- Batalla de Algeciras (1801)
-
Batalla de Algeciras (1801)
Batalla de Algeciras Parte de Guerras Revolucionarias Francesas Fecha 7 de julio, 1801 Lugar Bahía de Algeciras (España) Resultado Victoria hispano-francesa Beligerantes Francia
EspañaReino Unido Comandantes Contraalmirante Linois
Comandante General Jácome
Capitán de Navío Juan LodaresContraalmirante Saumarez Fuerzas en combate 3 navíos
1 fragata
7 lanchas cañoneras
35 cañones en tierra repartidos en tres Fuertes6 navíos Bajas 306 muertos
280 heridos
5 lanchas cañoneras121 muertos
240 heridos
1 navíoEl 13 de junio de 1801 una división francesa al mando del contraalmirante Linois y que comprendía los buques de 80 cañones Formidable e Indomptable, y el de 74 cañones Desaix y la fragata de 40 cañones Muiron, dejan Tolón con el fin de reunirse en Cádiz y de hacerse cargo allí de 6 buques españoles comandados por el almirante Moreno, y que recientemente habían sido cedidos a Francia (por este procedimiento también fueron transferidos los navíos de 74 cañones Infante don Pelayo, San Genaro, Atlante, Intrépido, Conquistador y San Antonio). Ya, en el mismo lugar, el navío San Antonio de 74 cañones, afrancesado en Saint-Antoine, recibe su capitán y tripulación francesa y se encuentra dispuesto a hacerse a la mar.
La flota de Linois se encontró con vientos adversos, lo que motivó que llegara a la altura de Gibraltar el 1 de julio. Sabedor de que el puerto de Cádiz está bloqueado por una escuadra británica superior en número, Linois se dirige hacia el pequeño puerto de Algeciras, en el sudoeste de la Bahía de Algeciras, donde llegará el 4 de julio, ordenando fondear a la flotilla. La posición es fuerte pero la elección es desgraciada. La costa frente a Algeciras está protegida por tres fuertes y dos posiciones de cañones con sendas baterías (los Fuertes de Isla Verde, con 7 cañones de 24 libras, de Santiago, con 5 cañones de 18 libras, y de San García con 5 cañones de a 24 y uno de a 18, y las baterías de Torre del Almirante y San Antonio), además de contar con 7 lanchas cañoneras españolas al mando del Capitán de navío Juan Lodares (aunque otras fuentes —como William James— elevan este número hasta 14 cañoneras), el lugar elegido se encuentra apenas a 10 km del peñón de Gibraltar y los británicos tienen oportunidad de observar la llegada de las embarcaciones francesas. La noche siguiente, la balandra británica Calpe envía un bote para informar al contraalmirante Saumarez, que dirige el bloqueo de Cádiz.
La escuadra de Saumarez estaba constituida por el buque de 80 cañones Caesar, los 74 cañones Pompée (antiguo navío francés capturado intacto junto a varios más intactos en Tolón en 1793 cuando la alianza hispano-británica ocupó la ciudad), además del Venerable, Audacious, Spencer y Hannibal, bajo mando directo del Vicealmirante. Navegando en las cercanías se encontraban el Superb de 74 cañones y la fragata Thames de 32 cañones. Estas dos últimas embarcaciones recibirán demasiado tarde la orden de unirse en los primeros combates y no intervendrán.
El 7 de julio, a las 7h, el primer buque británico penetra en la bahía bajo la orden de Caza General que figuraba en las banderas de señales de la embarcación, desde la que Saumarez dirigiría la batalla. Linois, consciente de su inferioridad numérica, escoge el combate al ancla; este tipo de combate era elegido cuando los barcos se encontraban a muy poca distancia de la playa, ya que por un ligero golpe de viento las embarcaciones podían dirigirse a la misma quedando varadas, pero esta elección, contrariamente a Aboukir, le fue propicia: la bahía de Algeciras, abierta y poco profunda, está salpicada por escollos y bancos de arena, y los vientos son caprichosos. Linois, anclando sus embarcaciones más cerca de la costa para procurarse la cobertura de las baterías de costa y a algunos metros unos de otros, evitó exponerse a los tácticos que condujeron a la catástrofe de Aboukir.
Los franceses tenían al Formidable como cabeza de la pequeña línea, seguido del Desaix y detrás de este al Indomptable, anclados a la misma distancia más o menos, mientras que la fragata Muiron se encontraba dentro del espacio protegido por los navíos y las baterías. Las cañoneras españolas se repartían ancladas entre las dos baterías de costa.
Los ingleses habían despreciado las posibilidades de la artillería de costa española, pero de éstas le llueven las primeras andanadas a las 7h 50 provenientes del cercano Fuerte de San García. Las piezas artilleras españolas no son numerosas, pero poseen un mayor alcance, batiendo sucesivamente a los buques que iban apareciendo por Punta Carnero, a poniente de la bahía. La fragata francesa Muiron abre fuego 40 minutos más tarde sobre el Pompée. Otras embarcaciones francesas la seguirían. El Pompée logra finalmente acercarse al Formidable, comenzando a disparar sobre el navío francés, pero éste rápidamente deja hilar sus anclas y todavía se acerca más a la orilla. Después de una lenta aproximación, los buques británicos se encuentran a una distancia media de los franceses: el Audacious contra el Indomable, el Venerable sobre el costado de babor del Formidable. Los buques se cañonean duramente a quemarropa... A las 9h 15, el Caesar, entrando por fin en acción, se enfrenta al Desaix, pero es molestado en su maniobra por el Hannibal, anclado sobre su estribor. El último buque británico, el Spencer, se arrastra entre los arrecifes sin conseguir disparar a las embarcaciones francesas, más preocupado en intentar evitar el implacable fuego que recibe desde las baterías de Algeciras y las 7 cañoneras que salen al encuentro del combate desde el puerto y de las que al final de la batalla sólo se mantendrían a flote 2. Estas cañoneras eran lanchas de navío con un único mástil y remos, dotadas de un cañón de gran calibre en su proa (generalmente de a 24 libras), y su tripulación se componía de una treintena de marineros e infantes de marina.
A las 9h 30, el Pompée, víctima de las corrientes y los variables vientos de la bahía, vira sobre sus anclas y presenta su proa a los cañones del Formidable que no deja escapar la ocasión por ese costado. Las balas revientan la proa del buque y siegan cañones y sirvientes sobre toda la eslora de los puentes, para desesperación de Saumarez, que ve también cómo las baterías de costa se ensañan con el Pompée. Éste le ordena entonces al Hannibal cambiar su posición y situarse sobre la proa del Formidable para aliviar la presión sufrida por el Pompée. Sin embargo, no es antes de las 11 horas cuando el Hannibal se pone en movimiento para ganar su nuevo puesto avanzado, después de tener que virar viento en contra. Pero antes de estar emplazado, queda varado en un banco de arena y se inmoviliza. Todas las tentativas hechas por las chalupas y las embarcaciones de otros buques británicos para sacarlo de su indefensa posición son infructuosas, mientras que los franceses y las baterías del Fuerte de Santiago concentran sus tiros en este blanco inmóvil. Sacando provecho de una brisa favorable, Linois hace derivar sus embarcaciones hacia la orilla, y estos también se inmovilizan, pero muy lentamente.
Lord Cochrane, el célebre caballero inglés que había capturado con su bergantín Speedy al jabeque español Gamo y ascendido por ello, se encontraba a bordo del navío francés Desaix, en calidad de prisionero, ya que su buque fue capturado por Linois el mes anterior, y asistía a la batalla sin creer lo que estaba viendo: la poderosa armada británica estaba recibiendo un buen varapalo. Cochrane fue obligado a bajar a la enfermería para no exponerlo a ser herido, pese a la contrariedad de este.
Saumarez ordena a sus cuatro buques que corten sus cables de ancla y se acerquen a los buques franceses. Al acercarse el combate a la costa, Saumarez decide entonces lanzar un ataque a través de las embarcaciones de sus buques contra las molestas baterías de costa. Pero estos y los franceses los rechazan y causan gruesos daños a los británicos. De todas maneras, la orden de Saumarez fue ejecutada sólo por el Caesar y el Audacious, mientras que los dos restantes se quedan a distancia. El Pompée, desamparado, sale de la bahía remolcado por sus embarcaciones menores, librándose de ser capturado.
A las 13 horas, se levanta un viento desde tierra y Saumarez decide por fin abandonar la partida, y los buques británicos dejan la bahía, abandonando al Hannibal a su suerte con muchísimos muertos y heridos a bordo. Éste, desarbolado, arría su pabellón una hora más tarde. La escuadra británica regresa a Gibraltar a vendar sus heridas, y llegan al mismo tiempo que el navío Superb y la fragata Thames. Saumarez los envía de vuelta a Cádiz para asegurar el bloqueo.
La victoria hispano-francesa es absoluta, llegando poco después de la batalla al almirante Moreno con toda la flota española.
A partir de ese momento un desgraciado accidente se produce en el estrecho de Gibraltar. Cuando la flota combinada parte de Algeciras en dirección a Cádiz, el 11 de julio, el navío inglés Superb ataca en la oscuridad de la noche, lanzando andanadas por sus ambos costados. Los navíos españoles Real Carlos y San Hermenegildo, entre los cuales había cruzado el navío inglés, tomando al otro como enemigo, se bombardean sin piedad, en una lucha fratricida. Cuando amanece se dan cuenta del desastre: los dos buques españoles, los más grandes jamás construidos, junto con el Santísima Trinidad, apresado en la Batalla de Trafalgar, se hunden, pereciendo en el desastre dos mil marineros españoles.
Buques
Escuadra británica:
- Caesar, 80 cañones (Almirante Saumarez, Capitán Jahleel Brenton)
- Pompee, 74 cañones (Capitán Charles Stirling)
- Spencer, 74 cañones (Capitán Henry d'Esterre Darby)
- Venerable, 74 cañones (Capitán Samuel Hood)
- Hannibal, 74 cañones (Capitán Solomon Ferris)
- Audacious, 74 cañones (Capitán Shuldham Peard)
Escuadra francesa:
- Formidable, 80 cañones (Almirante Linois, Capitán Laindet Lalonde)
- Indomptable, 80 cañones (Capitán Moncousu)
- Desaix, 74 cañones (Capitán Christi-Pailliere)
- Muiron, 40 cañones (Capitán Martinencq)
Enlaces externos
- Wikimedia Commons alberga contenido multimedia sobre Batalla de Algeciras (1801).Commons
- Artículo sobre la Batalla de Algeciras, por Rafael Vidal Delgado, en TodoaBabor.es, con cuyo permiso se ha escrito parte de este artículo (véase página de discusión)
Bibliografía
- Vidal Delgado, Rafael (2000). «El Fuerte de Santiago y la batalla de Algeciras, Regimiento de Artillería de Costa Nº 5»
Categorías: Historia moderna de España | Batallas de las Guerras Napoleónicas | Batallas de España | Batallas de Francia | Batallas del Reino Unido | Armada de España | Historia de Algeciras | Batallas del siglo XIX | España en 1801
Wikimedia foundation. 2010.