La diadema con brillantes conocida como la diadema de las lises o la de Flores de Lis, es una de las joyas más importantes que pueden lucir las reinas españolas desde la reina Victoria Eugenia de Battenberg, ya que permanece en el patrimonio de la Monarquía Española. Fue regalada a esta reina por su esposo el rey Alfonso XIII con motivo de su boda en 1906, luciéndola el día del enlace. Encargada a la Casa Ansorena, fue ampliada en 1910 añadiéndole nuevos elementos y unas charnelas que permitían agrandar su base.^{[1] [2] [3] [4]}

La reina Victoria Eugenia la lució en numerosas ocasiones hasta 1967, en que, con motivo de la cena de gala previa a la boda de su nieta la Infanta Pilar, la lució por última vez, pasando a su nuera María de las Mercedes de Borbón y Orleans, ya que forma parte de las denominadas "joyas de pasar". Posteriormente doña María se la entregaría a su nuera la Reina Sofía. La Reina Sofía la utiliza en ocasiones excepcionales, sobre todo en visitas de Estado de monarcas extranjeros. Al contrario de lo que ocurre con el resto de diademas que posee la reina, no se la ha prestado en ninguna ocasión a sus hijas, Cristina y Elena, o a su nuera, pues aunque se barajó esa opción para la boda de Letizia al final se optó por la diadema de Victoria Luisa de Prusia.^{[5] [4]}

Referencias