- Atención prenatal
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La atención prenatal (APN) no es más que el conjunto de acciones de salud que reciben las embarazadas durante la gestación.[1] La atención médica especial para la mujer embarazada es importante para asegurar un embarazo saludable e incluye controles regulares y análisis prenatales. Lo mejor es comenzar con este tipo de atención tan pronto una mujer sepa que la está embarazada.[2] Por lo general, la atención prenatal comprende un examen físico de la embarazada por un profesional especializado de la salud, examen ginecológico en la que incluye citología que descarte patologías del cuello uterino como el VPH, valoración cardiovascular, verificación de inmunizaciones (rubeola, hepatitis), verificación de infecciosos como el toxoplasma y VIH, y determinar cuando un embarazo se trate de alto riesgo y cuando no.
Contenido
Objetivos
El objetivo principal de la atención prenatal orientada es ayudar a las mujeres a mantener embarazos normales a través de:
- La identificación de condiciones de salud preexistentes
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- Como parte de la evaluación inicial, el personal de salud que realiza la consulta o control -médico o enfermera capacitada en obstetricia[3] - conversa con la mujer y examina las señales de condiciones crónicas y enfermedades infecciosas. Las condiciones de salud preexistentes como VIH, malaria, sífilis y otras enfermedades de transmisión sexual, anemia, enfermedades cardíacas, diabetes, desnutrición y tuberculosis, pueden afectar el resultado del embarazo, requieren tratamiento inmediato y generalmente se necesita un nivel más intenso de control y atención de seguimiento durante el curso del embarazo
- La detección temprana de complicaciones que surgen durante el embarazo
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- En los controles se examina y conversa con la mujer para detectar problemas de embarazo que podrían necesitar tratamiento y un control más estricto. Las condiciones tales como la anemia, la hemorragia vaginal, trastornos de hipertensión del embarazo y crecimiento anormal del feto o posición anormal del feto después de las 36 semanas, pueden ser o convertirse en un peligro de muerte si se dejan sin tratamiento.
- El fomento de la salud y prevención de enfermedades
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- La consejería sobre aspectos importantes que afectan la salud de la mujer y la salud del recién nacido es un componente vital de la APN. Los temas tratados deberían incluir:
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- Cómo reconocer los signos de peligro, qué hacer y donde conseguir ayuda
- Buena nutrición y la importancia del descanso
- Higiene y prácticas de prevención de infecciones
- Riesgos del tabaco, alcohol, medicamentos locales y remedios tradicionales
- Lactancia materna
- Planificación familiar post parto y espaciamiento de los nacimientos.
- Todas las mujeres embarazadas deberán recibir las siguientes intervenciones preventivas:
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- Inmunización contra el tétanos
- Suplementos de hierro y ácido fólico.
- En lugares de alta prevalencia las mujeres además deberán recibir:
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- Tratamiento ante probable anquilostomiasis
- Consejería y prueba voluntaria de VIH
- Protección contra la malaria mediante tratamiento preventivo intermitente y el uso de velos cobertores para la cama tratados con insecticidas
- Protección contra la deficiencia de vitamina A y yodo.
- La preparación para el parto y la elaboración de un plan para estar listos ante una complicación.
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- Un porcentaje elevado de mujeres desarrollan una complicación con peligro de muerte, por lo tanto todas las mujeres deberán tener un plan para lo siguiente:
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- Un asistente experto en el parto
- El lugar para el parto y e indicaciones para llegar hasta él, incluyendo la manera de obtener transporte de emergencia si fuera necesario
- Artículos necesarios para el parto
- Dinero ahorrado para pagar al experto que se encargue del parto, para cualquier medicamento y suministros que fueran necesarios -en aquellos lugares donde la asistencia médica sea pagada
- Apoyo durante y después del parto (familia, amigos)
- Donantes potenciales de sangre en caso de emergencia[1] [4]
Consultas o controles
A través de toda la gestación se van realizando controles de seguimiento, pero la más importante es el primero, que es también el más extenso. En esta se lleva a cabo un interrogatorio o anamnesis extenso, con el objetivo de conocer los antecedentes patológicos de la embarazada y de los familiares, además de un examen físico completo. también se le indican los primeros análisis dentro de los que se incluyen:
- Hemoglobina
- Electroforesis de hemoglobina para determinar la existencia o predisposición de anemia falciforme
- Sífilis
- HIV
- Grupo sanguíneo
- Talasemia
- Rubéola
- Fibrosis quística
- Hepatitis B y C
- Orina
- Glucemia
- Detección de marcador múltiple (análisis triple)
- Muestra de vellosidad coriónica
- Amniocentesis
- Determinaciones especiales para descartar malformaciones y enfermedades congénitas como el alfa-fetoproteína
- En dependencia del tiempo de gestación y ante alguna sospecha se le realizará ultrasonografía.[1] [5]
Frecuencia de las consultas
Está en dependencia de la categorización del embarazo, de alto o bajo riesgo. En este último caso se puede seguir este cronograma
- Cada cuatro o seis semanas, a partir del primer mes hasta el séptimo mes de embarazo (las primeras 28 semanas)
- Cada dos o tres semanas en el octavo mes (desde la semana 28 hasta la 36)
- Todas las semanas en el noveno mes (desde la semana 36 hasta el parto)[1]
Embarazos de riesgo
Se define un embarazo de bajo riesgo aquel que presenta evidencias de tener las condiciones óptimas para asegurar el bienestar a la madre y el feto y carece de antecedentes patológicos o epidemiológicos que aumenten la probabilidad de que la madre o el feto desarrollen una enfermedad.[6]
Los embarazos de alto riesgo se dividen en tres tipos:
- Alto Riesgo Tipo I: La embarazada se encuentra en buen estado de salud pero presenta uno o más factores de riesgo epidemiológico, tales como el analfabetismo, pobreza crítica y desempleo familiar, tabaquismo y/o alcoholismo, un embarazo no deseado, etc.
- Alto Riesgo Tipo II: La embarazada se encuentra en buen estado de salud pero presenta uno o más antecedentes de patologías ginecológicas u obstétricas, tales como bajo peso al nacer, incompatibilidad Rh, preeclampsia o eclampsia o una cesárea anterior, entre otros.
- Alto Riesgo Tipo III: La gestación ocurre en mujeres con enfermedades de base, tales como diabetes, placenta previa, preeclampsia o eclampsia, VIH, etc.
Véase también
- Ecografía genética
- Parto
- Perfil biofísico fetal
- Recién nacido
Referencias
- ↑ a b c d Rigol, Orlando. «Atención prenatal». Obstetricia y ginecología. ECIMED. ISBN 959-7132-98-2. http://bvs.sld.cu/libros_texto/libro_de_ginecologia_y_obstetricia/cap08.htm.
- ↑ «Atención prenatal». Consultado el 25 de junio de 2009.
- ↑ Bronfman-Pertzovsky, M. N.. «Atención prenatal en el primer nivel de atención: características de los proveedores que influyen en la satisfacción de las usuarias». Consultado el 25 de junio de 2009.
- ↑ Stephenson, P.. «La atención prenatal orientada: Un mejor enfoque, más económico, con base en la evidencia». Consultado el 25 de junio de 2009.
- ↑ «Control prenatal». Consultado el 25 de junio de 2009.
- ↑ Hernández LB. «Guía clínica para la atención prenatal». Consultado el 25 de junio de 2009.
Enlaces externos
- Wikimedia Commons alberga contenido multimedia sobre Atención prenatal. Commons
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