- Ramiro I de Asturias
-
Ramiro I de Asturias
Ramiro I Rey de Asturias
Estatua en Madrid (L.S. Carmona, 1750–1753).Reinado 842 – 1 de febrero de 850 Nacimiento c. 790
OviedoFallecimiento 1 de febrero de 850
OviedoEntierro Panteón de Reyes. Capilla de Nuestra Sra. del Rey Casto. Catedral de Oviedo Predecesor Alfonso II el Casto de Asturias Sucesor Ordoño I de Asturias Dinastía Dinastía Astur-Leonesa Padre Bermudo I el Diácono de Asturias Ramiro I de Asturias ( c. 790 – 1 de febrero de 850) fue el 10º rey de Asturias (842–850). Hijo de Bermudo I el Diácono y sucesor en el trono de Alfonso II el Casto. Fue coetáneo de Abd-al-Rahman o Abderramán II, emir omeya de Córdoba.
Contenido
Biografía
Acceso al trono
Fue probablemente elegido por Alfonso II el Casto como sucesor suyo[1] al no tener descendencia. En el momento de la muerte del rey, Ramiro I se encontraba fuera de Asturias, concretamente en Bardulia, en tierras que luego serían castellanas, para casarse. Esta ausencia fue aprovechada por el comes palatii y cuñado del rey, Nepociano, para hacerse ungir rey, apoyado por astures y vascones, de tradicional fidelidad al Rey Casto. Ramiro I hubo de buscar apoyo en Galicia, donde reunió un ejército y avanzó hacia Oviedo. Nepociano esperó a Ramiro I en Cornellana, sobre el río Narcea. No obstante las tropas de Nepociano se negaron a luchar, y éste tuvo que huir. Fue perseguido, capturado por los condes Scipion y Sonna, cegado y encerrado en un convento.
Ataques normandos
Al poco de sentarse en el trono llegaron noticias de los piratas normandos que estaban depredando toda la costa atlántica de Francia y que ahora llegaban a las costas cantábricas de su reino. Los normandos buscaban ríos navegables y ciudades grandes que asaltar y obtener gran botín, cosas esas que faltaban en Asturias, por ello las crónicas sólo reflejan dos pequeños ataques[1] en Gijón y La Coruña en 844, donde además se las tuvieron que ver con las tropas enviadas por Ramiro I. Estos mismos normandos que tan poco éxito habían tenido en Asturias, atacaron un mes después Lisboa y más tarde Cádiz y Sevilla, ciudades que tomaron y saquearon antes de avanzar por el interior y amenazar Córdoba. Abd-al-Rahman II se vio obligado a un gran esfuerzo para rechazarlos y recuperar Cádiz y Sevilla.
Intento de repoblación de León
Estos hechos tuvieron una gran influencia en Asturias, ya que Abd-al-Rahman II, teniendo además que hacer frente a sus propios problemas internos causados por las rebeliones de Musa-ibn-Musa de la familia de los Banu-Qasi, no pudo pensar en atacarla y Ramiro I pudo disfrutar de unos años de paz exterior que aprovechó para repoblar León.
No obstante, duró poco el intento. Abd-al-Rahman II, una vez sofocadas invasiones y rebeliones, envió en 846 un ejército a las órdenes de su hijo Muhammad y obligó a los cristianos a evacuar la ciudad.
Problemas interiores
En contraposición a la relativa calma exterior, los problemas internos se multiplicaron. La problemática accesión al trono hizo que las rebeliones de nobles descontentos fuesen más habituales. La Crónica Albeldense recoge dos: del procer Piniolo y del comes palatii Aldroito. En ambas el Ramiro I reaccionó con dureza condenando a muerte al primero, junto con sus siete hijos, y cegando al segundo.[1]
Asimismo se empleó con dureza contra ladrones, cuyo numero aumentó mucho durante este reinado lleno de rebeliones internas, y magos, seguidores de cultos todavía paganos muy enraizados en las poblaciones autóctonas y aisladas.
Todo ello hizo que la Crónica Albeldense le definiese como Uirga iustitiae, Vara de la Justicia.
Fallecimiento y sucesión
En su palacio de Santa María del Naranco falleció Ramiro I en 850. Fue enterrado en Oviedo en el Panteón de Reyes, que en su día estaba en la basílica de Santa María y hoy día en la capilla del Nuestra Señora del Rey Casto de la Catedral de Oviedo, construida en el lugar de la primera en el siglo XVIII.
Fue sucedido en el trono por su hijo Ordoño I empezando a afianzarse a partir entonces el sistema de sucesión patrilineal dentro de su propia familia, aunque no siempre de padres a hijos, cosa que no se generalizó hasta un siglo más tarde, frente al más o menos electivo dentro de las dos familias reinantes que había regido hasta entonces.[2]
Matrimonio y descendencia
Las fuentes escritas no son claras en este aspecto, pero se puede hacer la siguiente afiliación:
Primer matrimonio: para unos autores casó con Paterna. Para otros, con una persona de la que se desconoce su nombre. De esa unión nació:
- Ordoño I, rey de Asturias.
Segundo matrimonio: Para unos autores, casó con Urraca. Para otros, sería una mujer de nombre Paterna Urraca o, simplemente, Paterna; en cuyo caso, se trataría de la misma nombrada para el primer matrimonio. Lo que sí parece estar claro es que era de origen castellano. Fueron sus hijos:
- García.
- Rodrigo. Primer Conde de Castilla.
- Aldonza.
La ficción de la batalla de Clavijo
Es fama que Ramiro I combatió en Clavijo a los árabes y recibió durante la misma la ayuda de Santiago Apóstol montado en un caballo blanco.
No obstante, no sólo no hay ninguna noticia de la misma en las crónicas cristianas y árabes, sino que es conocido que es una invención del siglo XII justificar el impuesto llamado Voto de Santiago, recaudado por la iglesia compostelana.
Arquitectura ramirense
El reinado de Ramiro I nos ha dejado las más acabadas muestras arquitectónicas del llamado arte prerrománico asturiano. En las faldas meridionales del Monte Naranco, a la vista de la ciudad de Oviedo, Ramiro I ordenó construir un palacio, Santa María del Naranco, una gran iglesia, San Miguel de Lillo o Liño, la cual sufrió un derrumbe en el siglo XIII y sólo ha llegado hasta hoy un tercio del edificio original y varias dependencias de servicio, hoy desaparecidas.
El orgullo de los contemporáneos de Ramiro I eran las bóvedas de cañón de los edificios, de ligera piedra toba, que eran una novedad no sólo respecto a las construcciones anteriores, sino con las que en ese momento se construían en Europa y en la España musulmana, de madera.
También pertenece a esta época la iglesia de Santa Cristina de Lena, situada a unos 30 km de Oviedo en las cercanías de la población de Pola de Lena.
Todos estos edificios están declarados por la Unesco Patrimonio de la Humanidad.
Predecesor:
Alfonso II el CastoRey de Asturias
842 – 850Sucesor:
Ordoño ILibros
La novela histórica Los clamores de la tierra del escritor asturiano Fulgencio Argüelles está ambientada en la época de Ramiro I, comienza con la condena de Nepociano y el hilo conductor es la lucha de Ramiro I contra los cultos paganos y mágicos que subsistían todavía en el reino.
Bibliografía
- Sánchez Albornoz, Claudio (1985). Orígenes de la nación española. El reino de Asturias. Editorial SARPE. ISBN 84-7291-739-8.
- Asturianos universales 5: Armando Palacio Valdés, Gaspar Melchor de Jovellanos, Francisco Martínez Marina, Rodrigo Álvarez de Asturias, Ramiro I, Ediciones Páramo, 1996. ISBN 84-87253-24-5.
- Argüelles, Fulgencio (1996). Los clamores de la tierra. Alfaguara. ISBN 84-204-8184-X.
Referencias
- ↑ a b c Sánchez Albornoz, Claudio. Orígenes de la nación española. El reino de Asturias. Capítulo VI: «Tras cuarenta años de paz interior».
- ↑ José Antonio Escudero (ed.), Javier Alvarado Planas, José Mª de Francisco Olmos (2008). El Rey. Historia de la monarquía. Vol. 1. Ed. Planeta. ISBN 978-84-08-07696-4. p. 25.
Véase también
- Tabla cronológica de reinos de España
Enlaces externos
- Wikimedia Commons alberga contenido multimedia sobre Ramiro I de Asturias.
Categoría: Reyes de Asturias
Wikimedia foundation. 2010.