Imperialismo en asia

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El imperialismo en Asia tiene sus raíces se remontan a finales del siglo 15 con una serie de viajes que buscaba una ruta marítima a la India en la esperanza de establecer el comercio directo entre Europa y Asia en las especias. Antes de 1500 las economías europeas estaban en gran medida autosuficiente, sólo complementa con el comercio menor, con Asia y África. En el siglo siguiente, sin embargo, las economías europeas y asiáticas fueron poco a poco se están integrando a través de la aparición de nuevas rutas de comercio mundial, y el impulso a principios del poder político europeo, el comercio y la cultura en Asia dio lugar a un creciente comercio de materias primas-una lucrativa desarrollo clave en el aumento de la actual economía de mercado moderno mundo libre

En el siglo 16, los portugueses se rompió el monopolio de los árabes y los italianos del comercio entre Asia y Europa por el descubrimiento de la ruta marítima a la India por el Cabo de Buena Esperanza. [1] Sin embargo, con el ascenso de su rival holandés Oriente Compañía de las Indias, la influencia portuguesa en Asia fue poco a poco eclipsado. Las fuerzas holandesas estableció por primera vez las bases de independiente en el este (lo más importante Batavia, la sede de la fuertemente fortificada de la Compañía Holandesa de las Indias Orientales) y luego entre 1640 y 1660 luchó Malaca, Ceilán, algunos puertos del sur de India, y el lucrativo comercio de Japón a los portugueses. Más adelante, el Inglés y los asentamientos franceses establecieron en la India y estableció un comercio con China y sus propias adquisiciones gradualmente superar a las de los holandeses. Después del final de la Guerra de los Siete Años en 1763, el británico eliminó la influencia francesa en la India y estableció la British East India Company como la fuerza política más importante del subcontinente indio.

Antes de la Revolución Industrial en el siglo 19 a mediados y finales, la demanda de productos orientales sigue siendo la fuerza impulsora detrás del imperialismo europeo, y (con la importante excepción de la regla británica East India Company en la India) la participación europea en Asia se mantuvo confinada a estaciones comerciales y puestos estratégicos necesarios para proteger el comercio. La industrialización, sin embargo, aumentó dramáticamente la demanda europea de materias primas de Asia, y la depresión severa largo de la década de 1870 provocó una lucha por nuevos mercados para los productos industriales europeos y los servicios financieros en África, las Américas, Europa Oriental, y especialmente en Asia. Esta lucha coincidió con una nueva era en la expansión global colonial conocida como "Nuevo Imperialismo", que vio un cambio en el enfoque de la regla de comercio e indirectos para el control formal colonial de vastos territorios en el extranjero descartado como una extensión política de sus países de origen. Entre las décadas de 1870 y el comienzo de la Primera Guerra Mundial en 1914, el Reino Unido, Francia y los Países Bajos - los poderes establecidos colonial en Asia - ha añadido a sus imperios grandes extensiones de territorio en el Medio Oriente, el subcontinente indio, y el Sudeste Asia. En el mismo período, el Imperio de Japón, tras la Restauración Meiji, el Imperio Alemán, tras el fin de la guerra franco-prusiana en 1871, la Rusia zarista, y los Estados Unidos, después de la Guerra Española-Americana en 1898, se convirtió rápidamente como nuevos poderes imperiales en el este de Asia y en el área del Océano Pacífico.

En Asia, la Primera Guerra Mundial y la Segunda Guerra Mundial se juega en las luchas entre varias potencias imperiales principales-los conflictos relacionados con las potencias europeas, junto con Rusia y las potencias emergentes de América y Japón. Ninguna de las potencias coloniales, sin embargo, poseía los recursos necesarios para soportar las tensiones de las dos guerras mundiales y mantener su dominio directo en Asia. A pesar de los movimientos nacionalistas en todo el mundo colonial llevó a la independencia política de casi todos los de las colonias que quedan en el Asia, la descolonización fue interceptado por la Guerra Fría, y el Sudeste Asiático, Asia del Sur, el Medio Oriente, y Asia oriental se mantuvo incrustado en un mundo económico , el sistema financiero y militar en la que las grandes potencias compiten para extender su influencia. Sin embargo, el rápido después de la guerra el desarrollo económico de los Tigres de Asia Oriental y la República Popular de China, junto con el colapso de la Unión Soviética, han aflojado la influencia de Europa y América del Norte en Asia, lo que genera la especulación actual sobre la posible reaparición de China y Japón como potencias regionales.