Ignacio León y Escosura (Oviedo, 15 de junio de 1834- Toledo, 28 de enero de 1901) Pintor asturiano.

Biografía

En Oviedo inició sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios con los profesores Bertrand y Arbiol, continuándolos luego en La Coruña. A los diecinueve años ingresó en la Escuela Superior de San Fernando, donde fue discípulo de Federico Madrazo y de Villamil, y empieza a familiarizarse con el arte de Velázquez y de Murillo, copiando sus cuadros en el Museo del Prado. En 1859 pasa a París y allí frecuentará los estudios de Meissonier, Lazerges y Gérome.

Aunque ya va situándose en París, en 1864 opta a la pensión de Roma con su cuadro La hija de Jairo, pero no logra su propósito, a pesar de que la obra va a merecer ser adquirida por el Estado, y a pesar de que, ya dos años antes, y en el mismo 1864, había obtenido sendas menciones honoríficas especiales al concurrir a la Exposición Nacional con tres y seis obras, respectívamente. En la de 1867 presenta tras cuadrod y, uno de ellos, La narración de las campañas, merece una Medalla de segunda clase. Acude, de nuevo, en 1881, esta vez con seis obras, y le es concedida la Encomienda de la Orden de Carlos III. En 1892, en que la Exposición tiene carácter Internacional, es condecorado de nuevo por su lienzo Galería de cuadros y estudio del pintor en París, cuadro éste en el que León y Escosura, al igual que en bastantes otras de sus obras, hace una verdadera exhibición de muchas valiosas piezas que, como apasionado anticuario y negociante, fue reuniendo en porcelanas, joyas, telas, armas, cuadros o muebles. A través de León se canalizaron parece, y en cierto modo se salvaron de la incuria, muchas antigüedades españolas que en el S. XIX fueron a parar a colecciones de los barones Davillier o Rothchild.

Además de los premios ya citados, había alcanzado importantes distinciones en Exposiciones de Londres, París y Viena. Sus obras figuran también en museos de Filadelfia, Múnich, Nueva York, Glasgow y de otras muchas ciudades. En el Provincial de Bellas Artes de Oviedo puede verse el titulado Una fiesta en el campo. La incendiada iconoteca universitaria poseía un Autorretrato, y en la colección que en Oviedo llegó a reunir Anselmo González del Valle, había también un cuadro de León y Escosura, el conocido como la Partida de ajedrez.

Aunque escasos, dado que el artista residió poco tiempo en Oviedo, dejó algunos cuadros de temática asturiana, tales como La entrada de la carretera de Infiesto, Vistas de Covadonga y el ya mencionado Una fiesta en el campo. Si bien cultivó con acierto todos los géneros, fueron los de tema histórico los que le proporcionaron mayor fama: Felipe II en Hampton Court, Las caballerizas del rey Guillermo III de Inglaterra, Vuelta de las pirámides, María de Médicis en su dormitorio, Murillo en el convento de capuchinos, Felipe IV presentando a Rubens a Velázquez, La rue Rivoli dans la matinée du 23 may, etc. De la calidad de su pintura da idea el que dos de sus cuadros -sin que él se lo propusiera- llegaron a ser colgados en el Museo del Louvre como auténticos de Velázquez y de Murillo.

Su fama se fue borrando después de su muerte, «en parte por el cambio que experimentó el gusto por el arte, pero, sobre todo, porque León y Escosura, aunque de pequeña talla y largas melenas, lejos de poder ser considerado como un "descubrimiento", lejos de haber sido pobre e ignorado, gozó en vida de un enorme prestigio internacional y llegó a vivir casi en la opulencia» (J. Tolivar Faes, Nombres y cosas de las calles de Oviedo, Ayuntamiento de Oviedo, 1986)