- Fecundidad
-
Fecundidad es la realización efectiva de la fertilidad, es decir, la abundancia de la reproducción biológica en cualquier especie biológica o incluso en la tierra misma.
Contenido
Conceptos
Concepto biológico
En biología, fecundidad es el potencial reproductivo de un organismo o población, medido por el número de gametos, semillas o porpágulas asexuales. La fecundidad es controlada tanto por la genética como por el ambiente, y es el principal indicador de fitness (adaptación en evolucionismo). El término fecundación se utiliza como sinónimo de fertilización.
En ecología de poblaciones, la fecundidad es un concepto importante y bien estudiado. Puede incrementarse o decrecer dentro de una población según ciertos factores de regulación. Por ejemplo, en malas épocas producidas por carencia de comida, la fecundidad juvenil, e incluso la de los adultos, muestra tendencia a decrecer. En los ungulados, su aumento muestra relación con los cambios climáticos.
Concepto demográfico
Como concepto demográfico, se mide por el número medio de hijos por mujer (índice de fecundidad o tasa de fecundidad), o mediante la tasa de fecundidad general (número de nacimientos por cada mil mujeres en edad fértil en un año). No debe confundirse con la natalidad, que es el total de nacidos vivos en un año.
Es característica del Antiguo Régimen demográfico una fecundidad muy alta, por encima de cuatro hijos por mujer, y lo mismo ocurrió durante la transición demográfica, y actualmente en los países menos desarrollados, que no la han completado.
Fecundidad de reemplazo
Desde la teoría de la transición demográfica se considera que el régimen demográfico moderno reduce la fecundidad y se considera que la cifra que equilibra la población entre generaciones o fecundidad de reemplazo debe ser de 2,1 hijos por mujer de promedio, con lo cual se consiguiría una pirámide de población estable, o incluso por debajo de esa cifra, con lo que las pirámides de población -apoyadas en estudios transversales- se convierten en regresivas.
Desde la teoría de la revolución reproductiva se considera que esa cifra de fecundidad de reemplazo mínima se construye entendiendo que cada mujer debe reproducirse a sí misma, además de a su pareja, y, además, en parte, por eso la décima, a quienes no tienen hijos. Para MacInnes y Pérez Díaz, aunque se haya utilizado con profusión y servido a políticas natalistas y proclamas alarmistas este nivel de fecundidad es falaz, basicamente porque es fruto de una utilización errónea del análisis de los fenómenos de la reproducción humana y sus consecuencias en la población.[1]
Reproducción como balance entre fecundidad y mortalidad
Para la teoría de la revolución reproductiva la reproducción de las poblaciones depende de la fecundidad y de la mortalidad. Si en una población apenas se llega a las edades reproductivas la fecundidad de reemplazo del 2,1 es insuficiente. Y, una población que supera con creces las edades reproductivas puede crecer aumentar sobremanera si se mantiene esa tasa de 2,1 y, sobre todo, mantenerse en el tiempo con fecundidades inferiores al 2,1 hijos por mujer.[2] [1]
Políticas demográficas
Las políticas demográficas son las que intentan incidir sobre la fecundidad, estimulando el número de hijos por familia considerado idóneo por el Estado. Existen dos tipos:
- las políticas antinatalistas, que fomentan desde los años 1970 (sobre todo tras el informe del Club de Roma sobre los límites del crecimiento) el control de la natalidad en los países subdesarrollados. La más radical es la política de un sólo hijo en la República Popular China, que se ha venido sosteniendo durante varias décadas, con consecuencias demográficas profundas.
- las políticas pronatalistas, que fomentan las familias numerosas. Surgieron en Europa tras la Primera Guerra Mundial, al detectarse el fenómeno demográfico de la disminución de la natalidad en un periodo bélico, y se hicieron parte de la ideología de los régimenes fascistas. Un planteamiento similar ocurrió en la España del franquismo, donde coincidió además con la orientación nacionalcatólica de ese régimen (la Iglesia Católica condena el uso de métodos anticonceptivos, aunque promueve una paternidad responsable, desde la encíclica de Pablo VI Humanae Vitae -véase también Moral sexual católica-). En la actualidad es la política demográfica de los países desarrollados, y sobre todo de Rusia y algunos antiguos países socialistas del Este de Europa, con tasas negativas de crecimiento natural.
Fecundidad en España
España ha pasado de cifras de tres hijos por mujer, a finales del franquismo, hasta 1,2 hijos por mujer a finales del siglo XX. En los primeros años del siglo XXI se viene produciendo una recuperación de la fecundidad, debido más al comportamiento más natalista de los inmigrantes que a las políticas de protección a la familia. No obstante, no se alcanzan las cifras que permitirían la sustitución de generaciones.
Referencias
- ↑ a b The reproductive revolution,John MacInnes y Julio Pérez Díaz, Sociological Review, 57
- ↑ Fecundidad de reemplazo, 4/7/2010
Véase también
Categorías:- Indicadores demográficos
- Reproducción
Wikimedia foundation. 2010.