Héctor Scotta

Héctor Scotta
Nombre	Héctor Horacio Scotta
Apodo	Gringo
Nacimiento	27 de septiembre de 1950 San Justo, Santa Fe, Argentina
Nacionalidad
Posición	Delantero
Año del debut	1970
Club del debut	Unión de Santa Fe
Año del retiro	1986
Club del retiro	Deportivo Armenio

Héctor Scotta nació el 27 de septiembre de 1950 en San Justo, Santa Fe, Argentina. Es hermano menor de Néstor Scotta (1948-2001), quien jugó para Unión, River Plate, Racing, Cali, entre otros. Surgió en Unión, donde debutó en Primera en 1970, año que completó 9 goles en 23 partidos. La temporada siguiente lo contrata San Lorenzo y ahí comienza su furia goleadora. El 11 de abril de 1971 se pone por primera vez la azulgrana en un 3 a 0 contra Atlanta. El preludio de un raid de festejos y bombazos. Ese año anota 20 goles en 34 presentaciones. Perseverancia, búsqueda empedernida del gol, desinterés por si algún remate suyo sacudía un nido de águilas, no muchas condiciones técnicas, pero qué importa, si lo que la gente lo que pedía eran goles.

Scotta no fue el futbolista más grande de estos pagos. Ni siquiera el mejor delantero que se recuerde. Pero consiguió, sin embargo, lo que muy pocos pueden: dejar una marca imborrable en la historia. En 1975 hizo 60 goles para San Lorenzo y marcó el récord absoluto de gritos en una sola temporada. Atrás había quedado el reinado de Arsenio Erico, el legendario paraguayo de Independiente, con sus 47 goles en el campeonato de 1938. Atrás quedaron también los cuestionamientos del público y el periodismo, los gritos de "burro" y los chistes eternos sobre sus limitados recursos técnicos: "Ahí, donde están las huellas de herradura, es la punta donde juega Scotta".

Ese glorioso 1975 le valió al "Gringo" la tapa de todas las revistas del país, la televisión, los personajes del año, la gloria. Todo de golpe y a fuerza de goles. Lo invitaron a las peñas de San Lorenzo en todas las provincias del país. En San Justo lo agasajaron con asado para doscientas personas y el intendente le entregó una plaqueta. Hasta lo llevaron a los programas políticos. "Fue un momento maravilloso", recuerda Héctor Scotta.

Gracias a los 60 goles llegaron la titularidad en la Selección, la vidriera internacional y la mudanza al fútbol europeo, al Sevilla FC de España. Después, la vuelta al país para jugar en Club Ferro Carril Oeste, otra vez en San Lorenzo, Boca y unos cuantos clubes del ascenso por los que paseó su madurez de goleador. Hasta que en 1989 decidió que por fin se merecía un descanso, y también los arqueros rivales.

Trayectoria

Notas y Fuentes de Referencias

www.clubsanlorenzo.com.ar

Enlaces externos

• Entrevista con Scotta en Clarín