Kimara

Kimara es una semiyan que aparece por primera vez en el campamento de los limyati. Tiene los ojos rojos, y el cabello azul y blanco recogido en trenzas azules, como los yan. Su padre es un yan llamado Kust, y su madre es una limyati.

Papel en la trilogía

Memorias de Idhún II: Tríada

Al ser semiyan, posee unos dotes de guía que les servirán de mucho a Jack y a Victoria. Al principio parece que no quiere acompañarlos, pero al descubrir que Jack es Yandrak, el último dragón, decide ser su guía.

Kimara se enamora de Jack, y los dos se sienten atraídos, pero él la rechaza y ella lo acepta con naturalidad. Siguen siendo amigos, y ella no le replica nada sobre Victoria. Kimara se enfrenta con varios szish en las montañas que hay antes de Awinor. Se queda esperando a Jack y a Victoria. Horas más tarde queda gravemente herida por el ataque de una shek, y para salvarla Victoria se transforma en Lunnaris.

Así, Kimara pasa a convertirse en la primera maga después de 15 años y la primera consagrada por el último unicornio. Después de la caída en el mar de Raden descubre quién es Bradju y acompaña a Jack en el palacio que tiene en Kosh. Bajo la petición de Jack de que no vaya con él, Kimara se dirige a Vanissar. Se encuentra con Shail y Zaisei en un encuentro que realiza ella para explicar que vio la luz en la oscuridad, es decir, que era la primera maga. Les explica que Jack fue a buscar el swanit y luego se va con ellos. Se despide de los dos en Vaisel, y bajo nuevas noticias va hacia el Bosque de Awa. Es recibida por Aile y Qaydar, que lloran de alegría al saber que es una maga. Si hay algún herido en los rebeldes, ella es la maga que se encarga de cuidarlos y curarlos. En el Bosque de Awa siempre va tapada para que sus rasgos yan no sean mal vistos.

Cuando sabe que Jack ha muerto (en realidad, Jack viaja a Umadhún), cae en un estado apático. No se lleva muy bien con Kestra, pero el comportamiento con ella cambia cuando esta le enseña un dragón artificial que es idéntico a Yandrak. En ese momento ella decide que pilotará ese dragón, y finalmente lo cumple. Participa en la Bosque de Awa, pilotando el falso Yandrak. Cae entre las ramas de un árbol, y una dríade se enoja con ella, pero gracias a Shail consigue bajar.

En el final de Tríada, Kimara está en la Torre de Kazlunn, con Jack y vigilando el sueño de Victoria.

Memorias de Idhún III: Panteón

Kimara estudia con Qaydar, su maestro, en la Torre de Kazlunn. No está muy atenta y prefiere estar con Jack vigilando a Victoria. Vuelve con Tanawe a Vanissar, y ella le entrega un dragón, que ella llama Ayakestra, que significa “en memoria de Kestra”. Después, con varios pilotos de dragón, se dirige hacia Kash-Tar para ayudar a los rebeldes yan. Surgen varios problemas con Yohavir, y tiene que huir al desierto. Allí se une con Goser, y los dos tienen una especie de atracción. Pero cuando surge la bola de fuego y Kimara está a punto de desfallecer, Rando la salva.

Kimara y Rando comienzán una relación amorosa y asisten juntos al funeral de Alsan, allí se encuentran con Jack y Victoria. Estas dos hablan sobre el futuro y Victoria le presenta a su hijo Erik. Kimara vuelve a la Torre de Kazlunn a estudiar magia y Rando se establece en Les para estar junto a ella.