- Guerra ruso-persa (1826-1828)
-
Guerra ruso-persa 1826-28 Fecha 1826–1828 Lugar Sur del Cáucaso, norte de Irán Causas Guerra de invasión Resultado Victoria rusa, tratado de Turkmenchay. Cambios territoriales Anexión de los kanatos de Najichevan y Ereván al Imperio ruso. Beligerantes Imperio Ruso Imperio persa Comandantes Alekséi Yermólov, Valerián Madátov,
Iván PaskévichFath-Ali Shah Kayar, Abbas Mirza Fuerzas en combate ca. 8.000 ca 35.000-50.000 La guerra ruso-persa de 1826-1828 fue el último conflicto militar importante entre el Imperio ruso y el Imperio persa.
Tras el tratado de Gulistán que puso fin a la guerra ruso-persa en 1813, la paz reinó entre ambos países en el Cáucaso durante trece años. Sin embargo, Fath-Ali Shah Kayar, constantemente necesitado de ayudas extranjeras, confió en el consejo de los asesores del Reino Unido, que le presionaban para reconquistar los territorios perdidos ante Rusia, prometiendo su apoyo en la acción militar. El asunto se decidió cuando el partido belicoso de Abbas Mirza prevaleció en Teheran y el embajador ruso Aleksandr Ménshikov fue puesto bajo arresto domiciliario.
Contenido
Campaña de 1826
Aunque no hubo una declaración formal de guerra, un ejército de 35.000 hombres, liderados por Abbas Mirza, cruzaron la frontera el 16 de julio e invadieron los kanatos de Talysh y Karabaj. Los kanes cambiaron rápidamente de bando, rindiendo sus principales ciudades -Lenkoran, Quba, Bakú- a los persas. Alekséi Yermólov, el gobernador general ruso del Cáucaso, sintiendo que no tenía suficientes recursos para contrarrestar la invasión, no quiso presentar batalla y ordenó que Ganja, la ciudad más poblada del Cáucaso meridional, fuera abandonada. En Shusha, una pequeña guarnición rusa consiguó aguantar hasta que el 5 de septiembre los refuerzos del general Valerián Madátov llegaron en su socorro.
Madátov derrotó a los persas a orillas del río Shamjor y recuperó Ganja el 5 de septiembre. Al conocer las noticias, Abbas MIrza levantó el asedio de Shusha y marchó hacia Ganja. A las tropas de Madátov se unieron las del Iván Paskévich (el sustituto de Yermólov) para formar una tropa de 8.000 soldados bajo el mando de Paskévich. Cerca de Ganja cayeron sobre los persas y les obligaron a retirarse más allá del río Araks de vuelta a Persia. La guerra, no obstante, duraría año y medio más.
Campaña de 1827
La llegada de la estación invernal obligó a suspender las hostilidades hasta mayo de 1827 cuando Paskévich avanzó hacia Ereván, tomando Echmiadzin, Najichevan y Abbasabad en su camino. El escenario principal de las operaciones pasó entonces a ser Armenia oriental, cuya capital, Ereván fue tomada tras seis días de asedio el 1 de octubre. Catorce días después, el general Eristov entraba en Tabriz, forzando al shah a buscar la paz.
El comienzo de la guerra ruso turca (1828-1829) reavivó las esperanzas persas, afectando a las negociaciones de paz, que fueron conducidas por Aleksandr Griboyédov, entre otros. En enero de 1828 un destacamento ruso alcanzó las orillas del lago Urmia, con lo que el shah entró en pánico y ordenó a Abbas Mirza firmar rápidamente el tratado de Turkmenchay el 2 de febrero de 1828, lo que concluyó la guerra.
Consecuencias
Según los términos del tratado, los kanatos de Ereván y Najichevan pasaron a Rusia. El shah prometió pagar una indemnización de 20.000.000 de rublos de plata y permitió a sus súbditos armenios emigrar libremente a territorio ruso. Lo que era más importante aún es que el shah otorgó el derecho exclusivo para mantener una armada en el mar Caspio y acordó que los mercaderes rusos podrían comerciar allá donde quisieran en Persia.
A corto término, el tratado minó la posición dominante del Imperio británico en Persia y marcó una nueva etapa en El Gran Juego entre los imperios. A largo plazo, el tratado aseguraba la dependencia del Cáucaso de Rusia, haciendo posible la emergencia final de los estados modernos de Armenia y Azerbayán dentro de los territorios conquistados a Persia durante la guerra.
Enlaces externos y referencias
Wikimedia foundation. 2010.