- Batalla de Sekigahara
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Batalla de Sekigahara
関ヶ原の戦いParte de Período Sengoku
Pintura del periodo Edo sobre la batalla.Fecha 21 de octubre de 1600[1] Lugar Sekigahara, Prefectura de Gifu (Japón) Resultado Victoria decisiva del clan Tokugawa Cambios territoriales Cambio radical en la distribución de los feudos del país Beligerantes Clan Tokugawa Fuerzas leales al clan Toyotomi Comandantes Fuerzas en combate 88.888[2] 81.890[2] Bajas Desconocidas, estimadas en 3.000[3]
Desconocidas, estimadas entre 8.000 y 35.270[3]
La batalla de Sekigahara (関ヶ原の戦い Sekigahara no tatakai?) fue una batalla decisiva en la historia de Japón que tuvo lugar el 21 de octubre del año 1600[1] (Keichō 5, decimoquinto día del noveno mes según su antiguo calendario)[4] en Sekigahara (hoy prefectura de Gifu). Durante este conflicto se enfrentaron los ejércitos de las dos principales facciones del país: por una parte, quienes consideraban que Toyotomi Hideyori, hijo de uno de los grandes unificadores del Japón, Toyotomi Hideyoshi, era quien debía convertirse en el dirigente del país. Por otra parte, la facción de los que apoyaban a Tokugawa Ieyasu, uno de los daimyō (señores feudales) más prominentes del país, para que se convirtiera en el dirigente.
La victoria del «Ejército del Este» de Ieyasu le mereció pasar a la historia como «El último de los grandes unificadores de Japón» junto con Oda Nobunaga y Toyotomi Hideyoshi.[5] Además, le despejó el camino para que obtuviera el título de shōgun, máxima autoridad política y militar en Japón durante esa época. A partir de entonces se establecería el shogunato Tokugawa, el último shogunato de la historia y el cual duraría más de 250 años al frente del gobierno.[6]
La importancia de esta batalla, desenlace de toda una campaña militar, radica en que debido a su resultado el país saldría de una época de constantes conflictos y luchas internas. Se establecería además una paz casi absoluta a lo largo y ancho del archipiélago, sólo interrumpida por revueltas menores hasta el regreso del Emperador de Japón como máxima autoridad durante la Restauración Meiji en 1866 - 1869.
Aunque no se sabe con exactitud la cifra de los soldados presentes en el campo de batalla, la mayoría de los académicos asegura que entre 170.000 y 200.000 guerreros se dieron cita ese día, e incluso algunos aseguran que esta fue la mayor batalla en suelo japonés de su historia.[2] [7]
Contenido
El nombre de la batalla
Esta batalla histórica, conocida también comúnmente en japonés como Tenka Wakeme no Tatakai (天下分け目の戦い? lit. «la batalla decisiva»), toma su nombre del poblado donde se efectuó el conflicto bélico: Sekigahara, ubicado en el distrito de Fuwa, prefectura de Gifu en Japón.
Cabe mencionar dos aspectos fundamentales: aunque generalmente se le considera como una sola batalla, ésta en realidad formó parte de toda una campaña militar. Durante ésta, ambos bandos efectuaron movimientos previos, asediando los castillos enemigos y luchando por el control de las principales vías de comunicación para tratar de asegurar la ventaja sobre el adversario. Otro aspecto a resaltar es que, si bien ambos bandos se habían preparado durante los meses previos para el combate, la elección del lugar fue una decisión tomada rápidamente por el comandante de uno de los bandos involucrados, Ishida Mitsunari, buscando la mejor posición de sus elementos. Irónicamente, las mismas características del lugar jugarían en su contra en el momento en que algunos de sus aliados cambiaran de bando.[8]
Contexto
Véase también: Toyotomi HideyoshiHideyoshi fue el primer hombre que logró unificar realmente Japón al completar la tarea iniciada por Oda Nobunaga, quien fue traicionado por uno de sus principales generales, Akechi Mitsuhide, durante el «Incidente de Honnōji». Sin embargo, Hideyoshi nunca pudo convertirse en shōgun debido a su origen humilde, el cual nunca pudo ser desmentido por los biógrafos aduladores de la época, quienes por más intentos no consiguieron ligarlo familiarmente al legendario clan Fujiwara. Hideyoshi tuvo que aceptar a cambio el título menor de kanpaku (関白? regente), título que después transfirió a su hijo adoptivo Hidetsugu, tomando para sí el de taikō (太閤? kanpaku retirado).[9]
Hideyoshi, a los 57 años de edad, logró tener un hijo propio, Toyotomi Hideyori, por lo que le ordenó a Hidetsugu que cometiera seppuku, suicidio ritual más comúnmente conocido en occidente como harakiri. Consciente de las disputas que se producirían a su muerte, nombró un grupo llamado «Consejo de los Cinco Regentes» (precedido por Tokugawa Ieyasu e integrado además por Maeda Toshiie, Uesugi Kagekatsu, Mōri Terumoto y Ukita Hideie) con el objeto de que el consejo gobernara hasta que su hijo cumpliera la mayoría de edad, haciéndoles jurar que lo tratarían como a él mismo.[10]
Después de la muerte de Toyotomi Hideyoshi en 1598 se produjo un importante vacío de poder. Tokugawa Ieyasu comenzó a establecer una serie de alianzas con figuras poderosas del país por medio de matrimonios arreglados,[11] por lo que Ishida Mitsunari, uno de los cinco bugyō (奉行? magistrado), comenzó a unificar a todos aquellos en contra de la figura de Ieyasu.[12] Debido a que nadie se atrevió a hacerle frente, Mitsunari decidió que la única opción era que fuera asesinado. Cuando los principales generales de Ieyasu se enteraron del plan, decidieron eliminar a Mitsunari, por lo que éste tuvo que huir hacia el Castillo Osaka disfrazado de mujer y subido en un palanquín.[13] Sorprendentemente Mitsunari decidió pedir ayuda y protección directamente a Ieyasu, quien accedió a recibirlo en el Castillo Fushimi como invitado, donde permaneció hasta la primavera de 1599 cuando Ieyasu le pidió que regresara a su propio castillo, el Castillo Sawayama.[13]
El 22 de agosto, mientras que Ieyasu organizaba a su ejército con la intención de enfrentarse a un daimyō rebelde, Uesugi Kagekatsu, Mitsunari decidió actuar respaldado por los otros bugyō y tres de los cuatro tairō (大老? lit. «gran anciano»), los cuales enviaron una queja formal contra Ieyasu acusándolo de 13 cargos distintos.[13] Entre los cargos destacaban haber dado en matrimonio hijas e hijos con fines políticos y haber tomado posesión del Castillo Osaka, antigua residencia de Hideyoshi, como si fuera suyo.[14] Ieyasu interpretó la misiva como una clara declaración de guerra, por lo que virtualmente todos los daimyō del país se enlistaron, ya fuera en el llamado «Ejército del Oeste» de Mitsunari o el «Ejército del Este» de Ieyasu.[14]
Durante meses en ambos bandos se llevaron a cabo planes y preparativos para la batalla que estaba por ocurrir cerca de un pequeño poblado llamado Sekigahara.[14]
Historia
Movimientos previos a la campaña
Uesugi Kagekatsu, daimyō de la provincia de Aizu, comenzó a construir y ampliar rápidamente nuevas defensas en su dominio. Cuando Ieyasu le solicitó una explicación, éste a través de uno de sus principales vasallos, le respondió irónicamente que «mientras los samuráis de la ciudad pasaban su tiempo coleccionando implementos de té, los del campo coleccionaban armamento». Ieyasu ordenó a Kagekatsu que se presentara personalmente a ofrecer una explicación de su comportamiento pero al no recibir ninguna respuesta decidió llamar a sus aliados a concilio en Osaka el 12 de julio. Finalmente el 24 del mismo mes, Ieyasu y su ejército salieron de Osaka rumbo a Aizu.[16]
Aunque Kagetsugu estaba al tanto de la situación no mostró preocupación pues sabía que antes de que estuviera en un peligro real Mitsunari y su ejército atacarían al de Ieyasu. Kagekatsu decidió entonces tomar la iniciativa y atacar, por lo que casi inmediatamente tanto Mōgami Yoshiakira, como Date Masamune,[16] aliados del clan Tokugawa, contraatacaron, controlando la situación.[17]
Ieyasu hizo una pausa el 25 de julio en el Castillo Fushimi, el cual era custodiado por uno de sus principales vasallos, Torii Mototada, con quien pasó la tarde platicando y bebiendo.[17] Ambos sabían que una de las primeras acciones de Mitsunari sería atacar este castillo y de ocurrir esto, Mototada no tendría esperanzas reales de salir de esa batalla victorioso. Mototada aseguró que el castillo caería sólo si su fuerza era superada diez veces.[18] La despedida de ambos a la mañana siguiente fue verdaderamente emotiva.[17]
Mientras el «Ejército del Este» marchaba hacia su destino, Mitsunari había convocado a los principales conspiradores, entre los que se encontraban Ukita Hideie, brazo derecho de Mitsunari, Shimazu Yoshihiro daimyō de Satsuma, Kobayakawa Hideaki, Nabeshima Katsushige, Chōsokabe Morichika y Ōtani Yoshitsugu en el Castillo Sawayama.[17]
Tokugawa y su ejército avanzaban lentamente esperando los movimientos del ejército enemigo y finalmente llegaron a Edo el 10 de agosto. Permanecieron ahí hasta el 1 de septiembre, cuando reemprendieron la marcha hacia el norte de Ōyama con un ejército que se contaba en los 50.000 combatientes.[17]
Mientras tanto en Osaka, Kikkawa Hiroie estaba enfadado debido a que Mitsunari no había permitido que su clan entrará en acción, por lo que comenzó a enviar mensajes a los generales bajo el mando de Tokugawa, Kuroda Nagamasa e Ii Naomasa, asegurándoles que en el momento de la batalla, los 36.000 soldados del clan Mōri no se enfrentarían al «Ejército del Este».[17]
Asedio de Fushimi
El 27 de agosto las fuerzas del «Ejército del Oeste» arribaron al Castillo Fushimi tal y como habían previsto Ieyasu y Mototada.[19] Junto con los guardias del castillo se encontraban además un centenar de guerreros ninja provenientes de la región de Kōga. Dichos ninjas brindaron apoyo dentro del castillo mientras que otros hacían guerra de guerrillas a los alrededores.[20] Los defensores soportaron el asedio de 40.000 soldados[21] durante diez días.[18] Sabiendo que tenían que detener al ejército invasor por el mayor tiempo posible para que Ieyasu pudiera tomar los castillos enemigos a lo largo del Nakasendō, la rendición no entraba dentro de los planes de Mototada.[19] Al cabo de esos diez días un traidor, a quien Mitsunari había amenazado con crucificar a su esposa e hijo, prendió fuego a una de las torres por lo que los invasores pudieron entrar hasta el castillo central.[18] Con tan solo 200 hombres sobrevivientes y el castillo en llamas, Mototada efectuó cinco contraataques hasta que sólo quedaron 10 hombres.[18] Fue hasta este momento en que Mototada y los sobrevivientes decidieron cometer seppuku para evitar ser capturados con vida.[19] Ese mismo día, el 6 de septiembre, Mitsunari y sus hombres pudieron tomar el castillo definitivamente, lo que les costó cerca de 3.000 bajas.[19]
Se movilizan las tropas
Con la caída del Castillo Fushimi los aliados del «Ejército del Oeste» tenían ahora el camino abierto para reunirse con seguridad en el Castillo Ōgaki para marchar juntos al norte y al este, con la finalidad de atacar el ejército de Ieyasu por la retaguardia, acorralándolo en su dominio en la provincia de Mikawa. El 10 de septiembre Ieyasu ya estaba de vuelta en Edo preparando a su ejército para la batalla final y para el 15 de septiembre Mitsunari y sus tropas llegaron a Ōgaki, por lo que Ieyasu consideró regresar a Osaka.[15]
Los castillos Kiyosu y Gifu se encontraban a unas 15 millas (24 kilómetros aproximadamente) de distancia de Ōgaki, y debido a su cercanía con los caminos Nakasendō y Tōkaidō, quien controlara estos castillos controlaría el tráfico.[15] El Castillo Kiyosu era controlado por Ōsaki Gemba (conocido por sus enemigos como «Oni (鬼? demonio) Gemba»), vasallo de Fukushima Masanori, aliado de Tokugawa; mientras que el Castillo Gifu era controlado por Oda Hidenobu, nieto de Oda Nobunaga, quien se había aliado en el bando de Mitsunari.[15] Consciente del peligro que representaba Hidenobu, Ieyasu envió 16.000 hombres comandados por Fukushima Masanori, Kuroda Nagamasa, Honda Tadakatsu, Ii Naomasa y Hosokawa Tadaoki para asegurar primero el castillo Kiyosu y posteriormente tomar el castillo Gifu a cualquier costo.[15] Posteriormente envió 15.000 soldados más bajo las órdenes de Ikeda Terumasa, Asano Yoshinaga y Yamanouchi Kazutoyo e hizo un último envío de 36.000 hombres más comandados por su hijo Hidetada para que viajaran por el Nakasendō con el fin de garantizar el cumplimiento del objetivo.[22]
Las fuerzas en Tōkaidō, que sumaban 31.000 soldados, asediaron el Castillo Gifu el 28 de septiembre y para el día siguiente ya era controlado por el «Ejército del Este». Hidenobu fue enviado bajo custodia a un monasterio para que, posteriormente a la batalla, Ieyasu decidiera su futuro.[22]
El 7 de octubre Ieyasu decidió salir de Edo con su ejército de 30.000 hombres para marchar hacia el oeste. A diferencia del viaje de ida, el cual había realizado en 40 días con sólo algunos cientos de hombres, realizó el mismo trayecto en tan sólo dos semanas.[22]
Asedio de Ueda
Hidetada marchó de Edo por el Nakasendō con el objetivo de tomar el Castillo Ueda, para posteriormente reunirse con su padre en algún punto de la provincia de Mino el 20 de octubre.[23] El asedio al castillo defendido por el clan Sanada[18] comenzó el 12 de octubre[23] y los defensores, comandados por Sanada Masayuki, lograron resistir los embates del enemigo. Hidetada, temiendo haberse demorado demasiado, rompió el asedio el 16 de octubre y tomó su ruta nuevamente.[24] Para cuando hubo llegado a Sekigahara, la batalla había finalizado.[18] [24]
Asedio de Ōtsu
El Castillo Ōtsu era controlado por Kyōgoku Takatsugu, partidario de Ieyasu, y debido a la posición estratégica de éste, a orillas del lago Biwa, ambos bandos estaban interesados en controlarlo.[24]
El 13 de octubre una fuerza de 13.000 hombres bajo el liderazgo de Mōri Motoyasu, Tachibana Muneshige y Tsukushi Hirakodo tomaron posiciones en los alrededores del castillo junto con las fuerzas navales de Mashita Magamori para comenzar el asedio. Este conflicto bélico sirvió de entretenimiento para los habitantes de Kioto, quienes se apostaron en las colinas vecinas llevando alimentos para disfrutar el evento a manera de obra teatral.[18] [25] Los defensores, contabilizados en 3.000 elementos, resistieron los ataques y para el sexto día Takatsugu envió a un grupo de ninjas al campamento del clan Mōri a que robaran algunas de sus insignias y banderas. A la mañana siguiente las banderas ondeaban en el interior del castillo pero no lograron el objetivo de desmoralizarlos. Al contrario, tanto los Mōri avergonzados como los Tachibana, quien en un inicio habían pensado que el castillo efectivamente había caído y ellos no habían participado, redoblaron esfuerzos para atacar a los defensores. El castillo finalmente cayó el 21 de octubre y aunque Takatsugu había perdido la batalla, había logrado mantener lejos del principal enfrentamiento a 15.000 soldados del bando de Mitsunari.[25]
Movimientos previos a la batalla
Después de una lenta marcha, Mitsunari y sus hombres llegaron a Ōgaki, desde donde envió a un grupo de mensajeros con instrucciones para que Mōri Terumoto movilizara a sus tropas hacia Osaka. Desafortunadamente éstos fueron capturados por soldados del «Ejército del Este», por lo que se envió un segundo grupo de mensajeros que pudieron finalmente entregar el mensaje. Terumoto comenzó a avanzar con 30.000 elementos. Al mismo tiempo, Kobayakawa Hideaki envió sus propios mensajeros, sólo que fueron enviados ante la presencia de Ieyasu donde le aseguraron que recibirían su apoyo una vez comenzara la batalla decisiva.[25]
Tres días después de recibir el mensaje de Hideaki, el 17 de octubre, Ieyasu llegó a Kiyosu y dos días después ya se encontraba en el Castillo Gifu.[25]
Escaramuza en Akasaka
Ieyasu y sus hombres arribaron a Akasaka el 20 de octubre, donde estableció un pequeño campamento en una pequeña colina llamada Okayama. La proximidad del enemigo consternó al bando leal a Mitsunari y se sorprendieron de la velocidad de su avance.[18] Otros daimyō solicitaron autorización para efectuar una labor de reconocimiento al campamento enemigo, por lo que Shima Sakon y Akashi Masataka, junto con 1.300 hombres, salieron del campamento. Ambos bandos se enfrentaron entonces en una escaramuza en medio del río Kuisegawa, durante la cual el puente fue destrozado. El enfrentamiento terminó cuando comenzó a caer la noche.[26]
De regreso en el campamento, tanto Shimazu Yoshihiro como Ukita Hideie propusieron un ataque nocturno a gran escala al campamento enemigo, ya que sus soldados estaban cansados y habían comido y dormido con sus armaduras puestas por dos semanas, con lo que lograrían una victoria definitiva. Sakon se negó ante la propuesta, alegando que ese tipo de ataques nocturnos eran «cobardes» y utilizados por ejércitos de menores proporciones ante un enemigo superior, y debido a que ellos contaban con más elementos, saldrían con la victoria. La idea del ataque nocturno fue desechada. Mitsunari entonces tomó la decisión de ordenar una retirada general hacia Sekigahara, un lugar donde, según él, tendrían la ventaja en el campo de batalla.[26]
La batalla
Primeras horas
Hacia las 4:30 de la mañana las tropas del «Ejército del Oeste» estaban formadas y en posición de batalla. Para la media noche, cuando Ieyasu recibió la noticia de que las tropas enemigas se movilizaban y después de determinar la dirección que tomaba el ejército enemigo, ordenó del mismo modo movilizar su ejército a la nueva ubicación.[29] Ambos ejércitos llegaron casi al mismo tiempo al lugar donde se desarrolló la batalla.[30] Aunque es imposible saber el número real de samuráis que estuvieron presentes en esta batalla, algunas fuentes aseguran que ese día participaron cerca de 250.000 soldados.[30]
El día amaneció lluvioso. Una espesa niebla cubría el valle por lo que la visibilidad se reducía a unos pocos metros y las tropas tenían dificultades para identificar al enemigo.[31] A las ocho de la mañana la niebla se dispersó y después de algunos instantes comenzó el enfrentamiento. No está del todo claro qué bando comenzó el ataque, aunque los primeros que se movilizaron fueron 30 guerreros a caballo del bando del este, miembros de «los demonios rojos»[32] de Ii Naomasa, quienes atacaron la posición de Ukita Hideie, extendiéndose la lucha de inmediato en ambos ejércitos.[31]
El ataque inicial de Naomasa fue tan sorpresivo y violento que alcanzaron las líneas del clan Shimazu.[33] Del otro lado del campo de batalla, el ataque de Kyōgoku Takamoto, Tōdō Takatora y Terazawa Hirotaka barrió con la posición de Ōtani Yoshitsugu.[34]
Cerca de 20.000 hombres correspondientes a las fuerzas de Kuroda Nagamasa, Tanaka Yoshimasa, Hosokawa Tadaoki, Katō Yoshiaki y Tsutsui Sadatsugu hicieron una carga directa en contra del puesto de control de Mitsunari. Se creó un anillo defensivo improvisado para evitar que llegaran hasta donde se encontraba Mitsunari y lograron detener su avance.[35]
Para apoyar a Nagamasa, Togawa Michiyasu e Ikoma Masumasa llevaron consigo arcabuceros, quienes dispararon en el flanco derecho de las líneas frontales del «Ejército del Oeste». Shima Sakon, que había salido ileso de la escaramuza en Akasaka, cayó herido de un disparo, por lo que tuvo que retirarse.[36]
Las tropas de Tokugawa estaban motivadas y redoblaban esfuerzos, por lo que Mitsunari decidió utilizar cinco cañones para disparar contra el enemigo. Debido a que los cañones en Japón no eran utilizados frecuentemente durante la batalla, Mitsunari logró el efecto deseado y las tropas enemigas se replegaron. Ordenó a sus soldados que avanzaran para atacar a Tanaka Yoshimasa, pero las fuerzas de Katō Yoshiaki y de Hosokawa Tadaoiki reaccionaron a tiempo, logrando que las tropas de Ishida volvieran a tomar posiciones defensivas.[36]
Del otro lado del Monte Nangū, Asano Yukinaga lideró a sus 6.510 samuráis a atacar directamente a Natsuka Masaie. De uno y otro lado se siguieron disparos intercalados de arcabuz aunque sin mucho orden o estrategia.[36] Ota Gyūichi escribió posteriormente acerca de la primera fase de la batalla:
Aliados y adversarios se presionaron unos a otros. El fuego de los arcabuces y los gritos retumbaban en los cielos y estremecían la tierra. El humo negro subía, haciendo al día como la noche.
Ota Gyūichi.[37]Ōtani Yoshitsugu entabló un duro combate con las tropas de Tōdō Takatora y Kyōgoku Takatomo, mientras que las de Konishi Yukinaga mantenían un feroz combate cuerpo a cuerpo con las de Oda Yūraku y Terezawa Hirotaka. Pero hasta ese momento no había un lugar más caótico que la escena donde se enfrentaban Fukishima Masanori y Ukita Hideie, debido a los constantes ataques y contraataques de uno y otro bando.[37]
Continúa la batalla
Hacia las 10:00 a.m. Ieyasu decidió adelantar su centro de comando acercándose al del enemigo, mientras que Mitsunari había enviado un mensajero a Shimazu Yoshihiro para que se uniera a la batalla ya que, de sus cerca de 80.000 soldados, sólo habían entrado al combate unos 35.000. El mensajero insultó el orgullo del viejo Shimazu al dar el mensaje sin haber primero descendido de su caballo, por lo que Mitsunari en persona tuvo que ir a dar la orden de atacar. Shimazu le contestó: «En la batalla, uno debe de encargarse de sus propios asuntos y pelear sus propias batallas [...] no hay tiempo para preocuparse de los asuntos de los demás, ya sea en el frente, retaguardia o en los flancos». Mitsunari regresó a su posición para observar la situación imperante y considerar los ajustes necesarios. Ante la negativa del clan Shimazu, ahora dependía del clan Mōri y de las tropas de Kobayakawa Hideaki.[37]
El «Ejército del Oeste» había sido duramente atacado pero habían podido reagruparse gracias al liderazgo de Ukita Hideie. Todo iba saliendo de acuerdo al plan: Hideie soportaría el ataque principal de Tokugawa, Kobayakawa Hideaki descendería y atacaría las tropas enemigas por un flanco, Mitsunari por el otro y el contingente del clan Mōri por la retaguardia, aprisionando a Tokugawa sin darle oportunidad de huir.[37] Eran alrededor de las 11 de la mañana cuando Mitsunari consideró que era el momento oportuno de enviar la señal para que Kobayakawa Hideaki y sus 15.000 hombres procedieran de acuerdo al plan, por lo que encendieron las señales de fuego que habían acordado con antelación.[38]
Al ver las señales, Ankokuji Ekei y Natsuka Masaie comprendieron que era momento de entrar en la lucha, pero cuando vieron que Kikkawa Hiroie no hacía movimiento alguno, enviaron a un mensajero a preguntar si tenían algún problema. Hiroie sólo respondió que se encontraba muy ocupado comiendo por lo que solicitó que no lo molestaran. Decidieron entonces esperar también a que Hiroie entrara en acción.[39]
La traición de Hideaki
Tanto Ieyasu como Mitsunari estaban ansiosos por ver como procedería Hideaki: si apoyaría el ejército del este o el del oeste. Ieyasu decidió enviar un contingente de arcabuceros para que atacaran la posición de Kobayakawa, justo atrás de Hideaki, quien pareció salir del letargo ante los disparos y finalmente gritó: «Nuestro objetivo es Ōtani Yoshitsugu!».[41]
Ōtani Yoshitsugu estaba preparado ante la posibilidad de la traición de Hideaki, por lo que había mantenido dos divisiones en la retaguardia. Desafortunadamente para él el ataque del enemigo había sido demasiado intenso y en cuanto fue atacado por las tropas del traidor, sus hombres y generales comenzaron a caer uno a uno. Sabiendo que ni la retirada ni la huida eran factibles, Yoshitsugu le pidió a uno de sus vasallos que le cortara la cabeza y la escondiera de tal forma que el enemigo no pudiera obtenerla como un trofeo.[42]
Una vez que se corrió el rumor de la traición, el «Ejército del Oeste» perdió todo orden y el ánimo de los samuráis se derrumbó.[43]
Los Shimazu fueron alcanzados finalmente por Ii Naomasa y Shimazu Toyohisa fue asesinado. Yoshihiro comprendió que no había más opción que huir, por lo que reagrupó su ejército y emprendió la retirada, dejando algunos arcabuceros atrás con la finalidad de detener el avance de los «demonios rojos». Entre los disparos de los arcabuceros Shimazu, Ii Naomasa recibió el impacto de una bala en el hombro, por lo que se vio obligado a retirarse y dejar que los Shimazu escaparan.[43]
Kikkawa Hiroie, al mando de 3.000 hombres en la avanzada de las tropas del clan Mōri, rehusó participar, por lo que Mōri Hidemoto hizo lo mismo con sus 15.000 guerreros.[43] Durante su huida, los Shimazu se toparon con la división de Chōsokabe Morichika, quienes al enterarse de la situación decidieron que tampoco entrarían en la batalla.[44]
El ejército restante comenzó a huir en desbandada. Mitsunari, rodeado de tan sólo algunos de sus principales generales, decidió huir a las montañas. Alrededor de las 2:00 de la tarde, Ieyasu declaró la guerra terminada.[44]
Fin de la batalla
Ya en su campamento Ieyasu se sentó junto con sus principales consejeros y generales y ordenó que se preparara la ceremonia en la que se presentan las cabezas cercenadas de los principales generales del ejército enemigo. Dicha ceremonia era tradicional en los samuráis y consistía en un ritual en el que se seguían los siguientes pasos: Primero las cabezas cortadas de los enemigos eran lavadas y peinadas.[45] Una vez efectuado esto, se ennegrecían los dientes aplicando un tinte llamado ohaguro.[46] Finalmente las cabezas eran dispuestas cuidadosamente sobre una tabla para su exposición.[45]
Mientras se preparaba dicha ceremonia, los principales generales comenzaron a llegar al campamento. El primero en aparecer fue Kuroda Nagamasa, quien recibió un tantō como obsequio e Ieyasu lo felicitó, asegurando que la victoria se había alcanzado debido a su lealtad y esfuerzo. A continuación arribaron Honda Tadakatsu y Fukushima Masanori, seguidos por Ii Naomasa, quien tuvo que ser ayudado debido a la herida recibida. Kobayakawa Hideaki llegó al campamento e inmediatamente se postró frente a Ieyasu, disculpándose por el asedio al Castillo Uedahara y solicitando que se le permitiera liderar el ataque al Castillo Sawayama para compensar «su error».[47]
Finalmente, y posterior a la ceremonia de cobro de cabezas, llegó Tokugawa Hidetada. Ieyasu no aceptó verlo inmediatamente y solo lo recibió entrada la tarde, sin mediar palabra alguna.[47]
Consecuencias
La primera acción del triunfante Ieyasu fue tomar el castillo perteneciente a Mitsunari, el cual era resguardado por Ishida Masazumi, hermano de Mitsunari. Kobayakawa Hideaki tuvo «el honor» de encabezar el ataque contra el castillo y sólo dos días después Masazumi se rindió cometiendo seppuku.[48]
Algunos días después de la batalla Ishida Mitsunari fue capturado junto con Ankokuji Ekei y Konishi Yukinaga, y fueron escoltados hasta Kioto donde fueron decapitados en Rokujō-ga-hara.[49] Ukita Hideie huyó del campo de batalla y se escondió con los Shimazu en Satsuma y durante su ausencia su feudo de tres provincias fue confiscado y distribuido. En 1603 Shimazu Iehisa reveló su escondite y rápidamente fue condenado a muerte, aunque posteriormente sólo se le obligó al exilio en la isla de Hachijō-jima, donde murió en 1655.[49]
Ieyasu ganó la supremacía casi absoluta en el país y decidió instalar a Toyotomi Hideyori en el Castillo Osaka (desde el cual se levantaría en armas contra el shogunato en 1614 en lo que es conocido como «Asedio de Osaka»).[50] Le otorgó además un feudo valorado en 650.000 koku.[51] Finalmente en 1603, Ieyasu fue nombrado oficialmente por el Emperador Go-Yōzei como shōgun,[49] estableciendo así el shogunato Tokugawa, el cual duraría más de 250 años.
Repartición de tierras
Para recompensar a todos aquellos que lo habían apoyado en la victoria y castigar a sus detractores, Ieyasu confiscó las tierras de 90 familias, las cuales en total equivalían a 6,5 millones de koku[52] y las reasignó.[53] De los 204 feudos que existían durante el mandato de Toyotomi Hideyoshi,[54] [55] para 1602 y con la reasignación, sólo quedaron 188[54] distribuidos de la siguiente manera:[56]
Feudos sin cambios[57] Daimyō Koku Clan Shimazu 605.000 Clan Nabeshima 357.000 Hori Hideharu 300.000 Mōri Tadamasu 120.000 Nanbu Toshinao 100.000 Honda Tadakatsu 100.000 Sakakibara Yasumasa 100.000 62 feudos menores a 100.000 1.747.000 Total (69 feudos) 3.429.000 Feudos que aumentaron con Ieyasu[57] Daimyō Incremento Koku Maeda Toshinaga 360.000 1.195.000 Yūki Hideyasu 650.000 751.000 Date Masamune 25.000 605.000 Gamō Hideyuki 420.000 600.000 Kobayakawa Hideaki 51.000 574.000 Mogami Yoshimitsu 330.000 570.000 Kuroda Nagamasa 343.000 523.000 Matsudaira Tadayoshi 420.000 520.000 Ikeda Terumasa 368.000 520.000 Katō Kiyomasa 270.000 520.000 Fukushima Masanori 298.000 498.000 Asano Yukinaga 178.000 395.000 Nagaoka Tadaoki 139.000 369.000 Tanaka Yoshimasa 225.000 325.000 Horio Tadauji 70.000 240.000 Tōdō Takatora 120.000 203.000 Yamanouchi Kazutoyo 134.000 202.000 Katō Kamei 100.000 200.000 Hachisuka Iemasa 10.000 187.000 Ii Naomasa 60.000 180.000 Nakamura Kazutada 30.000 175.000 Ikoma Kazumasa 23.000 173.000 Takeda Nobuyoshi 110.000 150.000 Kyōgoku Takatomo 23.000 123.000 Terazawa Hirotaka 40.000 120.000 Satomi Yoshiyasu 30.000 120.000 Sanada Nobuyoki 88.000 115.000 Okudaira Nobumasa 20.000 100.000 Torii Tadamasa 60.000 100.000 Okudaira Iemasa[58] 100.000 100.000 85 feudos menores a 100.000 koku 1.746.000 Total (115 feudos) 12.199.000 Del mismo modo se establecieron dos tipo de señores feudales: los fudai-daimyō (譜代大名?) y los tozama-daimyō (外様大名?). Los fudai eran aquellos que habían sido leales anterior o durante la batalla de Sekigahara, mientras que los tozama eran aquellos cuya lealtad se había asegurado sólo después de la batalla, por lo que fueron relegados del círculo principal de influencia del gobierno.[52]
El orden de la batalla
Aunque no se sabe con exactitud la cifra de los soldados presentes en el campo de batalla, la mayoría de los académicos asegura que entre 170.000 y 200.000 guerreros se dieron cita ese día.[2] El historiador norteamericano Anthony J. Bryant asegura que las tropas presentes en la batalla se componen de la siguiente manera:[2]
Fuerzas del Ejército del Este Fuerzas del Ejército del Oeste Daimyō soldados Daimyō soldados Tokugawa Ieyasu 30.000 Mōri Terumoto* --- Honda Tadakatsu 500 Ishida Mitsunari 4.000 Hosokawa Tadaoki 5.000 Shima Sakon (1.000)[59] Ii Naomasa 3.600 Gamo Bitchū (1.000)[59] Matsudaira Tadayoshi 3.000 Akaza Naoyasu 600 Tsutsui Sadatsugu 2.850 Chōsokabe Morichika 6.600 Arima Toyōji 900 Kikkawa Hiroie 3.000 Asano Yukinaga 6.510 Mōri Hidemoto 15.000 Fukushima Masanori 6.000 Ankokuji Ekei 1.800 Ikeda Terumasa 4.560 Kobayakawa Hideaki 15.600 Ikoma Kazumasa 1.830 Konishi Yukinaga 4.000 Katō Yoshiaki 3.000 Kuchiki Mototsuna 600 Kuroda Nagamasa 5.400 Natsuka Masaie 1.500 Kyōgoku Takamoto 3.000 Ogawa Suketada 2.100 Oda Yūraku 450 Ōtani Yoshitsugu 600 Tanaka Yoshimasa 3.000 Ōtani Yoshikatsu 3.500 Terazawa Hirotaka 2.400 Shimazu Yoshihiro 1.500 Tōdō Takatora 2.490 Shimazu Toyohisa (750)[60] Yamanouichi Kazutoyo 2.058 Toda Shigemasa 1.500 Yoshida Shigekatsu 1.200 Ukita Hideie 17.000 Wakizaka Yasuharu 990 Vasallos del clan Toyotomi 2.000 Total 88.888[61] 81.890[62] Nota: Las tropas de Mōri Terumoto no se contabilizan debido a que se encontraban en el Castillo Osaka al momento de la batalla. Cifras entre paréntesis indican que las tropas se tomaron del ejército principal de su comandante y en naranja los que desertaron hacia el bando del «Ejército del Este». Armas
Véase también: Samurái#ArmasDe filo cortante
El arma principal utilizada en esta batalla fue la yari,[63] una especie de lanza japonesa que bien podían utilizar las tropas de a pie de infantería llamadas ashigaru (足軽? lit. «pies ligeros») e incluso los samuráis a caballo, aunque en una medida más corta que era conocida como mochi yari.[64]
El arma secundaria fue la nihontō, conocido más comúnmente en occidente como katana. Aunque al día de hoy es el arma más estrechamente relacionada con el samurái, fue hasta el periodo Edo, una época de paz, en que se le llegó a considerar como «el alma del samurái».[65] La katana era utilizada junto con una espada corta llamada wakizashi y juntas recibían el nombre de daishō (大小? lit. «grande y pequeña»).[64]
Cuando un samurái portaba su armadura completa, la katana colgaba con la hoja hacia abajo y el wakizashi era reemplazado por un tantō. La katana llegó a ser considerada como una de las armas más importantes en el campo de batalla debido a que con ella se solían definir combates cuerpo a cuerpo y con esa misma arma se cortaban las cabezas de los enemigos derrotados.[66]
Arrojadizas
Durante la mayor parte de la historia de los samuráis, el arco japonés (llamado yumi) fue su arma preferida y sólo se solía recurrir a la espada al descender del caballo y entablar combate cuerpo a cuerpo,[67] por lo que los samuráis solían ser expertos en el kyūba no michi «manejo del arco y el caballo». Los históricos arcos japoneses se asemejan en gran medida a los que se utilizan actualmente en el kyūdō, el cual tenía que ser levantado a la altura de la cabeza del jinete para poder disparar adecuadamente. La práctica del caballo y el arco dieron lugar al yabusame, el cual es practicado hasta nuestros días.[68]
En 1510, los samuráis conocieron el cañón de metal[69] y en ese mismo año, Hōjō Ujimasa compró una pistola china.[70] Para 1548, durante la Batalla de Uedahara se registró el uso de armas de fuego, por lo que de una forma u otra su uso se había extendido entre los distintos clanes. En 1543, comerciantes portugueses arribaron a Japón buscando un intercambio comercial y entre los artículos que intercambiaron había arcabuces europeos.[70] [71] A partir de 1549, diversos artesanos desarrollaron la técnica necesaria para reproducir estas armas[72] y comenzaron a fabricar sus propios arcabuces llamados teppō (鉄砲? lit. «cañón de acero»).[70] Aunque muchos samuráis se opusieron a su implementación debido a que con estas nuevas condiciones cualquier soldado estaba en posición de matar de un solo tiro a un entrenado y diestro maestro de las artes marciales (aun fuera un humilde ashigaru), su uso se propagó por todo el país y se volvió un elemento típico en los conflictos bélicos.[73] La batalla de Sekigahara no fue la excepción, por lo que el fuego del arcabuz se combinó con el uso del arco, aunque éste último ya era considerado como rústico y arcaico.[74]
Armaduras
Durante esta batalla prevalecieron dos tipos de armaduras principalmente: las de las tropas de infantería (soldados ashigaru) y las del resto de los samuráis.
Los ashigaru contaban con las armaduras menos costosas de toda la tropa. Su protección consistía principalmente de una armadura para el cuerpo elaborada de pequeñas placas unidas entre sí por cota de malla de tal forma que podía doblarse y era llamada tatami gusoku.[75] Estaba integrada por un dō (armadura para el torso) o un hara ate (armadura que sólo cubría el frente pero no la espalda),[63] un kusazuri (una especie de falda)[63] y un casco de guerra conocido como jingasa,[63] el cual inclusive podía ser utilizado para cocer arroz dentro de él.[76]
El resto de las tropas portaba una armadura que cubría el cuerpo llamada dō, la cual constituía la base de esta indumentaria defensiva. En el campo de batalla, los samuráis utilizaban unos calcetines conocidos como tabi, unas sandalias de tiras llamadas waraji o zori y en algunas ocasiones un par de geta (unos zapatos parecidos a los zuecos).[77] Los samuráis de este periodo utilizaban unos Suneate (脛当て?) o espinilleras,[78] además de unas haidate, protecciones en los muslos que se volvieron famosas después del periodo Sengoku.[78] Se usaban además unos guantes denominados yugake junto con las kote (小手? mangas) para proteger brazos y manos. Un uwaobi (上帯?) (cinturón exterior) mantenía todo el conjunto de ropa y armadura unido. Para proteger su cuello se utilizaba un nodowa, además de que se colocaba un hachimaki (鉢巻き?) alrededor de la cabeza para recibir el peso del kabuto (兜? casco).[79] Algunos samuráis acostumbraron utilizar algún tipo de máscaras para proteger el rostro conocidas como hoate y éstas podían ser completas, media máscara que protegía hasta debajo de los ojos y podía o no incluir una pieza para la nariz.[79]
Un rasgo característico en ambos tipos de armaduras fue la implementación del sashimono, una bandera larga portada en la espalda de los guerreros, las cuales tenían grabado el Mon o emblema del clan al que pertenecían, lo que permitía que se reconocieran en el campo de batalla.[63]
Sekigahara actualmente
Gracias al eficiente sistema de trenes en Japón es fácil llegar hasta el lugar. En el centro del poblado de Sekigahara está marcado el sitio donde estuvo el último puesto de comando de Ieyasu, lugar donde asistió a la ceremonia de exhibición de las cabezas cortadas de los enemigos que tomaron durante el combate. Cruzando la calle se encuentra el Museo Público de Sekigahara, donde se exhiben armas, armaduras, mapas y documentos relativos a la batalla.[80]
En el lugar donde se decidió la batalla, en medio de algunos arrozales y llamado kassenba, se erigió un obelisco y se muestran las banderas con las insignias de los clanes samurái que estuvieron presentes.[80]
Cerca de la estación del tren se encuentra un parque temático llamado Sekigahara Warland, donde se muestran algunas estatuas de plástico a escala natural representando las armas y vestimenta que se utilizaron durante este conflicto, además que cuenta con un pequeño museo donde se muestran distintos tipos de armaduras de finales del siglo XVI así como cascos de guerra.[81]
En la zona se encuentra también un templo que se construyó en honor a los líderes del «Ejército del Oeste» muertos en combate.[81]
En el año 2000 se llevaron a cabo diversos eventos para celebrar el aniversario número 400 del acontecimiento de la batalla, en el cual más de 800 personas descendientes de los guerreros que estuvieron presentes en el combate donaron armaduras y participaron en la representación de la batalla el 8 de octubre de ese año.[4]
Otra celebración importante tuvo lugar durante la Expo Ogaki 2000 que se llevó a cabo en las ruinas del Castillo Ōgaki, donde se exhibieron armas y armaduras de la época, se montó un video de la representación de la batalla y se brindó una reseña de los comandantes presentes a los visitantes. En total más de 748.000 personas asistieron a esta exposición entre el 25 de marzo y el 9 de octubre de ese año.[4]
En la cultura popular
La batalla de Sekigahara ha servido como tema principal de diversas novelas, películas y series de televisión sobre todo en Japón.[4]
Dentro de las principales novelas destacan Oinaru Kuwadate del escritor Taichi Sakaiya, Sekigahara de Shiba Ryōtarō además de Shogun: señor de samuráis del escritor James Clavell, donde se describen los sucesos que causaron el desenlace de la batalla.
Dentro del género del manga se encuentra la serie Azumi, la cual se recrea al finalizar esta batalla y se basa en una mujer asesina que después de ser contratada por el shōgun Tokugawa, intenta eliminar a los aliados del clan Toyotomi. Este manga fue adaptado en el año 2003 al cine ganando 5 premios en Japón.[82]
En el género dorama destacan Sekigahara, del año 1981 y el cual fue una adaptación de la novela de Shiba Ryōtarō, Aoi Tokugawa Sandai, producida por la NHK en el año 2000 y Sengoku Jieitai:Sekigahara no Tatakai, una serie del 2006 basada principalmente en dos películas fantásticas: Sengoku Jieitai de 1976 y Sengoku Jieitai 1549 del 2005.
Dentro de los videojuegos sobresalen dos juegos para Play Station 2: Kessen y Samurai Warriors 2, los cuales presentan los escenarios probables que pudiesen haber ocurrido con situaciones diversas. Un juego para computadoras que recrea esta batalla histórica es Age of Empires III: The Asian Dynasties, la cual forma parte de la campaña japonesa.[83]
Entre los juegos de mesa y dentro del género wargame destaca Samurai, el volumen 5 de la colección Great Battles of History. Publicado por GMT Games en 1997 y reimpreso en 2007, el juego contiene una simulación histórica altamente detallada de la batalla de Sekigahara. Los eventos más importantes que afectaron la contienda están representados en el juego. Además el título contiene otras 5 batallas del periodo Sengoku: Anegawa, Kawanakajima, Okehazama, Nagashino y Mikata-ga-hara. [84]
Véase también
- Período Azuchi-Momoyama
- Historia de Japón
- Oda Nobunaga
- Toyotomi Hideyoshi
- Tokugawa Ieyasu
- Shogunato Tokugawa
Referencias
Notas
- ↑ a b «The Story of the Battle of Sekigahara» (en inglés). Consultado el 6 de marzo del 2009.
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- ↑ a b «Fight for the future» (en inglés). Consultado el 9 de marzo del 2009.
- ↑ a b c d «The Battle of Sekigahara» (en inglés). Consultado el 9 de septiembre de 2008.
- ↑ «Japan - AD 1573-1615 Momoyama» (en inglés). Consultado el 6 de marzo del 2009.
- ↑ «Edo Period» (en inglés). Consultado el 6 de marzo del 2009.
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- ↑ Llamados así por sus armaduras de color rojo brillante, incluso se dice que sus lanzas estaban pintadas de ese mismo color.
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- ↑ El koku es una antigua unidad de medición en Japón. Teoricamente representaba la cantidad de arroz necesario para alimentar un hombre durante un año completo.
- ↑ a b Bryant, 1995:83.
- ↑ El historiador George Bailey Sansom aseguraba que 4.307.000 fueron confiscados y 2.215.900 fueron tomados de reducciones, lo que da un total de 6.522.900 de koku redistribuidos, cifra similar a la proporcionada por Bryant. Sansom, 1961:415.
- ↑ a b Sólo tomados en cuenta los mayores a 100.000 koku.
- ↑ Sansom, 1961:413.
- ↑ Sansom, 1961:416.
- ↑ a b Superiores a los 100.000 koku.
- ↑ Nuevo feudo.
- ↑ a b Tomados del ejército principal de Mitsunari.
- ↑ Tomados del ejército de Yoshihiro.
- ↑ El historiador George Sansom estimó que 95.000 soldados estuvieron en el campo de batalla en el bando de Mitsunari según un cálculo basado en los ingresos en koku de cada feudo representado en la batalla. Sanson, 1961:412.
- ↑ El historiador George Sansom estimó que 138.000 soldados estuvieron en el campo de batalla en el bando de Ieyasu según un cálculo basado en los ingresos en koku de cada feudo representado en la batalla. Sanson, 1961:412.
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Bibliografía
- Bryant, Anthony. Sekigahara 1600: The final struggle for power. Osprey Publishing. ISBN 1-85532-395-8.
- Gaskin, Carol; Vince Hawkins, Juan Antonio Cebrian (2005). Breve historia de los samuráis. Nowtilus S.L.. ISBN 8-49763-140-4.
- Murdoch, James (1996). A History of Japan. Nowtilus S.L.. ISBN 0-41515-416-2.
- Sansom, George (1961). A history of Japan, 1334-1615. Stanford University Press. ISBN 0-80470-525-9.
- Turnbull, Stephen. The Samurai Sourcebook. Cassell & Co. ISBN 1-85409-523-4.
- Turnbull, Stephen (2003). Ninja, AD 1460 - 1650. Osprey Publishing. ISBN 1-84176-525-2.
- Turnbull, Stephen (2006). Samuráis, La Historia de los Grandes Guerreros de Japón. Libsa. ISBN 84-662-1229-9.
Enlaces externos
- «Fotoguía de Sekigahara» (en inglés). Consultado el 05-09-2008.
- «Vista satelital de Sekigahara» (en inglés). Consultado el 05-09-2008.
- «Breve resumen de la batalla en Answers.com» (en inglés). Consultado el 05-09-2008.
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