Poderosa estirpe de un conde alavés, enemiga de Fernán González y sus descendientes, al último de los cuales García Sánchez asesinaron en León. Los cronistas latinos del siglo XIII, Jiménez de Rada y Lucas de Túy, y un cantar juglaresco hoy perdido, el Romanz del Injant García, son las principales fuentes que nos hablan de esta familia alavesa. De ella conocemos muy pocos datos precisos. La mayor dificultad consiste en no poder trazar con detalle su cuadro genealógico, y ello es debido a la parca documentación conservada ya la frecuencia del nombre y apellido Vela en la onomástica leonesa y castellana de la alta Edad Media. Uniendo las escasas noticias historiográficas con las documentales resulta que los Vela eran oriundos de Álava, descendientes de un Vela Jiménez que en los años 882 y 883 había defendido los pasos de Raro y Cellórigo de los musulmanes. Su hijo, Momo Vela, ocupó Pancorvo y Haro venciendo a los musulmanes, se tituló conde de Álava en el año 915. En tiempos de Fernán González, era jefe de la familia el conde Vela Núñez. La política unificadora del castellano Fernán González en el año 940 condujo a la anexión del condado alavés ya la expulsión de los Vela, que buscaron refugio en la corte del califa cordobés Abderramán III. Desde entonces un profundo odio separó para siempre a las dos estirpes. En el año 960, dirigiendo la familia, al parecer, Fruela Vela, intervinieron a favor de Sancho I de León, aliado del califa y de Pamplona, en la guerra contra Ordoño IV de León y su suegro, Fernán González. Vencedor Sancho, los Vela se establecen en León, ocupan puestos importantes y enlazan con grandes familias, encabezando en todo momento el partido anticastellanista. La fortuna de los desterrados seguirá el mismo curso de las relaciones políticas entre León y Castilla. Al principio de su gobierno el conde de Castilla. Sancho García decidió acabar con el odio que separaba a las dos familias. Se reconcilió con Vela rñiguez y con sus hijos Rodrigo e rñigo y los repuso en sus antiguas posesiones; pero por motivos políticos se vio obligado a expulsarlos nuevamente (ca. 1013). La expulsión coincidió con las disputas territoriales que mantenían Sancho García y Alfonso V. Rodrigo e rñigo fueron bien acogidos en León y el monarca los heredó en las Somozas. El primero llegó a ocupar el importante cargo de alférez del rey. Pero a la muerte de Alfonso V de León, la tensión entre castellanos y leoneses se trocó en amistad, dirigida a contener el arrollador avance político de Santo III el Mayor de Navarra. Para ratificar la alianza se estipuló el casamiento del conde castellano García Sánchez, de 11 años, con la infanta Sancha, hermana del leonés Bermudo III de León. El infante se dirigió a León para celebrar los esponsales; y según cuenta la epopeya, había entrado en la ciudad para ver a la novia acompañado de reducida escolta, cuando llegaron de las Somozas Rodrigo e rñigo Vela con su gente. Tal vez por iniciativa propia, impulsados por el odio, tal vez instigados por una criminal intriga para impedir a todo tran,ce el matrimonio, iban dispuestos a matar al infante. Promovieron un altercádo con los que acompañaban a García, se entabló una lucha entre sus hombres y los castellanos y, aprovechando la confusión, buscaron al infante al que, indefenso, asesinaron con sus propias manos (13 mayo 1029), satisfaciendo con su sangre un rencor de familias casi secular. Los asesinos huyeron y ninguna mano se levantó para castigarlos. Sancho el Mayor de Navarra en nombre de su hijo Fernando, que luego habría de ser rey de León y Castilla, se hizo cargo del condado castellano. Los Vela siguieron en el reino de León interviniendo activamente en la política.