- Ocupación británica de las islas Malvinas (1833)
-
La ocupación británica a las islas Malvinas fue una operación militar del Reino Unido que el 20 de diciembre de 1832 tomó el control de esas islas luego de que la corbeta estadounidense USS Lexington destruyera las defensas militares del asentamiento argentino de Puerto Soledad, en la isla homónima de ese archipiélago. A pesar de estar en relaciones de paz con la Confederación Argentina, el 3 de enero del año siguiente los británicos desalojaron a la guarnición argentina de 26 soldados y establecieron una guarnición militar. La población civil fue expulsada. Desde entonces, las islas han estado bajo dominio británico, excepto durante el breve período de la Guerra de Malvinas, en 1982.
Contenido
Invasión
En agosto de 1832 el primer ministro británico, lord Palmerston, por sugerencia del Almirantazgo Británico, ordenó enviar al contraalmirante Thomas Baker, jefe de la estación naval sudamericana, la orden de tomar el control sobre el archipiélago.[1]
El 20 de diciembre de 1832 arribó a Puerto Egmont la corbeta británica HMS Clio y su capitán John Onslow tomó posesión formal. La tripulación se abocó a reparar las ruinas del fuerte.[2] [3] Unos días más tarde la nave ancló frente a Puerto Soledad. El comandante Onslow informó a José María Pinedo que se disponía a tomar las islas, y le ordenó que arriara la bandera argentina al día siguiente:
Debo informaros que he recibido órdenes de S.E. el Comandante en Jefe de las fuerzas navales de S.M.B., estacionadas en América del Sur, para hacer efectivo el derecho de soberanía de S.M.B. sobre las Islas Malvinas.
Siendo mi intención izar mañana el pabellón de la Gran Bretaña en el territorio, os pido tengais a bien arriar el vuestro y retirar vuestras fuerzas con todos los objetos pertenecientes a vuestro gobierno.
A.S.E. el Comandante de las Fuerzas de Buenos Aires en Puerto Louis, Berkeley Sound[4]
Soy, Señor, vuestro humilde y muy obediente servidor.
J. OnslowPinedo estaba en inferioridad de condiciones: contaba con un buque (la goleta Sarandí) de capacidad bélica mucho menor, y la mayoría de su tripulación era de origen británico. La legislación británica contemplaba el delito de alta traición para los nativos de ese país que se alzaran contra la corona. La mayoría de los hombres dijo estar dispuestos a combatir, pero la resistencia fue insuficiente. De los 26 soldados 9 estaban encadenados por motín.
Los británicos desembarcaron en la mañana del 3 de enero de 1833, primero izaron su bandera y luego arriaron la argentina. Dos días después Pinedo abandonó las islas a bordo de la Sarandí llevando consigo a un grupo relativamente numeroso de colonos argentinos.[5]
Sublevación
En las islas crecía el descontento entre los criollos, en su mayoría gauchos y charrúas. Además de la natural exaltación patriótica motivada por la invasión británica, se les había prohibido viajar a Buenos Aires, y el capataz Jean Simon, apoyado por el ex mayordomo de Luis Vernet, Matthew Brisbane, y con la excusa de la ocupación británica, intentaba extenderles las ya pesadas tareas campestres, entre otros excesos de autoridad. Además seguían recibiendo por toda paga los vales firmados por el ex gobernador, que no eran ya aceptados por el nuevo responsable de almacenes, el irlandés William Dickson.[6]
En desacuerdo con la nueva situación, un grupo de ocho rioplatenses se sublevó el 26 de agosto de 1834 bajo el liderazgo del gaucho entrerriano Antonio Rivero (apodado Antook por los ingleses). Ellos eran: Juan Brasido, José María Luna, Luciano Flores, Manuel Godoy, Felipe Salazar, Manuel González y Pascual Latorre.
Estos rebeldes, además de su desventaja numérica, estaban pobremente armados con facones, boleadoras y viejos mosquetes, en contraste con las pistolas y fusiles con los que contaban sus oponentes, por lo que decidieron actuar por sorpresa. Tras un breve enfrentamiento en el que fueron muertos Brisbane, Dickson, Simon y otros dos colonos: Ventura Pasos y Antonio Vehingar,[7] los rebeldes tomaron la casa de la comandancia. Impidieron el izado de la bandera británica durante los siguientes cinco meses.[8] Según algunos relatos habrían izado el pabellón argentino.[9] [10] [11]
Confinaron a las familias de los colonos británicos en un islote, en espera de que las autoridades argentinas enviaran una fuerza naval para recuperar las islas. En octubre amarraron en Puerto Luis algunos barcos británicos, cuyas tripulaciones no intentaron enfrentarse a los argentinos.[12]
Dos meses después, el 9 de enero de 1834, arribaron a la isla Soledad dos naves del Reino Unido: la HMS Challenger, con el teniente Henry Smith a bordo, y la HMS Hopeful. Inmediatamente izaron la bandera británica. Smith asumió al día siguiente el título de oficial a cargo y ordenó la persecución de los sublevados: Luna fue el primero en rendirse. Los restantes, muy superados en número y armamento, optaron por retirarse al interior de la isla. Para comienzos de marzo la rebelión ya estaba controlada y el propio Rivero encarcelado.[13] Estudios posteriores dudan de estas versiones.
Se les inició un proceso en el buque HMS Spartiate, de la estación naval británica de América del Sur. Por motivos no bien documentados el almirante británico no convalidó el fallo y ordenó que Rivero y los suyos fueran liberados en Montevideo.[12] Según una versión de los hechos, el tribunal se declaró incompetente debido a que los crímenes no habían tenido lugar en el territorio de la corona y las víctimas eran empleados de Vernet.
Smith centró sus esfuerzos en restaurar el establecimiento de Puerto Luis, al que renombró Anson's Harbour. Fue sucedido por los tenientes Robert Lowcay en abril de 1838 y John Tyssen en diciembre de ese mismo año. Estas autoridades negaron a Vernet sus reiteradas solicitudes para volver a asentarse en las instalaciones de las que era dueño, con el argumento de que se trataba de un intruso. Finalmente, tras una visita a Londres, obtuvo una escasa compensación monetaria por la pérdida de sus caballos, pero se le negó una ampliación de la indemnización por los demás daños.
Bibliografía
- Ferns, Harry S. (1979). Gran Bretaña y Argentina en el siglo XIX. Buenos Aires: Solar/Hachette.
- Ferrer Vieyra, Enrique (1993). Segunda Cronología Legal Anotada sobre las Islas Malvinas (Falkland Islands), Edición Ampliada. Córdoba: Biffignandi.
- Goebel, Julius (1982). The Struggle for the Falkland Islands, A Study in Legal and Diplomatic History. New Heaven: Yale University Press.
- Destefani, Laurio H. (1982). Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur ante el conflicto con Gran Bretaña. Buenos Aires: Edipress.
- Tesler, Mario (1966): «La historia del Gaucho Rivero», en Buenos Aires: Así, nº 11 de octubre.
- Almeida, Juan Lucio (1966): «Antonio Rivero, el gaucho de las Malvinas», en Buenos Aires: Todo es Historia, nº 20.
- Campos, Ernesto M. (1966): «La rebelión del gaucho Antonio Rivero», en Muñoz Aspiri, José, Historia completa de las Malvinas. Buenos Aires: Oriente, 1966.
- Rosa, José María. El gaucho Antonio Rivero (El rebelde de Malvinas).
- Detalles de la bitácora del Clio, PRO Adm 53/258, y de AGN VII, Legajo 130, doc. 62.(Referente a la población civil que decidió permaneció en las Malvinas).
Referencias
- ↑ Ferns:235
- ↑ Ferrer Vieyra:156-158
- ↑ Goebel:455
- ↑ Ferrer Vieyra:159
- ↑ Destefani:90-91
- ↑ Tesler (1966):4
- ↑ Academia Nacional de la Historia. El episodio ocurrido en Puerto de la Soledad de Malvinas el 26 de agosto de 1833. Testimonios documentales. Serie documental. Tomo III. Buenos Aires (1967)
- ↑ Tesler (1971):4
- ↑ Almeida:8-37
- ↑ Campos:47-51
- ↑ Tesler (1966):2-5
- ↑ a b Rosa
- ↑ Tesler (1966):5
Categorías:- Historia de las islas Malvinas
- Argentina en 1833
- Reino Unido en 1833
- Relaciones Argentina-Reino Unido
Wikimedia foundation. 2010.