- Descubrimiento de la ruta marítima a la India
-
Descubrimiento de la ruta marítima a la India
Véase también: Comercio de las especiasEl proyecto para encontrar la Ruta marítima a la India fue ideado por Juan II de Portugal como medida para reducir los costes de los intercambios comerciales con Asia, en un intento de monopolizar el comercio de las especias. Con una presencia marítima cada vez más sólida por parte de Portugal, Juan II anhelaba el dominio de las rutas comerciales y la expansión de su reino, que empezaba a transformarse en un imperio, pero que tras haber rechazado el proyecto de Cristóbal Colón, y después del descubrimiento de América por parte de Castilla, veía peligrar sus intereses a pesar de los tratados sucesivos de Alcaçovas y Tordesillas. A pesar de que Juan II fue el principal promotor del proyecto, la empresa no sería realizada durante su reinado, sino durante el de su sucesor Manuel I, quien designaría a Vasco de Gama para esta expedición, manteniendo en lo posible el plan original de su padre.
Sin embargo, esta expedición no contaba con el apoyo de la clase alta del reino, que en las Cortes de Montemos-o-Novo de 1495 manifestó de modo patente su oposición a la empresa. Se contentaban con el comercio con Guinea y África del Norte. Además, temían por el mantenimiento de los territorios de ultramar, por el coste que implicaba la expedición y por el mantenimiento de las rutas marítimas que de resultasen de ella. Esta posición está personificada en la obra Os Lusíadas, de Luís Vaz de Camões, en el personaje de Velho do Restelo, que se opone a embarcarse en la armada.
El rey Manuel I no participaba de la opinión de la nobleza y mantuvo el plan de su padre Juan II. Mandó aparejar las naves y escogió a Vasco de Gama, caballero de su casa, para capitanear la expedición. Curiosamente, en el proyecto original de Juan II era el padre de Vasco, Esteban de Gama, quien debía capitanear la expedición, pero ya había fallecido en las fechas que se preparó la flota.
El 8 de julio de 1497 se iniciaba la expedición que terminaría dos años después con la entrada de la nave Bérrio en el estuario del río Tajo, trayendo las buenas nuevas del descubrimiento.
Contenido
Antecedentes
Las especias eran consideradas desde siempre como el oro de las Indias. La canela, el jengibre y la pimienta eran productos difíciles de obtener y de precio elevado y por los cuales siempre se esperaban las caravanas o mercaderes provenientes de Oriente. Un mercader de Lisboa describió la ruta terrestre de las especias de la siguiente forma (obsérvese que las referencias geográficas a Judea y Túnez son incorrectas):
De esta tierra de Calicut son las especias que se consumen en Portugal y en todas las provincias del mundo; son también de esta ciudad muchas piedras preciosas de toda clase. Aquí se cargan las naves de especias a La Meca y las llevan a una ciudad que está en la Meca que se llama Judea. Y pagan al gran sultán sus derechos. Y desde allí las vuelven a cargar a otras naves más pequeñas y las llevan por el Mar Rojo a un lugar que está junto a Santa Catalina del Monte Sinaí que se llama Túnez y también aquí pagan otros derechos. Aquí cargan los mercaderes estas especies en camellos alquilados a cuatro cruzados cada camello y las llevan a El Cairo en diez días; y aquí pagan otro derecho. Y en este camino para el Cairo muchas veces los asaltan los ladrones de aquella tierra.Aquí vuelven a cargarlas otra vez en unas naves, que navegan por un río que se llama el Nilo, que viene de la tierra del Preste Juan, de la India Baja; y van por este río dos días, hasta que llegan a un lugar que se llama Roxete; y aquí pagan otro derecho. Y vuelven otra vez a cargarlas en camellos y las llevan, en una jornada, a una ciudad que se llama Alejandría, la cual es un puerto de mar. A esta ciudad de Alejandría vienen las galeras de Venecia y de Génova para buscar esta especia, de la cual se cree que tiene el gran sultán 600.000 cruzados; de los cuales da, cada año, a un rey que se llama Cidadim 100.000 para que haga la guerra al Preste Juan.Tras la conquista otomana de Constantinopla en la segunda mitad del siglo XV, la ruta terrestre de las especias explotada principalmente por las Repúblicas italianas de Génova, Venecia y Pisa, se volvió más complicada y finalmente monopolizada principalmente por Génova lo que incitó a las potencias europeas a encontrar una ruta marítima que evitase las tierras turcas o los establecimientos genoveses. Así, Castilla preparó su expedición a las Indias por la ruta del oeste lo que le permitió descubrir América mientras que Portugal intentó encontrar su propio camino hacia el este. Para la preparación de la expedición se realizaron con anterioridad expediciones previas con el fin de recabar información sobre los reinos y posibles enemigos o aliados.
La costa africana ya no era totalmente desconocida, pues se habían realizado diversas expediciones anteriores desde la llevada a cabo por el navegante Hannón de Cartago y la posible circunnavegación fenicia de África. Las exploraciones de la costa africana hasta Sierra Leona del príncipe Enrique el Navegante y otras llevadas a cabo por otros marinos portugueses o de otras nacionalidades europeas, como la llevada a cabo en 1291 por los genoveses Teodosio Doria y los hermanos Vivaldi, e incluso las exploraciones árabes, sobre todo centradas en la costa oriental del continente, habían arrojado luz sobre la geografía africana y las rutas de navegación.
En 1481 Juan Alfonso de Aveiro realizó una expedición al reino de Benín y recogió información acerca de un cuasi legendario príncipe Ogané, cuyo reino se situaba mucho más a oriente que Benín. Este príncipe era cristiano y gozaba de gran veneración y poder. Se decía en Benín que este reino distaba de allí veinte lunas de camino o según el relato de Juan de Barros correspondía a 250 leguas.
En 1486 Bartolomé Díaz emprendió la expedición que logró culminar con éxito el proyecto que iniciara Enrique el Navegante al alcanzar el extremo sur de África y doblar el Cabo de Buena Esperanza lo que daba pie a una conexión marítima entre Europa y la India. La expedición sirvió también para reconocer gran parte de la costa occidental de África pero sin embargo no logró contactar con el mítico reino del Preste Juan, que se suponía reinaba en un territorio de oriente y podría ayudar a los cristianos en sus exploraciones y luchas contra los musulmanes.
Animado por estas noticias obtenidas en Benín, Juan II envió en 1487 a Frai Antonio de Lisboa y Pedro de Montarroio para que obtuvieran de Oriente nuevas informaciones que pudieran localizar al Preste Juan, al cual parecían corresponder las descripciones que le llegaban del príncipe de Ogané. Pero estos exploradores no lograron pasar de Jerusalén ya que ambos desconocían la lengua árabe y por miedo decidieron retornar a Portugal.
A pesar de ello los conocimientos que se tenían sobre Oriente eran muy difusos y generalmente llenos de historias fantásticas. Era necesario el conocimiento del mercado oriental de las especias y un contacto directo con los países de origen por lo que con mucho cuidado y secreto preparó una nueva expedición en la que participaron dos hombres de la confianza del rey y conocedores de la lengua árabe, Afonso de Paiva, de Castelo Branco, y Pêro da Covilhã o Covilhao. Estos emprendieron su camino vía Valencia, Barcelona, Nápoles, Rodas, Alejandría, El Cairo y el golfo de Adén haciéndose pasar por comerciantes de miel para intentar pasar inadvertidos frente a los comerciantes árabes y venecianos. A partir de aquí se separaron siguiendo caminos diferentes. Alfonso de Paiva siguió camino a Etiopía, aunque fracasó en su intento y murió durante el viaje, mientras que Pêro da Covilhã se dirigió a la India vía Ormuz. Éste tuvo más suerte y tras viajar a la India se dirigió a Etiopía donde finalmente murió. Pese a que ninguno de los dos exploradores volvió las informaciones suministradas por Covilhã a Juan II sirvieron de base para preparar la expedición posterior vía marítima.
El plan de viaje tenía entonces que asegurar la ruta y para ello era necesario instalar factorías y construir fortalezas a lo largo de todo el camino. El capitán de la misión debía ser capaz no sólo de dominar los elementos y comandar la expedición en el mar, sino también de establecer relaciones diplomáticas con los monarcas de los reinos que se encontrara en el camino.
No sería durante el reinado de Juan II que tenia una fuerte oposición de la corte cuando se iniciara la expedición, sino durante el de su sucesor Manuel I, quién no participaba de la opinión general y creía que la expedición era una buena oportunidad de dominar el comercio con Oriente.
La Armada
Nave Capitán Piloto Maestre Escribano São Gabriel (San Gabriel) Vasco de Gama Pêro de Alenquer Gonçalo Álvares Diogo Dias São Rafael (San Rafael) Paulo de Gama João de Coimbra — João de Sá Bérrio (rebautizado como San Miguel) Nicolau Coelho Pêro Escobar — Álvaro de Braga Navío de
mantenimientoGonçalo Nunes Entre la tripulación se incluía a dos intérpretes Fernão Martins y Martim Afonso, y dos frailes, João Figueira y Pêro da Covilhã. El total de la tripulación ascendía a 170 hombres de los cuales algunos eran proscritos que deberían quedarse en la India y tratar de generar un vínculo con los portugueses que debían llegar más adelante. En la primera parte del viaje les acompañó Bartolomé Díaz, quien se quedó en la colonia de San Jorge d’El Mina.
Los marineros contaban con cartas de navegación en las que estaba marcada toda la costa africana conocida hasta entonces, cuadrantes, astrolabios de diversos tamaños, reglas y tablas con cálculos (como las tablas astronómicas de Abraham Zacuto) y brújulas. Unos dos navíos transportaban suministros para tres años: galletas, judías, carne seca, vino, harina, aceite, salmueras, etc. Estaba previsto el reabastecimiento continuo a lo largo de la costa africana. El viaje a la India fue realizado por tres naves y un navío de abastecimiento o mantenimiento. En cada una de las tres naves viajaba un capitán y un piloto, mientras que la nave de abastecimiento tan sólo contaba con un capitán. En dos de las naves también viajaban sendos escribanos y en la nave capitana un maestre.
El viaje
La expedición se inició en 8 de julio de 1497. El navegación entre Lisboa y Cabo Verde era la habitual y a partir de aquí la ruta se desvió mar adentro durante dos meses siguiendo las recomendaciones de Dias. Por otro lado el viaje por la costa oriental de África no fue descrita por Alvaro Velho:
Ruta costera hasta Malindi y travesía directa desde este puerto hasta Calicut.Durante esta expedición fueron tomadas latitudes a través de la observación del Sol, como refiere João de Barros.
Los diarios de abordo de las naves relatan muchas experiencias inéditas. La ansiosa tripulación encontró una variedad rica de fauna y flora. El 7 de noviembre atracaron para abastecerse y reparar los navíos en una bahía a la que llamaron Santa Elena, donde mantuvieron contacto con tribus que comían lobos marinos, ballenas, carne de gacelas y raíces de plantas, iban cubiertos con pieles y sus armas eran simples lanzas de madera o cuernos de animales; encontraron tribus que tocaban flautas de madera con destreza. El 22 de noviembre doblaron en Cabo de Buena Esperanza tras lo cual descargaron e incendiaron el barco de abastecimiento. Antes del 16 de diciembre la expedición ya había sobrepasado el río Blanco en Sudáfrica, donde Bartolomé Díaz había dado media vuelta. El 25 de diciembre (día de Navidad) bordearon unas tierras que recibieron en nombre de Natal debido al día en el que se encontraban (Natalis dies en latín) y el 2 de marzo la flota llegaba a Mozambique cuya costa fue explorada con detenimiento. Durante esta etapa Vasco había tenido que soportar fuertes temporales y sofocar una rebelión de la tripulación que empezaba a sufrir los efectos del escorbuto y tuvo que repostar agua dulce en las desembocaduras de los ríos Cobre y Zambeze.
A pesar de las dificultades de un viaje de esta índole, la tripulación mantuvo el ánimo para conseguir su objetivo. Durante el viaje asaltaron otros navíos para capturar a la tripulación que posteriormente podía ser intercambiada o se empleaban para los trabajos más duros y peligrosos. Así, el sultán de Mozambique proporcionó un piloto para guiar la expedición por las costas orientales de África pero realmente se trataba de una trampa ya que tenía como misión entregar las naves a los gobernantes árabes de Mombasa. Una casualidad hizo descubrir la emboscada y Vasco de Gama pudo continuar hasta Malindi, cuyo rey le suministró un piloto árabe, Ahmad Bin Majad, conocedor del régimen de los monzones y del Océano Índico en el que entraron el 25 de abril.
Se sabe por Damião de Góis, que durante el viaje fueron colocados cinco padrões (especie de poste con los emblemas de Portugal): São Rafael, en el río dos Bons Sinais; São Jorge, en Mozambique, Santo Espírito, en Malindi; Santa Maria, en las Islas Laquedivas, y São Gabriel, en Calicut. Estos monumentos estaban destinados a afirmar la soberanía portuguesa sobre estos lugares y que otros exploradores no tomasen estas tierras descubiertas por ellos.
La llegada a la India
El 20 de mayo de 1498 llegaba a la costa de Malabar (sudoeste de la India) la expedición. La entrada en Calicut (actual Kozhikode) sufrió alguna complicación, sobre todo a la oposición de los mercaderes árabes que deseaban mantener a los europeos apartados del mercado de las especias y mantener su monopolio en la India y pusieron en contra de los portugueses a la población y el samorim de Calicut y posteriormente tuvo que repeler dos ataques en alta mar. La perseverancia de Vasco de Gama logró que se iniciaran conversaciones entre él y el Samutiri Manavikraman Rajá, samorim de Calicut (antiguo señor del estado hindú de Calicut), de cuyo encuentro resultó una carta en la que se puede leer:
Vasco de Gama, hidalgo de vuestra casa, ha venido a mi tierra, lo que ha sido de mi agrado. En mi tierra hay mucha canela, y mucho clavo y jengibre y muchas piedras preciosas. Y lo que yo quiero de la tuya es oro y plata y coral y escarlata.Vasco de Gama esperaba haber encontrado a los cristianos que habitaban en la India y que se suponía eran muy numerosos, ya que según la tradición cristiana habían sido evangelizados por Santo Tomás. De hecho para la entrevista con el rajá, Vasco fue conducido a un templo hindú que confundió con una iglesia cristiana
El retorno
El 12 de julio de 1499, más de dos años después del inicio de la expedición, entró la carabela Berrio en el estuario del río Tajo, comandada por Nicolau Coelho con la noticia esperada y que emocionó a toda Lisboa de que los portugueses habían conseguido llegar a la India por mar. Vasco de Gama se había quedado atrás en la Isla Terceira (en las Azores) para quedarse con su hermano Paulo que enfermó gravemente y murió, siendo enterrado en la isla, renunciando así a los festejos y felicitaciones por la noticia.
De las naves que tomaron parte en la expedición, tan sólo regresaron dos, ya que la nave São Rafael había sido quemada por la imposibilidad de maniobrarla, a consecuencia del reducido número de su tripulación debido a la muerte de gran parte de la tripulación por enfermedades como el escorbuto que se hizo sentir con fuerza durante la travesía en del Océano Índico.
Vasco da Gama retornaba a Portugal el 29 de Agosto y fue recibido por el propio rey Manuel I con la alegría que merecía, otorgándole el título de Almirante mayor de las Indias y del Océano Índico y una renta de trescientos mil reales que podría legar a los hijos que tuviera. Recibió, conjuntamente con sus hermanos, el título de Don y dos villas, en Sines y Vila Nova de Milfontes. Hizo a Nicolau Coelho hidalgo se su casa, así como a todos los otros, conforme a los servicios que habían prestado.
Manuel I se apresuró a dar la noticia a los reyes de España, en una muestra de orgullo por el hecho y para avisar de que las rutas serian exploradas por la Corona Portuguesa.
Hay noticia de que un mercader italiano esparció por Florencia la siguiente información, refiriéndose a Malindi:
Descubrieron 1800 leguas de nuevas tierras más allá del Cabo de Buena Esperanza, cuyo cabo fue descubierto hace tiempo por el rey Juan. El capitán descubrió una gran ciudad amurallada, con muchas buenas casas de piedra, al estilo morisco, habitada por moros del color de los indios. El capitán desembarcó aquí y el rey le dio un piloto para cruzar el golfo.Cronología del viaje
La ida
Escala Partida Llegada Días Viajando Ancorados 1497 1497 Lisboa/Santiago (Cabo Verde) 8 jul 27 jul 19 - Santiago/Bahía de Santa Elena 3 ago 7 nov 96 - Bahía de Santa Elena 9 Bahía de Santa Elena/Cabo de Buena Esperanza 16 nov 22 nov 6 - Cabo de Buena Esperanza/São Brás (San Blas) 22 nov 25 nov 3 - Bahía de São Brás 13 S. Brás/Ponta da Pescaria 8 dic 28 dic 20 - Ponta da Pescaria/Río del Cobre 28 dic 11 ene 14 - Río del Cobre 5 1498 1498 Río del Cobre/Río dos Bons Sinais 16 ene 25 ene 9 - Río dos Bons Sinais 30 Río dos Bons Sinais/Mozambique 24 feb 2 mar 6 - Mozambique 27 Mozambique/São Rafael 29 mar 5 abr 7 - Baixos de São Rafael 2 São Rafael/Mombasa 7 abr 7 abr horas - Mombasa 6 Mombasa/Malindi 13 abr 14 abr 1 - Malindi/Calicut 24 abr 20 may 2-6 10 Total: 309 días El regreso
Escala Partida Llegada Días Viajando Ancorados 1498 1498 Calicut/Islas de Santa María (Islas Laquedivas) 29 ago 15 set 17 - Islas de Santa María horas Islas de Santa María/Angediva 15 set 20 set 5 - Angediva 15 Angediva/Malindi 5 oct 7 ene 94 - Malindi 4 1499 1499 Malindi/São Rafael 11 ene 13 ene 2 - São Rafael 14 São Rafael/São Jorge (Mozambique) 27 ene 2 feb 5 - São Jorge 1 São Jorge/São Brás 1 feb 3 mar 29 - São Brás 9 São Brás/Cabo de Buena Esperanza 12 mar 20 mar 8 - Cabo de Buena Esperanza/Río Grande 20 mar 25 abr 36 - Río Grande/Lisboa 25 abr 10 jun 76 - Total: 315 días Consecuencias
Las consecuencias de este descubrimiento fueron de vital importancia en la época, pues mostraban una ruta para el comercio de las especias y otros productos de Oriente sin tener que depender del paso por las tierras hostiles del Imperio Otomano o del Norte de África. El descubrimiento y el posterior comercio regular con la India, junto al descubrimiento de América, provocó una revolución económica que benefició en primer lugar a los portugueses que convirtieron Lisboa en un centro de comercio de primer orden y en el principal mercado de las especias, además de trasladar el centro de poder del Mediterráneo al Atlántico, lo que trajo la decadencia de las ciudades comerciales italianas y el abandono de Egipto como paso de las mercancías que llegaban a Europa.
El control de la ruta permitió a Portugal el establecimiento de numerosos puestos comerciales, factorías y fortalezas a lo largo de todo el recorrido y territorios orientales y africanos y le permitió ampliar su imperio de forma considerable. Además pudo controlar el comercio no sólo con la India sino también con el sudeste asiático, China y Japón. En su momento de mayor poder, Portugal controlaba por completo el océano Índico.
Las observaciones realizadas durante la travesía tuvieron su repercusión en el posterior descubrimiento de Brasil por parte de Pedro Álvares Cabral ya que fue descubierto en un viaje posterior a la India y Cabral tomó en consideración las palabras de Vasco de Gama afirmando que había visto aves volando hacia el oeste durante su travesía en el Atlántico.
Referencias
- Obras generales:
- Palacio, Jean Pierre (coordinador). Historia Universal Salvat. Vol. 11 Asia medieval. La era de los descubrimientos. Salvat Editores S.A. 1999. ISBN 84-345-9902-3
- Lelorrain, Anne-Marie (dirección). Historia Universal Larousse. Vol. 9 La era de los descubrimientos 1492-1581. Spes Editorial S.A. 2005. ISBN 84-8332-632-9
Enlaces externos
- Wikisource contiene obras originales de o sobre Descubrimiento de la ruta marítima a la India.
- Da Gama Rodeando África hasta la India
- Da Gama, web tutorial con mapas
- Diario de Da Gama
- Información sobre personajes y lugares relacionados, en Inglés
Categorías: Wikipedia:Artículos grabados | Historia de Portugal | Edad Moderna - Obras generales:
Wikimedia foundation. 2010.