar la identidad y la percepción que tienen los ciudadanos con su barrio. Por otro lado la mejora del aislamiento, la colocación de nuevas carpinterías, y la instalación en su caso de placas solares repercute enormemente en la eficiencia energética de los edificios.
Otra es la realización de ascensores, donde se trabaja especialmente con las comunidades de vecinos para que se comprometan a su mantenimiento técnico con las compañías instaladoras articulando los mecanismos necesarios para que asuman los costes económicos de estos servicios.
La vivienda es el soporte material de la ciudad, que representa la convergencia entre el proyecto vital de las personas y el proyecto urbano. Al construir espacios más habitables estamos mejorando las condiciones de vida de las personas y las familias en la ciudad.
Hablar de vivienda es hablar de formas de vida, de dinámicas de cambio, de como vivimos hoy, como nos relacionamos, como usamos la vivienda y los espacios comunes, el hábitat doméstico, la funcionalidad del hogar, la seguridad, las necesidades de espacio para los niños, adolescentes, mayores; de tipos y modelos de familia y formas de convivencia entre familias. Por todo esto la clave es: la persona en su relación con su espacio inmediato, la vivienda. De esta manera pasamos hacia otros gradientes y escalas: la persona en su relación con los espacios intermedios, barrios, y ciudad. Hablar de proyecto vital, es hablar de la persona en su relación con la vivienda, con el barrio y con la ciudad.
Por ello, recuperar los espacios públicos, y crear espacios intermedios de convivencia es imprescindible en las actuaciones de rehabilitación de viviendas, ya que se complementa el espacio privado con el público. Los bloques a diferencia de las tipologías residenciales de la ciudad histórica (zaguán-patio-escalera-galería), tienen una gran escasez de espacio común de calidad: portales de escaso tamaño y escaleras y pasillos de acceso estricto a la vivienda; por lo que la relación entre la vivienda y los grandes espacios públicos es directa. La creación de pequeñas plazas, la gradación de estos grandes espacios públicos que permitan distintos niveles de intensidad y de relación, son fundamentales para que los residentes por un lado encuentren espacios más acogedores donde puedan relacionarse, hablar, jugar, descansar…
La permeabilización de la trama urbana, la mejora la accesibilidad peatonal y del viario en su conexión con las distintas zonas del barrio, la eliminación de barreras físicas… tiene como objetivo que estos barrios se conecten mejor con la ciudad evitando la situación de aislamiento y por tanto posibilitando su percepción de pertenencia a la estructura física, social, estructural, cultural… de la ciudad.
Continuar la labor de reequipamiento de los barrios, en especial los de formación que den oportunidades para generar empleo, los socioculturales, deportivos y los que permitan actividades lúdicas que se adapten a las culturas y necesidades de los colectivos que viven en el barrio, favorece enormemente el conocimiento intercultural y la convivencia vecinal.
La planificación de las actuaciones
Es necesario la planificación de las acciones que se tengan que realizar en la ciudad construida. La intervención en un ámbito urbano tan complejo y difícil es necesario realizarlo desde el conocimiento profundo de la realidad urbana, social, patrimonial, económica. Es necesario “conocer” para poder diagnosticar y proyectar las soluciones necesarias que permitan recuperar integralmente la ciudad con la participación activa de los vecinos, empresas y colectivos.
La intervención en cada ámbito o barrio a revitalizar, cuenta con un documento de planificación denominado: programa de actuación, que a largo plazo aborda no sólo la problemática de la vivienda, sino todos los demás aspectos que van a garantizar la mejora de la calidad de vida de sus moradores. Este documento constaría de las siguientes partes fundamentales:
- Definición del ámbito de actuación.
- Análisis, urbano, estado de la edificación, población, social, patrimonial, económico, usos, situación del régimen de tenencia de la vivienda.. etc.
- Información gráfica, análisis del planeamiento.
- Diagnóstico urbano y social participado.
- Determinación de las acciones, líneas de actuación.
- Programas de rehabilitación social y urbanos a aplicar.
- Gestión pública.
- Participación ciudadana.
- Estudio económico financiero.
- Compromiso de las administraciones y los privados.
La rehabilitación de los barrios son integrales e integrados para regenerar la ciudad, integrales en el sentido de la confluencia de las acciones descritas con anterioridad. Integrados porque abordamos los problemas con perspectiva y metodología interdisciplinar, teniendo como objetivo la resolución de la problemática. Los ejes de intervención de estas políticas de intervención en barrios son las siguientes:
- Mejora del hábitat urbano. Vivienda, espacios públicos, equipamientos de barrio.
- Acciones de tipo social.
- Pedagogía del hábitat.
- Participación ciudadana.
- Dinamización comercial, de empleo y económica.
- Otros. Movilidad y accesibilidad. Salud comunitaria
Bibliografía
- De Terán, Fernando (1999) Historia del Urbanismo en España III: siglos XIX y XX. Cátedra. Madrid
- Souty, J. (2007). Un monde de bidonvilles?. Sciences Humaines.
- Plan Concertado de Vivienda y Suelo de Andalucía 2008-2012.
- Bruyelle (coord.) (2000) Les très grandes concentrations urbaines. SEDES/Her
- (2006) Foro Barriadas. Nuevos Centros Urbanos. Sevilla
Referencias
- ↑ Definición del Plan Concertado de Vivienda y Suelo 2008-2012
- ↑ Benitez, Jorge (2009). Experiencia en barrios: San Martín de Porres, Córdoba, Revista la Ciudad Viva nº 1
- ↑ Iglesia Salgado, Félix y Ramón Moreno, José Ramón (2008). Foro Barriadas 2006. Nuevos Centros Urbanos. Los márgenes se hacen Centro. Revista la Ciudad Viva nº 1
- ↑ Plan Concertado de Vivienda y Suelo 2008-2012, artº 70
Otros documentos de interés
Enlaces externos
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