- Occidente
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Occidente (del latín occĭdens, "lugar de la caída del Sol")[1] significa oeste, y en general se refiere a un conjunto de culturas. Existen distintas acepciones sobre el significado del Mundo Occidenta l:
- En su acepción más restrictiva, abarca a la Europa Occidental surgida durante la Edad Media.
- En su acepción amplia, incluye a toda la cultura grecorromana, e incluso a las primeras culturas de Mesopotamia, como los sumerios y el Antiguo Egipto
El concepto de Occidente suele contraponerse al concepto de las culturas de Oriente (este, en latín).
Contenido
Evolución del concepto de Civilización Occidental
Hasta el siglo XVII, los europeos consideraban la Historia Universal en términos eurocéntricos. Cuando Cristóbal Celarius dividió la Historia, inventó tres eras (Antigüedad, Edad Media y Tiempos Modernos), separadas por hitos propios de la historia europea. Sin embargo, el estudio progresivo de las historias de otras culturas hizo difícil encajar este modelo en esas respectivas historias, por lo que esta clasificación de las épocas históricas sobrevivió sólo con fines didácticos.
En el Siglo XVIII, Gobineau distinguía siete civilizaciones en la Historia, incluyendo a la Civilización Occidental. El predominio de Occidente sobre el resto del mundo en el Siglo XIX, merced a la diplomacia de las cañoneras, hizo olvidar temporalmente esta concepción atomística de la Historia, hasta que la crisis de confianza experimentada por el mundo occidental después de la Primera Guerra Mundial trajo de nuevo el problema a colación. Para esa época estaba claro que Estados Unidos era una potencia de primer orden a la par que las potencias europeas, por lo que la noción de Occidente (para referirse a la Europa occidental) era insuficiente.
En este ambiente fue publicado el libro La decadencia de Occidente, de Oswald Spengler, en el que éste concibe las civilizaciones como entes cerrados que nacen, crecen, luchan por la supervivencia y mueren, distinguiendo claramente al mundo occidental del mundo helénico. Estas ideas serán adoptadas y perfeccionadas por Arnold J. Toynbee en su magno tratado Estudio de la Historia, en donde conceptualiza a Occidente como una civilización cristiana con su época de esplendor en la Edad Media. En la década de 1990, la concepción toynbeana de un Occidente más o menos cerrado y unido por una tradición cultural cristiana y europea, es reasumida por Samuel Huntington, a la luz del choque de Estados Unidos con el resto del mundo, y adquirirá una nueva popularidad después de los ataques terroristas provocados por radicales de origen musulmán (la tesis del "choque de civilizaciones").
Países occidentales
El término "Civilización Occidental" se refiere a una variedad de conceptos, por lo cual existen distintas acepciones de que países, naciones o zonas geográficas pertenecen a éstas.
En la Antigua Grecia, el mundo estaba dividido entre los pueblos griegos y los bárbaros. Esta división se transformó en una definición geográfica según los territorios ubicados en la zona occidental (Grecia, las islas del mar Egeo y la Magna Grecia), en contraste al oriente de Egipto, Anatolia y Persia, por ejemplo. Las Guerras Médicas, por lo tanto, son consideradas como uno de los primeros hechos bélicos entre Occidente y el Oriente.
La cuenca del Mediterráneo, unificada por el Imperio romano, mantuvoeste-oeste, entre los pueblos occidentales de predominancia latinas, contrapuesto al Mediterráneo oriental, donde predominaba la cultura griega. Diocleciano dividió el imperio en dos regiones en el 292. La parte oriental evolucionó posteriormente al Imperio bizantino, mientras el occidente se derrumbó por las invasiones bárbaras dando origen a diversos reinos bajo el poder del papado, principalmente.
La división que se produjo en el Cristianismo, mantuvo la división del Oriente con Occidente durante la Edad Media. Así, nació un sentimiento de cristiandad, que se afianzó durante las Cruzadas contra los árabes y turcos. Sin embargo, los bizantinos también fueron considerados como una cultura distinta por parte de los occidentales, a pesar de su origen común, debido a su ruptura con el Patriarcado Romano tras el Cisma de Oriente.
El descubrimiento y conquista de las Américas o "Indias Occidentales", como se las conocía durante entre los siglos XV y XIX, integrándolas en la Cristiandad y en la civilización de los conquistadores y sobre todo los colonos europeos (sobrepuesta a las civilizaciones autóctonas), supuso su incorporación a los países occidentales, situación que a diferencia de Asia y África, no solo no cambió con la Independencia, sino que se agudizó, transformándose durante el siglo XIX las antiguas colonias en Estados-nación modernos, algunos de los cuales llegaron a ser grandes potencias que rivalizaban con las europeas, especialmente los vastos territorios de los Estados Unidos de América del Norte, México, Paraguay, Argentina y Brasil.
Durante la llamada Guerra Fría surgió un nuevo concepto que representaba a la metafórica división del mundo en tres mundos: el Primer Mundo, compuesto por los estados miembro de la OTAN y los aliados de Estados Unidos; el Segundo Mundo, compuesto por los estados miembro del Pacto de Varsovia y los aliados de la Unión Soviética, como Cuba y Mongolia, más China y los estados socialistas asiáticos o sea Viet Nam, la RPDC y otros más inestables como Kampuchea y Laos; y el Tercer Mundo, que hace referencia a los estados que no estaban alineados con ninguno de los dos bloques.
La partición del mundo de acuerdo con su alineación política, sin embargo, produjo muchas contradicciones. Así, Suiza, Suecia e Irlanda, considerados como parte del Primer Mundo, se mantuvieron neutrales durante todo el período. Finlandia, que limitaba al este con la Unión Soviética y por tanto pertenecía a su esfera de influencia, se mantuvo neutral. Nunca fue un Estado socialista ni perteneció al Pacto de Varsovia o al CAME. Austria también mantuvo una política de neutralidad a partir de 1955, encontrándose al oeste de la Cortina de Hierro y por tanto en la esfera de influencia estadounidense. Turquía, miembro de la OTAN, tampoco se podía establecer que era un país del Primer Mundo o de la Civilización Occidental. Así, se definió posteriormente al Mundo Occidental como al Primer Mundo incluyendo las excepciones de los países de Europa Occidental y excluyendo a Turquía.
Tras el fin de la Guerra Fría, el uso del término Segundo Mundo cayó en desuso, mientras que los dos otros mundos evolucionaron a otros conceptos. El Primer Mundo continuó designando al mismo grupo de estados, pero según criterios económicos antes que políticos. En cambio, el Tercer Mundo se convirtió en sinónimo de países pobres y en vías de desarrollo.
En general, se consideran en la actualidad a la Cultura Occidental, o también llamada Euroatlántica, como aquella influenciada por las civilizaciones grecorromanas, el Cristianismo, el Renacimiento y la Ilustración, entre otros eventos históricos. Esto correspondería a las siguientes zonas geográficas:
- Unión Europea y Europa occidental no integrada
- Sudáfrica
- Australia y Nueva Zelanda
- América (Anglosajona y Latina)
- Rusia
- Israel
Algunos historiadores consideran que en América Latina, las influencias de los pueblos indígenas la convertirían en otro tipo de mundo, diferente del Occidente. Otros, sin embargo, la incluyen debido al desarrollo de la colonización e inmigración de europeos a lo largo de los últimos siglos. Diferencias de opinión similares se experimentan también con respecto a ciertos países de África (como el caso sudafricano), en Europa Oriental y Rusia.
Arte
Los trabajos que tradicionalmente se hacen sobre Historia del Arte normalmente tienen como objeto de estudio la evolución de la historia del arte occidental, fruto del eurocentrismo. Dichos trabajos suelen excluir incluso algunos periodos artísticos como bizantino o el árabe clásico aun cuando parte de estos se desarrolló en territorio europeo. Este estudio, no obstante, al considerar la cultura occidental como elemento fundamental de la vida contemporánea, se hace necesario a fin de comprender el alcance del arte alrededor del mundo, recibiendo influencias y siendo influenciado por otros movimientos.
Los estudios sobre historia del arte, por otro lado, suelen centrarse en la pintura, la arquitectura y la escultura, dejando de lado otras ramas como la literatura o la música, las cuales son estudiadas en trabajos más especializados.
Véase también
- Oriente
- Occidentalismo
- Civilizaciones orientales
Referencias
Bibliografía
- Duchesne, Ricardo: «The Uniqueness of Western Civilization», Studies in Critical Social Sciences, vol. 28, Leiden y Boston: Brill, 2011, ISBN 978-90-04-19248-5
Notas
- ↑ University of Notre Dame, Latin Word Look-up
Wikimedia foundation. 2010.