- Oración pasiva
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Una oración pasiva es una en la que el verbo tiene una forma especial (marca de voz pasiva) y en la cual se interpreta que el sujeto sintáctico tiene la misma interpretación que el paciente de una oración similar pero con el verbo en forma activa. La oposición entre voz activa y voz pasiva sólo es posible en las lenguas con alineamiento morfosintáctico de tipo nominativo-acusativo (en las lenguas ergativas la voz activa se opone a una voz antipasiva).
En muchas lenguas, entre ellas el español y la mayoría de lenguas europeas, las oraciones o construcciones pasivas permiten expresar el agente mediante el llamado "complemento" agente (en el análisis generativista no es un verdadero complemento del verbo sino un adjunto sintáctico que opcionalmente puede aparecer u omitirse).
La voz pasiva en español
Se ha discutido mucho si existe voz pasiva en español, ya que este idioma no tiene formas morfológicas específicas para ella. Semánticamente puede ser expresada por una equivalente voz atributiva biactancial. Tradicionalmente se considera que en español la voz pasiva se forma de dos maneras, las cuales son:
- 1. Pasiva analítica o pasiva perifrástica, con el verbo ser o estar funcionando como auxiliar en el tiempo de la activa, más el participio del verbo que se conjuga. La aparición del complemento agente no es estrictamente necesaria, aunque exista siempre en estructura profunda, y si aparece consiste en un sintagma preposicional con la preposición por, y menos frecuentemente de:
- Las peras fueron comidas por Pedro (pasiva analítica) / Pedro comió las peras (activa).
- La pasiva analítica se subdivide a su vez en dos tipos de pasiva la pasiva analítica de proceso y la pasiva analítica de estado o resultado.
- La pasiva analítica de proceso. Utiliza el verbo auxiliar ser: Las camas aún no han sido hechas.
- La pasiva analítica de estado o resultado. Usa el verbo auxiliar estar: Las camas ya están hechas.
- 2. Pasiva sintética o pasiva refleja, con el morfema de pasiva se más un verbo en tercera persona; el complemento agente no suele aparecer de forma explícita:
- Se vende piso (pasiva sintética) = El piso es vendido por alguien (pasiva analítica).
- En castellano no existe un morfema específico para indicar la pasiva; lo más parecido que existe es este uso concreto del morfema se.
Existen, por otra parte, otras posibilidades formales de pasiva por medio de perífrasis verbales:
- Estar + participio en los tiempos imperfectivos de acciones perfectivas: está o estaba prohibido, acabado, resuelto, y en los tiempos imperfectos de muchos verbos reflexivos con sentido incoativo: está o estaba sentado, dormido, avergonzado, enfadado ...
- Ser + participio en los tiempos perfectos de acciones perfectivas o imperfectivas: fue abierta, ha sido cerrada, y en los tiempos imperfectos de acciones imperfectivas: es querido, era estimado, será solicitado.
- Hallarse + participio
- Quedar + participio
- Tener + participio, Llevar + participio y Traer + participio. Estas construcciones son límites, pues en muchos casos sólo el valor semántico y el contexto pueden determinar su carácter pasivo. Debemos a Rafael Lapesa la importante observación de que en algunos casos, si hay complemento agente en estas construcciones, no hay perífrasis, por ejemplo: «Tengo dos cuadros pintados por Juan». Hay perífrasis activa con objeto directo, «tengo corregidos veinte ejercicios»; pero entonces no hay complemento agente. Por otra parte cabe: «tengo corregidos veinte ejercicios por mí y diez por mi ayudante».
- Dejarse + infinitivo. Es una construcción no totalmente pasiva, pues implica cierta participación del sujeto de la acción: «Se dejó vencer por el enemigo». Este tipo de construcción sería más acertado llamarla «medio-pasiva».
El actante o complemento agente puede estar o no presente en estas construcciones pasivas. Este elemento que la tradición llama ablativo agente, al modo latino, tiene una estructura bimembre: relator y término. Los relatores reconocidos por la gramática tradicional son «por» y «de», pero se han encontrado otros: «con» y «en».
En castellano antiguo es general el empleo de la preposición «de» con el complemento agente. Ejemplos:
- Del rey so ayrado. (Mio Cid)
- De Dios seré reptado. (Gonzalo de Berceo)
- El que a muchos teme, de muchos es temido. (Diego Saavedra Fajardo)
Sin embargo, hoy se prefiere la preposición «por».
Categoría:- Tipos de oración
- 1. Pasiva analítica o pasiva perifrástica, con el verbo ser o estar funcionando como auxiliar en el tiempo de la activa, más el participio del verbo que se conjuga. La aparición del complemento agente no es estrictamente necesaria, aunque exista siempre en estructura profunda, y si aparece consiste en un sintagma preposicional con la preposición por, y menos frecuentemente de:
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