Toxin

Toxin (traducido a veces como Toxina), es un antiheroe de Marvel Comics, que resulta de la fusión de Patrick Mulligan, un policía neoyorkino, y de un simbionte descendiente de Carnage, la cual se produjo en "Venom/Carnage #1" (2004). Pertenece, por lo tanto, al linaje de Venom, el extraterrestre que fuera encontrado por Spider-Man en las Secret Wars (1984-85). Entre junio y noviembre de 2005, Toxin ha protagonizado la serie limitada homónima, con el título de "The Devil You Know", obra de Peter Miligan y Darick Robertson, que en algunos países (como España) ha sido recopilada en el formato de novela gráfica.

Biografía ficticia

En una lucha sin precedentes con su padre Venom, Carnage da a luz a un nuevo simbiote que toma de huésped a un policía llamado Patrick Mulligan. Aunque Carnage no lo reconoce como hijo e intenta matarlo, su abuelo Venom lo bautiza como Toxin. Patrick, por su parte, teme no poder controlar el simbionte que lleva en su interior, y decide abandonar el cuerpo de Policía y a su familia: Su padre Jim, su esposa Gina y su bebé.

Sigue cultivando, sin embargo, la amistad de Paul Meadows, un viejo compañero del cuerpo, al que pronto confiesa su secreto, y cuando se produce la fuga de varios supervillanos de la Penitenciaría de Alta Seguridad de la isla de Ryker (relatada en Los Nuevos Vengadores y Spider-Man: Breakout), decide usar a su simbiote para atraparlos. Así sucede con El rey cobra, La respuesta, Destructor y Martinete, pero la detención de Razor Fist, encargada por el mismísimo Spider-Man, requiere de varios intentos. Este villano, que perdió las manos en un accidente y prefirió sustituirlas por cuchillos en vez de prótesis, crea un culto subterráneo en torno suya para aterrorizar a la ciudad dirigiendo a los niños contra sus padres y, tras conseguir escapar de Toxin, rapta y tortura a su amigo Paul Meadows para sonsacarle la identidad del nuevo héroe. Con esta información, mata al padre de Patrick.

Mientras todo esto sucede, Patrick trata de controlar y entrar en razón a su simbionte, a quién considera un niño incapaz de distinguir el bien del mal y por lo tanto, peligroso. Pacta con él, sin embargo, que le preste la forma de otra persona para así poder seguir manteniendo el contacto con su mujer y su hijo a cambio de dejarle tomar el control durante dos horas al día. En su enfrentamiento final con Razor Fist, oportunamente vigilado por su mentor Spider-Man, Toxin es capaz de reprimir sus impulsos de venganza, y detiene al villano sin derramamiento de sangre. Movido por este éxito, reemprende la relación con su mujer, dispuesto a contarle su secreto.

Aspecto y habilidades

El traje de Toxin es rojo (hasta el torso) y azul (desde el torso hasta abajo), sus ojos son más similares a los de Spider-Man. Cuando no está enojado o luchando, Toxin es esbelto, aunque con musculatura bien definida, muy similar al aspecto de Spider-Man. En caso contrario, crece a una forma más grande y fuerte, con colmillos afilados y garras largas y curvas.

Además de fuerza, agilidad y resistencia superhumanas y la posibilidad de trepar por las paredes, Toxin posee las habilidades especiales 'únicas' de los dos simbiontes que lo precedieron: Puede adoptar la apariencia de una persona completamente diferente y tiene telaraña ilimitada, que en su caso toma la forma de una cadena de acero. Toxin también parece tener algún tipo de habilidad de curación acelerada al igual que sus predecesores, evidenciada porque las heridas que contrajo en su primera batalla con Razor Fist se curaron a una velocidad notable. A diferencia de los otros simbiontes, Toxin puede rastrear a cualquier persona, no únicamente simbiontes, siempre y cuando tenga algo con que comenzar (como un resto de ropa) dentro de la ciudad de Nueva York y posiblemente aún más lejos. Adicionalmente, parece tener una resistencia a las ondas sónicas y al calor mayor que la que tiene Carnage, aunque esto no significa que Toxin sea más resistente a impulsos violentos: puede dejarse llevar por ellos en su lucha contra el crimen, aún en delitos menores, y ha cometido varios hurtos.

Distinguiéndose de los otros simbiontes, esta tercera generación no intenta controlar la mente de su anfitrión humano. En lugar de eso, el simbionte piensa y comunica sus opiniones a Patrick Mulligan (véase el comic-book Cut to the Chase), estableciéndose una discusión entre ellos, de la que el humano siempre sale triunfante, aunque a veces tenga que recurrir a chantajes y amenazas como la de suicidarse, lo que supondría la muerte también del simbionte.

Enlaces externos

• Reseña en cómic digital por Antonio Nuñez.