- Sincronía de labios
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La sincronía de labios (más conocida en idioma inglés como lip sync o playback) es una simulación que normalmente se da en la televisión, en la que se escenifica un concierto de música en directo, pero en realidad el sonido es una grabación y los músicos sólo están interpretando un papel: "tocar la guitarra", "mover la boca", etc.
La razón más habitual de este truco es que el recinto donde se actúa no tiene las condiciones de sonido o instrumentos musicales para poder interpretar la música en vivo. Esto es casi general en espectáculos televisivos con múltiples cantantes, donde los supuestos músicos son figurantes puestos por el programa para arropar al cantante y que simulan tocar los instrumentos.
En otros casos, el cantante o grupo musical no está preparado para interpretar la música en vivo, bien porque se trata de un repertorio nuevo aún por dominar (que comúnmente se presenta en shows promocionales) o bien (en casos ya graves) porque el cantante realmente no es quien graba los discos, y es empleado como imagen.
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Playback en conciertos y películas
Dejando aparte los espectáculos en televisión, que usualmente son todos en playback (salvo que se indique lo contrario), el uso de música pregrabada es bastante común en conciertos de música tecno elaborada con elementos informáticos, como los de Jean-Michel Jarre, aunque en muchos casos no se trata de un playback total, sino que se combinan pistas o efectos sonoros pregrabados con otros que se interpretan en vivo.
Otro caso de playback se da en ciertas canciones concretas que son difíciles de interpretar en vivo, porque van acompañadas de una coreografía enérgica. El cantante se fatiga bailando y no puede cantar correctamente. Este caso se daba en algunas giras musicales de Britney Spears, que hasta el día de hoy y desde 2001 canta con playback en todas sus presentaciones y Madonna, la que junto a una mayoría de show con voz real, intercala voces previamente grabadas. Este truco puede pasar desapercibido, porque los músicos sí tocan en vivo y su sonido se combina con la voz pregrabada. En el caso de Madonna, las críticas que recibió durante su gira "The Blond Ambition Tour 1990" le llevaron a desechar dicho truco.
También el playback se puede encontrar en cantantes excepcionalmente dotados como Mariah Carey, Whitney Houston o Celine Dion, sin embargo son debidos a que el cantar en vivo para un show televisivo tiene un precio mayor que el cantar un playback. O por el simple hecho de que el cantante tiene problemas temporales con su voz, como un resfriado.
En el caso del cine musical, salvo contadas ocasiones, los actores no cantan en vivo al rodar sus escenas, sino que graban previamente las canciones y luego hacen playback al filmar. Esto es inevitable en las adaptaciones de musicales donde las canciones suponen casi el 100% de los diálogos y resulta imposible combinar canción y actuación dramática en un rodaje, más si es en exteriores. El playback se usa legítimamente, por ello, tanto en películas con música moderna como en adaptaciones de óperas. Así se hizo, por ejemplo, en los rodajes de las películas musicales Evita y Mamma Mia! y anteriormente en la adaptación cinematográfica de Carmen con Plácido Domingo.
En muchas películas musicales antiguas, el playback no se debía sólo a cuestiones técnicas sino que además encubría que el actor no cantaba. Así, en My Fair Lady la voz de Audrey Hepburn fue reemplazada por la de una corista profesional, al igual que se hizo con la voz de Natalie Wood en West Side Story. Audrey Hepburn hizo (o consiguió) una excepción con la famosa canción Moon River, que sí interpretó con su voz real en Desayuno con diamantes.
Una revista de los Estados Unidos informó que hicieron una investigación e informaron que los artistas de Disney hacen sincronía de labios, como se creía.
Cantantes de playback en cine de Asia
En la industria fílmica de Asia, como Bollywood y otros cines, el término cantante de playback (playback singer), se refiere al cantante que graba las canciones que luego son utilizadas por un actor del filme.[1]
Grupos ficticios
En las décadas de 1980 y 1990, el uso habitual de playback y el creciente protagonismo del video musical dieron pie a una controvertida fórmula: grabar música con instrumentistas y vocalistas de estudio, desconocidos para el público, y darla a conocer mediante modelos y bailarines de imagen atractiva. Estos figurantes conformaban grupos musicales estables, que actuaban en televisión y en giras promocionales como un grupo convencional, con la diferencia de que nunca podían interpretar en vivo.
El caso más famoso de playback engañoso es el de Milli Vanilli. El productor discográfico Frank Farian, antiguo creador de Boney M, quería formar un dúo musical y para ello primero escogió a los miembros por su buena apariencia (dos bailarines de Sabrina Salerno) y grabó las canciones con coristas de estudio, con buenas voces pero que eran poco atractivos a efectos de marketing. El truco se prolongó por cierto tiempo, de tal modo que dicho dúo recibió importantes premios, hasta que varios fallos de sonido develaron el secreto.
Otro caso de grupo ficticio es C+C Music Factory, grupo realmente formado por dos productores de música de baile, Clivillé y Coles, quienes cedían su protagonismo en las actuaciones a varias modelos y raperos.
En Europa, el grupo Black Box alcanzó gran éxito con el protagonismo de una exuberante mulata de voz enérgica que cantaba música house en inglés, aunque se trataba de una producción de origen italiano y dicha mujer era una transexual que no cantaba.
Ya en España, un caso muy conocido es el del grupo español Loco Mía, quienes nunca cantaron en sus discos ya que no eran cantantes de profesión: se trataba más de un grupo visual que musical. Al único que se le reconoce participar en el disco LocoVox es a Francesc Pícas; los demás miembros del grupo, al carecer de técnicas de canto, fueron doblados y, al salir al escenario, su función era la de mover los labios haciendo creer que ellos cantaban, mientras entretenían con sus abanicos. La voz que se escucha en su más conocido tema Loco Mía no pertenece a ninguno de los integrantes de esa época, sino a Benjamin Barrington.
Versiones instrumentales
Vale la pena aclarar -como comentario adicional a lo ya dicho anteriormente- que algunos cantantes y grupos musicales publican en ciertas ocasiones, de algunas de sus canciones (las publicadas en el álbum oficial), versiones instrumentales. Es decir, se trata de la misma música que acompaña a la canción y que está incluida en el álbum, pero sin la voz. Esto es técnicamente muy fácil, ya que casi toda la música pop se graba mediante varias pistas de sonido, y la voz se graba aparte, por lo que se puede extraer de la grabación sin problemas. Esto no era posible en grabaciones antiguas, como las de Frank Sinatra, quien acostumbraba a grabar sus canciones con la orquesta, interpretando todos al unísono.
Las versiones instrumentales se solían incluir en el lado B (o Tracks adicionales) de los discos singles y maxi-singles, bien sea en vinilo o en formato de CD. Raramente son incluidas en el álbum oficial.
Referencias
Categoría:- Técnicas de interpretación musical
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