- Eugenio Tamayo
-
Eugenio Tamayo
Eugenio Tamayo Muñiz (Gijón, 1891- San Sebastián, 1 de octubre de 1972) fue un pintor asturiano.
Biografía
Excelente paisajista, que vinculó a Oviedo casi toda su existencia. Trasladada temporalmente su familia a Cataluña, inicia en Tarrasa la carrera de ingeniero industrial, pero la abandona para dedicarse de lleno a la pintura, y en 1910 y 1912 expone en el Bazar Masaveu de Oviedo sus primeros cuadros de ambiente local.
Con una beca de la Diputación de Asturias pasa a Madrid en 1915, y en la Escuela Superior de Bellas Artes es discípulo de Muñoz Degraín, de Cecilio Plá y de Manuel Marín. Este último le proporciona sus primeros trabajos como pintor escenógrafo del Teatro Real y de la compañía de Guerrero-Mendoza.
En 1916, presenta en Oviedo, con motivo de la Exposición Regional, varios cuadros que son objeto de una crítica muy favorable: Pinar, Segoviano, Paisaje del Aramo, Castañedo, Nota de otoño (Asturias), Campesina segoviana, Chamartín y Guadarrama. En 1920 vuelve a presentar obras suyas, esta vez en unión del ovetense Crisanto Santamarina. Expone en Barcelona, Madrid y Bilbao, en la primavera de 1945 acude nuevamente a Oviedo con la que quizá haya sido su más importante exposición. Exhibe en ella treinta y dos lienzos entre los que se encuentran abundantes paisajes asturianos tales como Montañas de Preandi, La vega de Pervis, El Sella en la Vega, Desembocadura de la ría, Soportales de Carbayedo (Avilés), La Atalaya (Cudillero), Calle de San José (Cudillero), Pinar del Espíritu Santo (Pravia) y Puente de Peñaflor.
Aunque colaboró también en otras exposiciones montadas en homenaje a diferentes artistas, como la que tuvo lugar en 1954 en el Museo Arqueológico Provincial en honor de Evaristo Valle, Tamayo es francamente reacio a toda exhibición y, desde luego, jamás acude a las Exposiciones Nacionales, ya que en los tiempos en que frecuentaba el estudio de su entrañable maestro Muñoz Degraín, había podido contemplar lastimosas escenas y descaradas peticiones que al maestro, miembro del jurado, llegaban a formular algunos concursantes.
Era Tamayo hombre bueno, serio y sincero. Su rostro se animaba con la expresión más afable o con el gesto más adusto según el juicio que le merecían las personas o las cosas de que trataba. Conversador ameno, fue miembro activo de peñas de café como la formada en los años 1920 en el café Español, en Oviedo, con Uría, Martínez Torner, Cepeda y otros, y la que por los 1960 constituían los "Clarisos" en "Casa Noriega".
Frecuentando cada vez más sus idas a San Sebastián, donde vivía su única hija, acabó por establecerse allí definitivamente. Era miembro de número del RIDEA y también pertenecía a la Real Academia de San Fernando.
En su estudio de Oviedo había impartido enseñanza a muchos futuros pintores y arquitectos, y como profesor de Instituto, ya desde 1932, dejó también un gran número de alumnos que guardaron de él y de sus lecciones los mejores recuerdos.
Dominando todas las técnicas, especialmente el óleo y el temple, Tamayo comunicó a sus obras, a las que tan frecuentemente llevó los paisajes asturianos, un dibujo sobrio y enérgico, y un estilo realista e impresionista de sutiles matices y atractiva calidad. Esta obra, aunque abundante en Asturias, se encuentra en gran cantidad por Inglaterra y Francia, donde era especialmente apreciada.
En abril de 1980 celebró en Oviedo la Caja de Ahorros una Exposición en recuerdo y homenaje de Tamayo. El Museo Provincial de Bellas Artes exhibe tres obras suyas: Marina, Cementerio y Castillete de mina, cedidas en depósito las tres por el yerno del artista.
Categorías: Pintores de Asturias | Gijoneses | Nacidos en 1891 | Fallecidos en 1972
Wikimedia foundation. 2010.