Juan José Diaz de Espada y Fernández de Landa
Obispo Espada
Nacimiento	20 de abril de 1723 España, Álava, Calahorra
Fallecimiento	13 de agosto de 1832 La Habana, Cuba
Nacionalidad	Española
Ocupación	Obispo
Padres	Don Andrés Díaz de Espada y Doña María Fernândez de Landa.

Obispo Espada cuyo nombre completo era Juan José Diaz de Espada y Fernández de Landa, nació el 20 de abril de 1756 en Arróyabe, Álava, Calahorra, España, y murió el 13 de agosto de 1832 en La Habana, fue obispo católico de La Habana desde el 11 de agosto de 1800 hasta su muerte.

Educación

Estudió en la Universidad de Salamanca, donde se doctoró en teología. Estudió también en los Colegios de Santa María de los Ángeles y en el Mayor de San Bartolomé.

Sacerdocio

Fue ordenado sacerdote en 1782 por el Obispo de Segovia. Fue Rector del Colegio Mayor de San Bartolomé, abogado de los Consejos Reales, diputado de la Universidad. También fue vicesecretario y fiscal general del Obispado de Plasencia, capellán de la Armada, promotor fiscal del Santo Oficio. En 1792 fue nombrado canónigo y profesor de la Colegiata de Villafranca del Vierzo. En 1798 pasó a Mallorca y más tarde fue electo para el provisorato de Chiapas.

Episcopado

Elegido obispo de La Habana el 11 de agosto de 1800. El 15 de diciembre lo participó al cabildo habanero que tomó nota en sesión de 7 de julio de 1801. Llegó a La Habana el 25 de febrero de 1802. Fue consagrado en la Catedral de La Habana el 28 de febrero siguiente, por Monseñor Luis Ignacio María Peñalver y Cárdenas, arzobispo designado de Guatemala, asistido por Cristóbal de Palacio, deán del cabildo habanero, y por Juan Crisótomo Correoso, arcediano del mismo cabildo. Fue apadrinado por el Capitán General.

Las huellas de su labor social y cultural quedaron grabadas de forma permanente, fue miembro de la Sociedad Patriótica, en la cual un año después de su entrada a ella asume su presidencia. Disciplinó la vida del clero e ilustró a los sacerdotes. Realizó una visita pastoral a su diócesis que se extendía hasta Camagüey. Realizó un sínodo diocesano. Fue parte junto al doctor Tomás Romay de la campaña a favor de la vacunación contra la viruela, fundó el cementerio de Espada, prohibiendo los enterramientos en las iglesias. Fundó una casa de dementes. Conmemoró en el Templete la primera misa dicha en La Habana. Fue mecenas de artes y cultura.

El Obispo de Espada, siempre pensando en beneficio de los cubanos, en una carta pastoral pidió clemencia para los liberales ante la restauración del absolutismo. Por esa razón, la Corona dictó la orden de que fuera conducido a España, lo que no pudo efectuarse por encontrarse enfermo el clérigo. El rey suspendió temporalmente la sanción, cuya anulación definitiva fue solicitada después por Espada. La Corona aceptó, pero el Vaticano no.

Muerte

Murió de una apoplegía a las dos de la tarde del lunes 13 de agosto de 1832. Fue expuesto el día 16 en la catedral y el 17 se le llevó en hombros por las calles de Mercaderes y Obispo hasta el Palacio del Gobernador, retornando luego a la catedral. Allí fueron celebrados la misa y los oficios fúnebres por el Padre Bernardo de O'Gaban. Fue sepultado en la bóveda primera del lado del Evangelio en el primer patio del cementerio de Espada que él fundara, a la sombra de un almendro que él mismo había plantado. No hizo testamento. El 21 de diciembre de 1880 fueron examinados sus restos y el 1 de febrero de 1881 fueron trasladados a la catedral depositándoseles en la Capilla de Nuestra Señora de Loreto. Se celebraron exequias el día 2 y entonces fueron trasladados al nuevo cementerio Cristóbal Colón.