El Señor Oscuro es un título ostentado para el principal antagonista a las gentes libres de la Tierra Media en la obras de J.R.R. Tolkien, y se puede referir básicamente a los grandes Ainur que comandaron las fuerzas de la oscuridad en la Tierra: Melkor(Morgoth) el Vala o Sauron, el maia.

El título ostentado por Morgoth Bauglir (Melkor) (el Señor Oscuro) se refiere a su apariencia siniestra ya sea en forma de nube de tormenta, o de un oscuro señor; el Señor Oscuro se refiere a los ideales de Morgoth de autoproclamarse Rey supremo de la Tierra (que solo lograría y por un breve periodo de tiempo, ser rey supremo de la Tierra Media). Podemos aludir a la idea de Oscuridad como la representación máxima de la maldad.

Además, los objetivos malignos de Morgoth y Sauron eran muy diferentes entre sí. Morgoth quería controlar o destruir la misma materia de Arda, mientras que Sauron deseaba dominar la voluntad de sus criaturas.

También podemos atribuir este nombre a la contraposición de Morgoth ante la luz: Morgoth destruyó las lámparas de la Tierra, trayendo como consecuencia que la Tierra Media fuera sumida en un sueño encantado para que las nacientes criaturas no murieran por la falta de luz, y también la destrucción de los Árboles de Valinor. Pero podemos ver que incluso Morgoth no puede alejarse de la luz para consolidar su nombre de Señor Oscuro o Rey Supremo, porque irónicamente, la corona de Morgoth tenía engarzados los Silmarils, las tres Gemas más brillantes del mundo, en su corona de hierro que lo identificaba como Señor Oscuro.

El título de Señor Oscuro lleva consigo una atmósfera de abominación dada por los Noldor, ya que quien llevara éste título sería el principal enemigo declarado de los Noldor. Quizá Señor Oscuro sea una traducción simple en lengua común al vocablo Morgoth, que significa Negro Enemigo del Mundo o quizá este hecho haya ayudado a la implementación del término por sus enemigos.

Después de la Guerra de la Cólera Morgoth es completamente vencido y es exiliado de los círculos del mundo, pero transcurridos los primeros mil años de la Segunda Edad del Sol se levanta un segundo Señor Oscuro, el único capaz de tomar el título de su antiguo señor: Sauron, el maia. Sauron no tenía el mismo poder de Morgoth, ni siquiera se le acercaba, pero en materia de terror y maldad se dice que no era menos que el anterior Señor Oscuro. Sauron actúa de manera distinta a Morgoth, ya que se vale de la persuasión y el engaño, e incluso camina al lado de sus principales enemigos como Gil-Galad o Celebrimbor de Eregion, o Elendil de Númenor, pero finalmente, después de la caída de Númenor, Sauron es golpeado por la ola destructora de Oesternesse y pierde por siempre el poder de adoptar el agradable semblante de Annatar (señor de los dones, una especie de adelanto a los Istari o magos), y adopta la figura del Guerrero Oscuro y Terrible, tal como su maestro Morgoth, y muchos de los lugares y objetos que le pertenecen hacen alusión a Morgoth, como el valle de Udûn en Mordor (en alusión al nombre sindarin de Utumno), el hecho de asentarse cerca del Orodruin (una gran Montaña que escupía oscuridad como Thangorodrim) y de trabajar allí en fraguas y forjas (tal como se hacía en Angband), o el hecho de nombrar al ariete que presentó batalla a Gondor en la Tercera Edad Grond en honor al Martillo de los Mundos Subterráneos esgrimido por Morgoth en la Primera Edad del Sol.

Sauron, el segundo Señor Oscuro, es derrotado el 25 de Marzo de 3019 TE, y nunca más habría alguien que adoptara el título.

Así como hay quienes ostentan el título de Señor Oscuro hay quienes lo desean, de los cuales el mayor ejemplo es Curunír o Saruman el Blanco, quien buscaba hacerse por todos los medios del anillo regente para quedarse con la mayor y mejor parte de la fuerza de Sauron. Galadriel supera el deseo a hacerse con el título de Sauron, y es por éste motivo y por sus servicios al Portador del Anillo, que se le permite regresar al Oeste.