- Pedro Madruga
-
Pedro Madruga
Pedro Álvarez de Soutomaior, (apodado Pedro Madruga) (Pontevedra, ¿año? - Alba de Tormes, 1486), fue una de las figuras más sobresalientes del medievo gallego y prototipo del caballero feudal.
Ascenso al poder
De origen bastardo, y contra todo pronóstico, se erigió al más alto escalafón del linaje de los Soutomaior. Fue un acérrimo enemigo de Alonso II de Fonseca y defensor de los derechos sucesorios de Juana la Beltraneja.
Su padre, Fernán Yáñez, lo tuvo a consecuencia de sus amoríos con una sobrina de la condesa de Santa Marta (Ribadavia), Constanza de Zúñiga. Como hijo ilegítimo, se le procuró un futuro tranquilo en la carrera eclesiástica, nombrando su padre a Esteban de Soutelo (Doctor en teología en el monasterio dominico de Santo Domingo de Tui) como maestro de su hijo, y alcanzando un destacado puesto en la curia diocesana tudense al ser nombrado canónigo de su Catedral. El mismo monarca castellano Enrique IV, pronunció su nombre para ocupar la mitra de Santiago de Compostela, en manos de los Fonseca, familia que no mantenía buenas relaciones con la corona. De hecho, el citado monarca consideraba necesarios a los Soutomaior para frenar las ansias del Arzobispo de Santiago.
Tras la muerte de Fernán Yáñez en 1440 en Valladolid, le sucede en el patriarcado su legítimo primogénito, Alvar Páez de Soutomaior, casado con Doña María de Ulloa. Su mandato estuvo lleno de confrontaciones con los Sarmiento, acérrimos enemigos de los Soutomaior. Los intereses de ambas casas chocaban frontalmente por el control del sur de la actual provincia de Pontevedra. No obstante, el matrimonio no dio los frutos esperados, y el propio Alvar Páez legitimaría a su medio hermano Pedro en el año 1468, heredando este los dominios de la casa de Soutomaior con la aprobación de la legítima heredera, su tía Dª Maior de Soutomaior.
Papel histórico
Precisamente en ese mismo año, la figura de Pedro Madruga entra con fuerza en el panorama político y militar de Galicia, justamente cuando la segunda guerra irmandiña (1467-1469) eclosionaba y barría del panorama al poder nobiliar. Harto de las injusticias y desmanes de la clase dirigente, el Tercer Estado (apoyado por hidalgos y miembros del bajo clero) se alza en armas contra sus señores naturales, y durante dos años se hacen con el poder efectivo del territorio, derrocando cuanta fortaleza aparecía a su paso.
Precisamente su hermanastro, Álvaro Páez, encontraría la muerte en el sitio que los Irmandiños pondrían sobre la ciudad episcopal de Tui, feudo y usurpación que los Soutomaior habían ejercido sobre la ciudad miñota en prácticamente todo el siglo XV. Será este suceso, el asedio de más de cinco mil irmadiños sobre Tui irmandinhos, el obligue a emerger la belicosa personalidad de Pedro, el cual huirá a Portugal, donde le esperarán buenos protectores. Abandonando inmediatamente el estado eclesiástico contraerá nupcias con Tareixa de Távora, hija del caballero Álvaro Pérez de Távora, hidalgo portugués de cierta importancia y sobre todo influencia en la corte portuguesa. Con el apoyo del rey de Portugal Alfonso V de Portugal, Pedro Álvarez iniciará su particular reconquista del territorio gallego, ocupado por los campesinos que se habían amparado en la Santa Hermandad levantada por Enrique IV de Castilla. Defensor de Juana la Beltraneja y de Alfonso V de Portugal, quien le concede el título de Conde de Camiña en 1475, va a proclamarse caudillo de la insurgencia nobiliaria contra la intromisión de los Reyes Católicos en las particulares libertades que la nobleza gallega habían practicado durante los siglos XIV y XV. Una vez finalizada la guerra entre Isabel y Juana, Pedro Álvarez emprendería diversas campañas de reconquista y consolidación de sus dominios en el territorio de la diócesis tudense y Rías Bajas, con luchas denodadas contra el obispo tudense, Diego de Muros. Su incotinencia guerrera, fruto de la ilusión de mantener el poder de la casa de Soutomaior antes de la revuelta Irmandiña en 1467, obligaría a medidas de presión por parte de los Reyes Católicos, incluyendo la pérdida de las posesiones familiares en favor de su hijo Álvaro, medida tomada por su esposa Tareixa de Távora ante Isabel la Católica para evitar la ruina de la casa. En estas circunstancias, Pedro Álvarez de Soutomaior se encaminaría en enero de 1486 a Castilla para pedir el perdón de sus majestades. Parando en Alba de Tormes para entrevistarse con su amigo el Duque de Alba, hallaría la muerte de forma sospechosa. El cronista Vasco de Aponte informa de dos versiones: una la referente a su enfermedad por carbunco y la otra por una emboscada y asesinato por parte de sus numerosos enemigos.
Pedro Madruga ha pasado a la historia como un personaje muy controvertido creándose una serie de mitos que perduran hasta hoy en día.
En las últimas décadas, varios investigadores gallegos, en lo que supone una evolución de las tesis sobre la nacionalidad gallega de Cristóbal Colón, iniciadas por García de la Riega a finales del siglo XIX han propuesto a Pedro Madruga como verdadera identidad del descubridor. Sus principales argumentos serían una reinterpretación de la firma del navegante, formada por siglas que coinciden con el árbol genealógico de Pedro Madruga, y un texto del cronista Francesillo de Zúñiga, quien a principios del siglo XVI menciona a Diego de Sotomayor (hijo de Pedro Madruga), como hijo de Colón. Entre quienes apoyan esta teoría, caben destacar Alfonso Philippot Abeledo, Fernando Alonso Conchouso o Rodrigo Cota González.
Bibliografía
Vasco de Aponte; Recuento de las Casas antiguas del reino de Galicia. Santiago de Compostela, 1986.
García Oro, J; La Nobleza Gallega en la Baja Edad Media. Las casas nobles y sus relaciones estamentales, Santiago de Compostela, 1981.
Vila, Suso; A Cidade de Tui durante a Baixa Idade Media. Noia, 2009.
Cota, Rodrigo; Colón, Pontevedra, Caminha. Pontevedra, 2009.
Categorías: Nobles | Historia de Galicia | Historia medieval de España | Fallecidos en 1486
Wikimedia foundation. 2010.