Riosapero (o Rusaperu en la lengua autóctona cántabra) es un pequeño barrio cántabro que tiene la curiosidad de que sus tierras se reparten entre dos núcleos de población diferentes; Villanueva y Obrégón. Por ejemplo, ante un falllecimiento, el entierro se celebrará en Obregón o en Villanueva, dependiendo en que parte de Riosapero se resida.

Contexto geográfico

Apartado de las demás poblaciones del municipio forma su propio valle cayendo sus aguas a Parbayón, localidad del Valle de Piélagos.

Los pueblos del municipio, conocidos históricamente hasta el XIX como concejos, son Villanueva, Liaño, La Concha (capital) y Obregón. Solía parece que en alguna época formó propio concejo.

Situado a 90 metros de altitud posee una población de algo más de 150 habitantes.

Historia

Como toponímico, el apellido Ruisapero o Russsapero está documentado desde el siglo XVI en el vecino Valle de Piélagos. Pero no hay indicios de poblamiento en el lugar hasta mediados del siglo XVIII cuando en el Catastro del Marqués de la Ensenada (1752) cita en ese lugar un molino cuyas ruinas han sido lamentablemente expoliadas hace algunos años. Por lo demás, tanto las casas de Riosapero como su ermita no parecen remontarse más allá del siglo XIX.

Según se ha podido comprobar a través de documentos, la ermita de Santa Lucía ya existía en Riosapero por lo menos desde 1604. En la Real Chancillería de Valladolid se encuentra el documento que lo atestigua:

"Pleito de Toribio de la Sota, de Obregón (Cantabria) Sebastián de la Sota, de Obregón (Cantabria) Sobre Toribio de la Sota y consortes contra Sebastián de la Sota, su primo sobre la posesión de los bienes del vínculo de patronazgo que fundó Teresa Díaz de Ontañón para la fábrica y aniversarios perpetuos de la ermita de Santa Lucía, en el barrio de Ruisapero."

Consta únicamente de una hoja, seguramente escrita por ambos lados y seguramente sea de los escasos datos que encontremos sobre Riosapero. Como decíamos data de 1604. Con lo que podemos intuir que si existía una ermita, existía el apellido en Parbayón y además se dice "barrio de Riosapero", el lugar estaba poblado por lo menos desde principios del siglo XVII.

Bien podrían aquellas personas de nombre Toribio y Sebastían vivir en Riosapero (Obregón). Aunque el apellido Sota es de origen cántabro y quizás pueda tener varios orígenes, lo cierto es que en Riosapero existe un paraje con el nombre de "la Sota".

No es fácil, pero no es imposible averiguarlo. Rastreando la genealogía de aquellas personas en la Iglesia de Obregón y testificando que sus ancestros eran de Obregón por muy atrás, bien se podría llegar a esa conclusión.

En 1445, el rey de Castilla, Juan II, confirmó en sus derechos sobre los valles de las Asturias de Santillana a Íñigo López de Mendoza, a quien concedió el título de marqués de Santillana junto al condado de Manzanares.

La oposición a este señorío laico llevó al valle de Carriedo a iniciar un pleito en 1495 en la Real Chancillería de Valladolid; su ejemplo fue seguido medio siglo después (1544) por los valles de Alfoz de Lloredo, Cabezón, Cabuérniga, Camargo, Cayón, Penagos, Piélagos, Reocín y Villaescusa, en un proceso que se resolvió en sentencia y en fallo de revisión en 1581, con su reversión a la Corona.

En 1630, estos territorios pasaron a integrar la Provincia de los Nueve Valles, creada en 1630 por privilegio de Felipe IV y dotados de unas Ordenanzas Generales ratificadas por el mismo monarca en 1645 (fueron reformadas en 1760). Los representantes de esta entidad se reunían en Bárcena de la Puente y más tarde en Puente San Miguel de Reocín; la Junta de los Nueve Valles, integrada en el Corregimiento de las Cuatro Villas de la Costa de la Mar y Trasmiera, está considerada base de la futura Provincia de Cantabria articulada en 1778-1779, reinando Carlos III.

Fiestas

Sus patronos son San Miguel, el día 29 de septiembre, y Santa Lucía, el 13 de diciembre.

Enlaces externos

• Foro de Riosapero de Villaescusa