- Notioprogonia
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Rango temporal: Paleoceno - Oligoceno Clasificación científica Reino: Animalia División: Chordata Clase: Mammalia Infraclase: Placentalia Superorden: Meridiungulata † Orden: Notoungulata † Suborden: Notioprogonia †
Simpson, 1934Familias - Henricosborniidae †
- Notostylopidae †
Los notioprogonios (Notioprogonia) son un suborden extinto del orden, también extinto, de ungulados Notoungulata o ungulados sudamericanos. Eran animales herbívoros, quizá algunas especies eran omnívoras, de pequeño y mediano tamaño que vivieron en Sudamérica. Su nombre significa progenitor del sur, haciendo referencia a que se piensa que de ellos evolucionaron todos los meridiungulados.
Generalidades
Este suborden incluye a los notoungulados, y por extensión también a los meridiungulados, más primitivos y pudiera contener a los ancestros de todos los otros subórdenes. Cifelli (1993)[1] arguyó que el suborden Notioprogonia es parafilético porque incluiría a antepasados de los subórdenes restantes. Vivieron entre el Paleoceno y el Eoceno, desde hace 64 millones de años hasta hace 34 millones de años. Se piensa que todos los meridiungulados evolucionaron de animales semejantes a estos. Procedentes de animales con cinco dedos en las extremidades y cola que acostumbraban a vivir en rocas y con la capacidad de refugiarse en los árboles, la falta de predadores posibilitó que se diversificaran hasta ocupar los cursos de los ríos y las llanuras.
Incluyen dos familias, Henricosborniidae y Notostylopidae. Notostylopidae comprende cinco géneros del Eoceno.
La edad de los mamíferos del periodo Peligrense de Argentina, una de las primeras estudiadas en profundidad, representó una época en la que los ungulados sudamericanos comenzaron a distanciarse morfológicamente de sus ancestros norteamericanos, probablemente involucrados en un proceso evolutivo cladogenético. Este fenómeno evolutivo habría sido estimulado por variadas causas físicas y biológicas como el aislamiento biogeográfico, Sudamérica era una isla-continente como la actual Australia, una geografía distinta a la que habitaron sus ancestros, la poca presión competitiva de depredadores ya que los Carnivora no colonizaron América del Sur durante el Paleógeno, en tanto que la fauna local paleocena contemporánea: los marsupiales y los euterios, como los Xenarthra, eran de pequeña talla. También habrá que contar con la existencia de cualidades internas en esos primitivos ungulados que favorecieron el establecimiento de cambios morfo-anatómicos que dieron lugar al surgimiento de especies progresivamente más diferenciadas de sus ancestros.
Se originaron hace 64 millones de años en el Paleoceno, mostrando un gran parecido con sus coetáneos de África los hiracoideos, con los cuales probablemente estaban relacionados, y que llevó en numerosos descubrimientos americanos a considerar las especies encontradas como hiracoideos y asignarles nombres ad hoc. Son los más parecidos a los pequeños ungulados primitivos de la Era Terciaria del que evolucionó el orden meridiungulata. Solían vivir en grupos y se comunicaban con sus congéneres mediante diversos gritos. su sistema auditivo y su oído medio estaba muy desarrollado. Las especies terrestres eran diurnas y más gregarias, se refugiaban de los depredadores en madrigueras y grietas de las rocas. Las especies arbóreas eran nocturnas y vivían en grupos más pequeños que solían refugiarse en los huecos de los árboles durante el día. También se alimentaban de distintos vegetales dependiendo del tipo de especie. Se trata de pequeños herbívoros que ocuparon un nicho ecológico y biotopo semejante al de los hiracoideos de la actualidad.
Aunque el aspecto de los notioprogonios no era todavía tan diverso como el de los herbívoros ungulados con pezuñas a los que estamos acostumbrados, alcanzaron a ocupar una gran variedad de nichos ecológicos, como se desprende de la diversidad de especies y de la gran variación en la talla entre las mismas:
Boreastylops, por ejemplo, de la familia Notostylopidae, se estima que alcanzaba un peso de 21 kg.
Notostylops su nombre significa “columnas traseras”, de la misma familia que Boreastylops, y es también un género extinto de ungulados de América del sur del Eoceno, aunque al ser tan basal tampoco presenta pezuñas.
En vida, Notostylops se habría asemejado a un wombat, un daman, una mara o una marmota y se piensa que se alimentaba de vegetación a baja altura. La clasificación del nicho ecológico de Notostylops es difícil porque era un animal poco especializado. Su cráneo, alto, contenía dos dientes incisivos de tipo roedor. Notostylops medía alrededor de 75 centímetros (2 pies 6 ) de largo. los fósiles de Notostylops se encuentran en los estratos eocénicos de Argentina.
Clasificación
- Familia Henricosborniidae
- †Henricosbornia
- †Othnielmarshia
- †Peripantostylops
- †Postpithecus
- †Simpsonotus
- Familia Notostylopidae
- †Anastylops
- †Boreastylops
- †Edvardotrouessartia
- †Homalostylops
- †Notostylops
- †Otronia
- †Parastylops
- †Satshatemnus[2]
- †Seudenius
Referencias
- ↑ *Cifelli, Richard L. 1993. The phylogeny of the native South American ungulates. pp. 195-216 in F. S. Szalay, M. J. Novacek and M. C. McKenna (eds.) Mammal Phylogeny, Volume 2, Placentals. Springer-Verlag, New York. ISBN 0-387-97853-4
- ↑ M. F. Soria. 1989. El primer Notoungulata de la Formación Río Loro (Paleoceno medio), Provincia de Tucumán, República Argentina. Ameghiniana 26(3-4):145-151.
- McKenna, Malcolm C., and Bell, Susan K. 1997. Classification of Mammals Above the Species Level. Columbia University Press, New York, 631 pp. ISBN 0-231-11013-8
Categorías:- Notoungulata
- Mamíferos del Paleoceno
- Mamíferos del Eoceno
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