- Bicha de Balazote
-
Bicha de Balazote
La Bicha de Balazote es una escultura ibérica encontrada en el término municipal de Balazote, en la provincia de Albacete. Quienes primero la estudiaron fue un grupo de arqueólogos franceses que la identificaron como una especie de cierva; de ahí que "biche" fuera su primera denominación, castellanizándose posteriormente a "bicha". Ha sido datada en el siglo VI a. C. Se encuentra depositada en el Museo Arqueológico Nacional de España (situado en Madrid) desde 1910.
Existen pocos datos sobre su hallazgo. Se sabe que fue encontrada en el paraje de los Majuelos, a escasa distancia del núcleo urbano. Recientes excavaciones en la vega de Balazote descubrieron un túmulo ibérico que permite situar tan singular pieza en el contexto de una necrópolis tumular a la que probablemente perteneció. Cerca del lugar también se rescataron importantes mosaicos de una villa romana.
Contenido
Descripción
Realizada sobre dos bloques de piedra caliza hacia la segunda mitad del siglo VI a. C. sus dimensiones son de 93 cm de longitud y 73 cm de altura máxima, es una de las frecuentes síntesis entre animal y hombre, en este caso de cuerpo completo, y representa un toro en reposo que demuestra un buen conocimiento de las características del animal, con las patas delanteras recogidas bajo el pecho y las traseras dobladas hacia el vientre. Algunos detalles formales resaltan las pezuñas o la prominencia del hueso de la cadera. La cola se curva sobre el muslo izquierdo y termina en un mechón puntiagudo de pelo.
Tiene una cabeza de hombre barbudo, vuelta al espectador y ligeramente alzada, con unos pequeños cuernos y orejas también de toro, con las particularidades de las esculturas griegas arcaicas: hierática, con barba y cabellera a base de surcos rectos y geometrizada, de raíces hititas.[1]
No está totalmente tallada, el lado derecho de la pieza no lo está, por lo que parece ser un sillar de esquina y estar pensada para adherirla a algún lugar, de manera similar a los leones de Pozo Moro. Posiblemente fuera de carácter funerario y formase parte de la decoración de un templo. Puede cumplir una función de defensa o ser una representación de la fertilidad: los griegos usaban las estatuas de toros androcéfalos como representación de los ríos, como símbolo de la fecundidad del río fertilizando los campos, y se asociaba al toro, símbolo de fecundidad. En este sentido, la Bicha de Balazote sería un símbolo de la vida que se deseaba al difunto.
Como el resto de la escultura ibérica, es anterior a la llegada de los Bárquidas en el 238 a. C. Según A. García y Bellido, representa a Aqueloo, basándose para ello en su relación con las monedas sicilianas que le representan.
Dentro del contexto arqueológico donde se encontró han aparecido otras figuras escultóricas como la Esfinge de Haches.
Notas
- ↑ «Esta escultura es hija de helenos, y, si se quiere, también nieta de fenicios y bisnieta de mesopotámicos». A. García y Bellido, 1931.
Bibliografía
- Almagro Gorbea (1982). Pozo Moro y el influjo fenicio en el periodo orientalizante de la Peninsula Ibérica. Revista di Studi Fenici.
- Benoit, F. (1962). La Biche d’Albacete. Cernunnos et le substrat indigene. Seminario de historia y arqueología de Albacete.
- Blazquez, J.M. (1974). Figuras animalísticas turdetanas. C.S.I.C..
Enlaces externos
Categorías: Museo Arqueológico Nacional (España) | Prehistoria de España | Arqueología de España | Provincia de Albacete | Arte ibérico | Escultura en Madrid
Wikimedia foundation. 2010.