Francisco Zubillaga y Reillo (La Habana 1880- Madrid 1936) fue un militar español nacido en Cuba.

Biografía

Se educó en el colegio de Belén de La Habana, y allí estudió el bachillerato, terminado el cual, vino a España cuando tenía quince años, e ingresó en la Academia de Infantería de Toledo el 30 de junio de 1896. En 1897, por su aplicación y comportamiento, fue promovido a segundo teniente. Con los empleos de teniente y capitán estuvo en las guarniciones de Madrid, Alcalá, Baleares, Leganés, Gerona, Figueras, Pamplona y Segovia. Siendo capitán del Batallón de Cazadores de Barbastro, se incorporó a las fuerzas de Melilla cuando la guerra de Marruecos de 1909, resultando gravísimamente herido, el 27 de julio, en la sangrienta y memorable acción del Barranco del lobo, y por méritos de guerra, a la que volvió cuando apenas convalecía, obtuvo los ascensos a comandante y a teniente coronel (19 de diciembre de 1913), distinguiéndose en numerosas acciones más, a las órdenes del general Primo de Rivera. Era teniente coronel del Regimiento del Rey nº1, cuando su batallón fue destinado a Asturias con ocasión de la huelga de 1917, designándosele comandante militar y jefe de la zona minera de Langreo, y comandante militar de Gijón, en cuyo cargo permaneció hasta febrero de 1918. en agosto de 1918 fue ascendido a coronel y destinado al Regimiento del Príncipe, de guarnición en Oviedo, donde estuvo hasta 1922, en que pasó a mandar el Regimiento León, nº38, de guarnición en Madrid. Ascendido a general de brigada en 1923, y producido en dicho año el golpe de Estado de Primo de Rivera, como gobernador militar de Asturias hubo de asumir también el gobierno civil de la provincia, cargo del que cesó el 16 de diciembre de 1925 para proseguir en sus funciones de gobernador militar. En la citada fecha decía un periódico ovetense: "Dos años ha gobernado en Asturias el Sr. Zubillaga, con facultades omnímodas, vinculando en su persona la suprema jerarquía de gobierno, y durante ellos ha sabido administrar tan discretamente estos poderes casi discrecionales, que al término de la jornada sólo cosecha gratitudes".

Por Real decreto de 23 de enero de 1927 fue nombrado Gentilhombre de Cámara con ejercicio, siéndole regaladas en Oviedo por suscripción popular las insignias correspondientes a esta real distinción. El 26 de febrero de 1927 fue declarado hijo adoptivo de Oviedo. Numerosas villas asturianas le honraron con nombramientos análogos, o bien dando su nombre a alguna calle. Esto último hizo asimismo el ayuntamiento de Oviedo el 2 de diciembre de 1927. Ascendido a general de división en 1928, el 3 de diciembre asumió de nuevo el gobierno civil de Asturias, que desempeñó hasta la caída de la dictadura.

Durante su mandato, se llevó a cabo la reforma del palacio de la Audiencia, la construcción del cuartel de la Guardia Civil en Pumarín; la carretera interprovincial por el puerto de San Isidro; la reconstrucción del convento de San Vicente, destinado a delegación de Hacienda; la creación y funcionamiento del Tribunal tutelar para niños delincuentes, con la Casa de Observación y Reformatorio, así como la mejora de muchas carreteras y puertos.

Al cesar en el gobierno de Asturias, fue destinado al militar de la provincia de Murcia y plaza de Cartagena, en cuyo cargo le cupo el honor de despedir al rey Alfonso XIII en la madrugada del 15 de abril de 1931. Proclamada la República y retirado del ejército mediante la Ley de Azaña, fijó su residencia en Madrid. Al estallar la Guerra Civil no quiso ocultarse, y en los primeros días fue detenido en su domicilio y conducido a la cárcel de Porlier, en la que permaneció hasta que en la madrugada del 8 al 9 de diciembre de 1936 fue asesinado y sepultado en una fosa común del cementerio de la Almudena.