- Tebas (Grecia)
-
- Para la antigua capital del nomo IV del Alto Egipto, véase: Tebas (Egipto).
Θήβαι
ThívaLocalización de Thíva en Grecia País Grecia • Periferia Beocia • Prefectura Grecia Central Ubicación • Altitud 215 msnm Superficie 830 km² Población 36.086[1] hab. (2011) • Densidad 43,48 hab./km² Gentilicio tebano griego Código postal 32200
Pref. telefónico 22620
alcalde Σπυρίδων Νικολάου Sitio web http://www.thiva.gr Tebas (Θῆβαι -orig.: Θήβη; dórico: Θήβα-) es una ciudad de Grecia, situada al norte de la cordillera de Citerón, que separa Beocia de Ática, y en el borde sur de la planicie de Beocia. Estaba situada a 48 Km. al noroeste de Atenas. En tiempos antiguos fue la ciudad más grande de esa región.
En la actualidad, el lugar de la antigua ciudadela, Cadmea, se encuentra ocupado por la ciudad de Thíva (Θήβα) que fue reconstruida después del terremoto de 1893. La ciudad actual tiene 36.086 habitantes (2011).[2] El gentilicio corresponde a tebano.
En tiempos antiguos fue la ciudad más grande de la región de Beocia, territorio que estaba dividido en dos partes por el río Onquestos, del que Tebas estaba situada al sur, y al norte se hallaba Orcómeno. Estaba al pie de la montaña Teumessus; los riachuelos Ismenos (actual Ai Ianni) y Dirce (actual Platziotissa) pasaban cerca y un riachuelo de nombre Cnopos o Strofia dividía la ciudad en dos partes: al oeste Cadmea, y al sur la colina Ismenios y Anfion.
Tebas era famosa por sus siete puertas a las que hacen alusión Homero y Hesíodo. Sus nombre son dados por siete diferentes historiadores, que no concuerdan plenamente:
- Proitides
- Electra
- Neita
- Honkas
- Borraia
- Homoloides
- Ebdoma
Contenido
Monumentos y lugares principales de Tebas
- El Templo de Apolo Ismenio
- La fuente Melia de Ismenos
- Atenea Onca
- La fuente de Dirce o Paraporli
- El teatro y el templo de Dioniso
- El monumento de Anfion y Zetos
- La fuente de San Teodoro
- Syrma Antígona
- Casa de Píndaro
Las vías principales conducían a Platea, Leuctra, Tanagra, Calcis, Tespias y Acrafnium.
Personajes famosos
Historia
Historia mítica
La tradición dice que Tebas fue fundada por Cadmo hijo de Agénor, rey de Fenicia, jefe de una colonia fenicia, que fundó la ciudad con el nombre de Cadmea (habitantes cadmeos), nombre que más tarde se restringió a la ciudadela. La llanura del sur de Beocia se conocía como la Tierra Cadmea. La Odisea menciona a Anfion y Zetos, el primero como fundador de las murallas. Cinco espartanos, guerreros que sobrevivieron a una guerra contra un dragón, fueron los ancestros de las familias nobles (Sparti). Historiadores modernos consideran a los tebanos de origen pelásgico y no fenicio, y algunos piensan que fue en realidad una colonia de Creta y que los fenicios únicamente introdujeron el alfabeto.
Según la tradición, Cadmo tuvo un hijo, Polidoro, y cuatro hijas (Ino, Sémele, Autónoe, y Ágave). La primera fue mujer de Atamas y madre de Melicertes; la segunda fue amante de Zeus y madre del dios Dioniso; Autónoe fue madre de Acteón; y Ágave madre de Penteo. Fue Penteo quien sucedió a su abuelo, ya viejo, como rey de Tebas, pero su reinado fue efímero y Polidoro accedió al trono.
Le sucedió su hijo Labdaco que al morir dejó un hijo pequeño de nombre Layo y el trono fue usurpado por Licos, hermano de Nicteo. A la muerte de Nicteo, Licos y su mujer Dirce persiguieron a su nieta Antíope, cuyos hijos, Anfión y Zetos, se vengaron y consiguieron el trono de Cadmea, que fortificaron y unieron la ciudad baja con la ciudadela para formar la ciudad de Tebas.
Fue Anfión quien, con sus cánticos y su lira, hizo surgir milagrosamente las murallas y las puertas de Tebas: siete como las cuerdas de su instrumento.
Les sucedió Layo. Su hijo Edipo salió de Tebas después de que descubriera que había matado a su padre Layo y se había casado con su propia madre Yocasta. Sus dos hijos Eteocles y Polinices se disputaron el trono y durante la guerra civil Argos asedió Tebas dos veces (estos hechos son objecto de los poemes la Tebaida y los Epígonos, que son considerados sólo inferiores a la Ilíada y la Odisea. Polinices fue derrotado y huyó a Argos y obtuvo la ayuda del rey de esta ciudad Adrastos para ocupar el poder. Polinices, Adrasto y cinco héroes más (Anfiarao, Capaneos, Hipomedón, Partenopeos y Tideos). Estos siete formaron una alianza conocida como Los siete contra Tebas y atacaron Tebas,[3] cada uno por una de las siete puertas de la ciudad. Eteocles y Polinices se enfrentaron en una de las puertas, y los argivos fueron derrotados y sus jefes murieron, menos Adrasto, que se escapó a caballo.
Catorce años después los hijos de los siete jefes organizaron otra expedición contra Tebas para vengar a los padres (guerra de los Epígonos); la expedición fue otra vez dirigida por Adrasto y la formaron: su hijo Agesilao, Tersandro (hijo de Polinices), Alcmeón y su hermano Anfíloco (hijos de Anfiarao), Diomedes (hijo de Tideos), Esténelo (hijo de Capaneos) y Prómaco (hijo de Partenopeos). Esta vez los epígonos ganaron en una batalla en el río Glisas y se presentaron en las murallas de Tebas. Los tebanos, aconsejados por Tiresias, se retiraron a territorio ilirio, dirigidos por Laodames, hijo de Adrasto. Los epígonos colocaron en el trono a Tersandro, hijo de Polinices; la primera expedición de los Siete habría pasado 20 años antes de la expedición a Troya y 30 años antes de la conquista de esta ciudad. Evidentemente, la veracidad de esta tradición es más que dudosa.
Otra tradición dice que Heracles nació en la ciudad y que luchó allí contra la ciudad de Orcómeno, el rey de la cual, Erginos, había impuesto tributo a Tebas, del que Heracles la libró y redujo el poder de Orcómeno.
Primeros siglos
El topónimo Φῆβαι, αί[4] está atestiguado en tablillas escritas en Lineal B.[5] El singular Θήβη o Θήβα a veces aparece en la literatura.[6] El topónimo denota o la ciudad,[7] o la politeia,[8] o el territorio.[9]
El compuesto Ύπόθηβαι[10] puede referirse a la primera ciudad construida sobre Cadmea. El gentilicio Θήβαιος[11] es Θειβῆος a menudo en dialecto beocio.[5]
Tebas es denomindaa polis en el sentido urbano,[12] en el sentido político,[13] y en el territorial. El término polisma se encuentra en Menandro,[14] y ἄστν es empleado por Demóstenes.[15]
Los tebanos no participaron en la guerra de Troya, si bien los escritores griegos tardíos incluyeron a Tersandro entre los miembros de la expedición y lo hacen morir en Misia a manos de Télefo. Después de esta muerte, los tebanos nombraron rey a Peneleo, porque el hijo de Tersandro, Tisámeno, era un niño. Peneleo es mencionado en la Ilíada como un líder beocio, pero no se dice que fuera rey de Tebas.
Sesenta años después de la guerra de Troya, los cadmeos fueron expulsados de Tebas por los beocios, tribu de los etolios emigrada desde Tesalia. Otra tradición dice que los tracios y pelasgos ocuparon Tebas durante la guerra de Troya y sus habitantes fueron enviados al exilio en Tesalia, exilio del que volvieron años más tarde.
Pausanias da la lista de los reyes que sucedieron a Tisámeno hasta que la monarquía fue abolida.
El corintio Filolao y su amante Diocles (también corintio) se establecieron en Tebas y crearon un código de leyes que más tarde fueron mencionadas por Aristóteles.
Historia hasta el siglo IV a. C.
Tebas aparece en la historia bajo una forma de gobierno oligárquico, cuando estaba al frente de una confederación de entre diez y catorce ciudades de Beocia. Los habitantes de Platea, descontentos con la hegemonía de Tebas, se retiraron de la confederación beocia y se aliaron a Atenas. Los tebanos fueron derrotados y hubieron de ceder a Platea el territorio al sur del río Asopo, que servía de frontera (hacia 519 a. C. o 510 a. C.). En 479 a. C. los tebanos y sus aliados combatieron junto a los persas en Platea y fueron derrotados; en octubre de aquel año los atenienses y otro griegos asediaron Tebas y la ocuparon al cabo de 20 días; el jefe oligarca de Tebas, Ataginos, se escapó con los persas, y los líderes oligárquicos favorables a Persia que quedaron, encabezados por Timagenides, fueron ejecutados. La hegemonía sobre las ciudades de Beocia casi se perdió, pero gracias a la ayuda de Esparta se pudo restablecer. En 457 a. C., Esparta envió un ejército a Beocia para asegurarse su control, y los espartanos acamparon cerca de Tanagra; los atenienses enviaron un ejército a este lugar, que fue derrotado en el Valle del Asopo (batalla de Tanagra, noviembre del 457 a. C.), pero habiéndose retirado los espartanos, los atenienses volvieron bajo la dirección de Mirónides y ganaron en la batalla de Enofita (febrero del 457 a. C.), imponiendo la disolución de la confederación beocia, cuyas ciudades recibieron gobiernos democráticos que ingresaron en la confederación de Delos. Los líderes oligárquicos fueron enviados al exilio. El gobierno democrático de Tebas duró diez año y gobernó mal; en 447 a. C., los oligarcas se hicieron con el poder en Orcómeno, Queronea y otras ciudades. Los atenienses enviaron un ejército dirigido por el general Tólmides que reconquistó Queronea, donde se estableció una guarnición, pero atacado por los tebanos fue derrotado y muerto y los atenienses expulsados, dejando miles de prisioneros. Para recuperar a los prisioneros, Atenas hubo de reconocer la independencia de Tebas y su hegemonía sobre las ciudades de Beocia, y los gobiernos democráticos fueron depuestos y sustituidos por gobiernos oligárquicos. Sólo Platea quedó bajo influencia de Atenas. Este hecho inició la segunda guerra del Peloponeso cuando los tebanos, en 431 a. C. atacaron Platea.
Los magistrados o generales dirigentes de la confederación eran los beotarcas, que eran once en la época de la batalla de Delio (se cree que dos representantes de Tebas y uno por cada otro miembro de la confederación); en Delio los beocios rechazaron el ataque ateniense (424 a. C.). Tebas y la confederación beocia (en realidad un instrumento de Tebas) estuvieron ausentes de la paz de Nicias (421 a. C.) y en 420 a. C. se aliaron con Esparta. En 413 a. C. los atenienses atacaron Tanagra y ocuparon la ciudad beocia de Micaleso. En 405 a. C., después de la batalla de Egospótamos, juntamente con los corintios urgieron a Esparta a eliminar a Atenas y vender a todos sus habitantes como esclavos. Pero Esparta prefirió instalar un gobierno aliado en Atenas y los exiliados atenienses, encabezaddos por Trasíbulo, encontraron entonces auxilio en Tebas y otras ciudades beocias, sobre todo por parte del tebano Ismenio.
Siglo IV a. C.
Cuando en 397 a. C., el rey espartano Agesilao II cruzó a Asia para luchar contra los persas, los tebanos rehusaron ayudarle e interrumpieron al rey cuando estaba haciendo un sacrificio religioso (a imitación de Agamenón), ofensa que el espartano no olvidaría. El sátrapa persa Titraustes envió un delegado a Grecia (el rodio Timócrates) que repartió mucho dinero a los dirigentes de las ciudades para que hicieran la guerra a Esparta, y antes de formarse una coalición ya la guerra había estallado entre Tebas y Esparta (inicialmente Guerra Beocia) cuando en la disputa fronteriza entre los locrios opuntios y los focidios, Tebas se puso al lado de los primeros (e invadió Fócida) y Esparta de los segundos (en revancha por la ofensa a Agesilao). Lisandro, el general espartano, invadió Beocia, pero fue derrotado por los tebanos en Haliarto (otoño del 395 a. C.).Pausanias, el rey agíada de Esparta, se retiró y fue desterrado (le sustituyó Agesípolis I). Agesilao regresó a Esparta en el año 394 a. C.) Corinto, Atenas y Argos se aliaron con Tebas (más tarde a la guerra se le llamó Guerra de Corinto, porque los combates tuvieron lugar en su territorio). Los corintios fueron derrotados por los espartanos en el riachuelo de Nemea, al sur de la ciudad (julio del 394 a. C.), pero los espartanos fueron derrotados por los persas en la batalla naval de Cnido (agosto del 394 a. C.) y docenas de ciudades se separaron de su alianza, pero Agesilao salvó la situación con una victoria sobre los tebanos en la batalla de Queronea (agosto del 393 a. C.), en la que sólo Orcómeno, que era aliada de Esparta y formaba el ala izquierda, fue derrotada, mientras el centro y la derecha espartana arramblaron a los tebanos, que se reagruparon en el monte Helicón y pudieron impedir el avance espartano, pero a costa de muchas bajas. La guerra corintia continuó los tres años siguientes con numerosos combates en el istmo de Corinto, donde los espartanos ocuparon el puerto de Lequeo y la ciudad de Sición. En dicho puerto fueron derrotados por los atenienses en 390 a. C.
Véase también: Guerra de CorintoEn 387 a. C. la paz de Antálcidas puso fin a la guerra y reconoció la independencia de todas las ciudades griegas (menos Lemnos, Imbros y Esciros, que fueron reconocidas en Atenas «como en tiempos antiguos»). Agesilao vetó que Tebas pudiese ejercer la hegemonía sobre las ciudades de Beocia. Las ciudades beocias (Platea, Queronea, Tespias, Tanagra, Orcómeno, Livadia y Haliarto) recibieron gobiernos oligárquicos hostiles a Tebas y favorables a Esparta, una guarnición de la cual se estableció en Orcómeno y otra en Tespias, para controlar Beocia,. Platea fue reconstruida y puesta bajo influencia espartana (386 a. C.) En 382 a. C., cuando el general espartano Febides iba hacia Acanto y Apolonia de Iliria que habían solicitado la ayuda de Esparta en un conflicto local, pasó por Tebas donde el jefe opositor oligárquico Leontiades le pidió conquistar y establecer una guarnición en Cadmea; los espartanos ocuparon Cadmea con ayuda de los oligarcas y derrocaron al jefe democrático tebano Ismenio. Una guarnición tebana se estableció en Cadmea y Leontiades asumió el poder. Esto fue visto en toda Grecia como una traición espartana a Tebas y a los términos de la paz del 387 a. C. El gobierno espartano hizo destituir del mando al general Febides, pero el general se quedó en Cadmea, y muchos ciudadanos tebanos se refugiaron en Atenas. Leontiades fue sustituido por Arquias, que gobernó hasta el 379 a. C., cuando una revolución dirigida por Pelópidas le asesinó y los revolucionarios expulsaron a los espartanos y tomaron el poder.
En 378 a. C., Tebas se alió con Atenas contra Esparta. Los tebanos derrotaron a los espartanos en Tegira (Beocia, 375 a. C.) después de lo cual restauraron su hegemonía regional, de la que sólo quedaron excluidas Queronea y Orcómeno. La paz entre Atenas y Esparta se firmó en la ciudad de Esparta en 374 a. C., pero la guerra se reinició al año siguiente, año en el que los tebanos destruyeron Platea y anexionaron Tespias (y además reclamaban Oropos).
En 371 a. C., Epaminondas fue nombrado beotarca y poco después, Atenas y Esparta firmaron la paz (Paz de Calias) el verano del mismo año, tratado que ratificaba el de 374 a. C. y al que Tebas se negaba a adherirse hasta que no se reconociese su hegemonía en Beocia. Para forzar a los tebanos a firmar, los espartanos dirigidos por el rey Cleómbroto I, marcharon al norte y ocuparon el puerto de Creusis (en el golfo de Corinto) y acamparon en la llanura de Leuctra, cerca de Tespias, donde se presentaron los tebanos y se libró la batalla en la que los tebanos (unos seis mil hombres) obtuvieron la victoria (los espartanos eran 25.000) y Cleómbroto murió en dicha batalla (6 de julio del 371 a. C.)[16] Fócida, Élide, Acaya y Tesalia se aliaron con Tebas, pese a ello los otros estados griegos ratificaron el tratado de paz. Arcadia pidió la alianza tebana contra Esparta a finales de año.
En 370 a. C., Tebas se alió con Argos y los tebanos invadieron el Peloponeso. Sición fue ocupada y se estableció allí un gobierno democrático; los tebanos entraron en Arcadia y el gobierno oligárquico de Tegea fue derrocado y la democracia establecida. Los extremos del norte y este de Laconia, pertenecientes a Esparta, pasaron a manos de los aliados de Tebas; los tebanos entraron en Mesenia, que se hizo independiente (y se fundó la ciudad de Mesene como capital), pero fracasaron en la ciudad de Esparta.
En 369 a. C. se fundó en Arcadia la ciudad de Megalópolis, que fue poblada con los ciudadanos de algunas ciudades arcadias; en este año los tebanos ocuparon Pelene y devastaron las regiones de Trecén y Epidauro; lucharon contra el tirano de Tesalia, Alejandro de Feres, combates en los que fueron capturados los jefes tebanos Ismenio y Pelópidas.
En 368 a. C., los tebanos volvieron a atacar Esparta y en 366 a. C. Tesalia; en este último territorio fueron derrotados En 367 a. C., los espartanos derrotaron a los arcadios y argivos en Medea y Epaminondas volvió al Peloponeso por tercera vez.
En 366 a. C., Epaminondas fue a Acaya para unir esta región con Argos y Arcadia contra Esparta. En 365 a. C. los tebanos construyeron una flota con la que ocuparon Larimna en la Lócrida. En 364 a. C., Epaminondas, impuso a Pérdicas III como rey de Macedonia (frente a Ptolomeo Alorita que fue ejecutado) y volvió a Tesalia y derrotar a Alejandro de Feres en la batalla de Cinoscéfalos.
También Epaminondas hizo una expedición naval que supuso que Bizancio, Rodas, Quíos y Ceos dejaran la alianza con Atenas y pasaran a la de Tebas, pero eso sólo duró mientras las naves tebanas estuvieron en estos lugares, pues nada más partir los partidos proatenienses recuperaron el poder.
Durante la ausencia de Epaminondas, los oligarcas intentaron un golpe de estado en Tebas que fue abortado y 300 conspiradores y ciudadanos de Orcómeno fueron ejecutados; Orcómeno fue atacada y destruida y muchos habitantes asesinados o vendidos como esclavos.
En 363 a. C., Epaminondas hizo la cuarta y última expedición al Peloponeso; en Arcadia la disputa era permanente entre Tegea (aliada de Tebas) y Mantinea (aliada últimamente de Esparta); Epaminondas atacó Mantinea donde había fuerzas espartanas y derrotaron a la ciudad y a sus aliados (12 de julio del 362 a. C.) victoria en la que perdió la vida. La muerte de Epaminondas supuso el final de la hegemonía tebana en Grecia. Una paz en Arcadia estableció, poco después la partición entre los dos bando: Tegea y Megalópolis y otras ciudades menores de un lado, y Mantinea de otro. Tebas aún conservó un cierto prestigio durante un tiempo, pero en 358 a. C., las ciudades de la isla de Eubea, que había pasado a dominio tebano después de la batalla de Leuctra en 371 a. C., se rebelaron; Tebas envió un ejército, pero los rebeldes pidieron ayuda a Atenas, con la cual rechazaron a los tebanos.
Un decreto religioso del consejo anfictiónico de Delfos condenó a los espartanos y focidios, y estos últimos dirigidos por Filomeno y Onomarco ocuparon Delfos y se apoderaron del tesoro sagrado. Eso hizo formar una coalición contra Fócida (356 a. C.), que encabezó Tebas (que no perdonaba a Fócida su salida de la Liga Beocia) y Tesalia. Fue el inicio de la llamada Tercera Guerra Sagrada.
En 346 a. C., Tebas atacó Fócida e incendió Aba; la guerra acabó con la intervención de Filipo II de Macedonia que destruyó las ciudades de Fócida obligando al jefe focidio, Felecos, a rendirse (346 a. C.); Filipo devolvió a Beocia la ciudad de Orcómeno y otras que se habían separado.
Con la paz de Filócrates en 346 a. C., Fócida fue excluida de la anfictionía, desmilitarizada (y las fortificaciones destruidas) y hubo de pagar 60 talentos al año para devolver los tesoros robados. En 339 a. C., en la cuarta Guerra Sagrada, Filipo II de Macedonia pasó por las Termópilas y ocupó Elatea, en la frontera de Beocia. Tebas, que era aliada de Macedonia, entró entonces, gracias a la oratoria de Demóstenes, en la alianza ateniense para hacer frente a la hegemonía macedonia, por la cual las dos ciudades formarían un ejército conjunto que sería dirigido por Atenas por tierra y alternativamente por ambas en el mar; Tebas pagaría un tercio y Atenas dos tercios. La coalición fue derrotada por Filipo en Queronea en 338 a. C., y las ciudades griegas se convirtieron en dependientes de Macedonia. Tebas se rindió y la Liga Beocia fue disuelta (Oropos fue transferida a Atenas); una guarnición macedonia se estableció en Cadmea y ses creó el gobierno de los Trescientos, partidario de Filipo. Orcómeno y Platea fueron restauradas y repobladas con ciudadanos enemigos de Tebas.
En 336 a. C. murió Filipo y en 335 a. C., los tebanos antimacedonios se rebelaron al correr el rumor de la muerte del rey macedonio Alejandro Magno, y asediaron a la guarnición macedonia y pidieron a los griegos la rebelión general; Alejandro fue desde Iliria y exigió a los rebeldes la sumisión, y como no la obtuvo ocupó la ciudad y la destruyó; seis mil tebanos murieron y el resto de sus habitantes (unos treinta mil) fueron hechos esclavos, y su territorio repartido entre las ciudades vecinas de Orcómeno, Platea y de Fócida y alguna otra. Sólo quedó en pie Cadmea, sede de la guarnición macedonia y la casa de Píndaro. Durante los siguientes veinte años, Tebas quedó despoblada hasta que en 315 a. C. fue restaurada por Casandro, que llevó allí tebanos exiliados y sus descendientes, operación en la que tuvo el apoyo de Atenas y otros estados de Grecia; en Cadmea quedó una guarnición leal a Casandro. En 293 a. C. Tebas pasó a manos de Demetrio Poliorcetes, que la perdió, pero la recuperó en 290 a. C.
Época romana
Después de la caída de Corinto en 146 a. C. el cónsul romano Mumius la destruyó según Tito Livio, pero probablemente sólo destruyó las murallas. Estruvo al lado de Mitrídates VI del Ponto en la guerra contra Roma, por lo que Sila tomó la mitad de su territorio que destinó al culto religioso en compensación por las destrucciones de los templos de Olimpia, Epidauro y Delfos. Más tarde las tierras fueron devueltas a Tebas. Era un lugar poco importante en tiempos de Augusto y de Tiberio (según Estrabón). En el siglo II, Cadmea estaba deshabitada y la parte baja de la ciudad estaba casi destruida menos los templos. Al final del siglo III y en el siglo IV recuperó población debido a la afluencia de refugiados de las ciudades costeras.
Edad Media
En 1040 los tebanos lucharon contra los invasores búlgaros, pero fueron derrotados. En 1146 la ciudad fue incendiada por los normandos de Sicilia que hicieron un gran botín. En 1166 fue visitada por Benjamín de Tudela y era una ciudad de cierta importancia con una gran población de judíos (unos dos mil).
Fue ocupada por los almogávares de la Gran Compañía Catalana que la convirtieron en su capital después de 1311, y fue integrada en el ducado de Atenas. El vicario general y el arzobispo del ducado residían en Tebas con una amplia población catalana y el municipio estaba organizada según las costumbres de Cataluña. El infante Ferrán de Mallorca fue encarcelado en el castillo de San Homero que fue destruido por los catalanes en 1331, el mismo año en que se firmó un tratado entre los almogávares y el señor de Negroponte. En 1362 Roger de Lauria que se levantó allí contra el lugarteniente del vicario en Tebas, Pedro Despou. Roger permitió el establecimiento de los otomanos en la ciudad (1363), pero los expulsó en 1364 a ruego del Papa.
Una asamblea de dignatarios catalanes dio lugar a los llamamados Capítulos de Tebas (1367), aprobados por el rey de Sicilia, referidos al buen estamento de los ducados y al gobierno y la defensa de los castillos. El Papa reunió a los delegados de Europa en Tebas para una alianza contra los turcos (1373).
En 1378 los catalanes se rebelaron contra el vicario Luis Federico, pero éste los sometió. Los navarros de Juan de Urtubia atacaron la ciudad favorecidos por la traición de algunos habitantes como micer Aner, Oliver Domingo, Juan Corominas y probablemente el arzobispo Simón Autamano. Los asediados recibieron ayuda de Galcerán de Peralta y del notario Pedro Balter desde Atenas, pero estos fueron derrotados y cayeron prisioneros de los navarros, y la ciudad fue ocupada y saqueada; los catalanes y griegos huyeron a Eubea y Atenas (mayo a junio de 1379). El año siguiente (1380), Luis Federico intentó recuperar la ciudad y Juan de Urtubia pidió ayuda y protección a los caballeros hospitalarios. En 1388 pasó a la familia florentina de los Acciajouli.
Más tarde bajo dominio otomano (desde 1460), quedó reducida sólo a la ciudadela de Cadmea y algunas casas más. No queda ningún rastro de la antigua ciudad y sólo se han encontrado algunas estatuas y fragmentos de las murallas.
Referencias
- ↑ «Δείτε τη Διοικητική Διαίρεση (Ministerio del Interior)]».
- ↑ http://www.statoids.com/ygr.html URL consultada el 24 de abril de 2011
- ↑ Andrew Robert Burn, Storia dell'antica Grecia; traduzione di Filippo Gentili. Milán: A. Mondadori, 1991, Oscar saggi n. 458, ISBN 978-88-04-41149-X, pp. 51-54
- ↑ Homero, Ilíada V.804
- ↑ a b Hansen (2004), p. 454
- ↑ Homero.II, IG VII 2470
- ↑ Heródoto, Historia
- ↑ Demóstenes XIX.325
- ↑ Jenofonte, Helénicas V.2.25
- ↑ Homero, Ilíada II.205
- ↑ Heródoto, op. cit. V.79.2
- ↑ Hesíodo, El escudo de Heracles 105, Teognis I.1209, Píndaro, Píticas XII.26, Baquílides IX.54, Heródoto, op. cit. IX.86.1, Demóstenes XVII.216
- ↑ Heródoto IX.13.3, Tucídides, Historia de la Guerra del Peloponeso III.62.3-4, Jenofonte, Helénicas III.5.8, Aristóteles, Retórica
- ↑ Menandro Samias325,
- ↑ Demóstenes XVII
- ↑ Volumen 10 L-MEMN del Grand Dictionnaire universel du XIXe siècle de Pierre Larousse
- Mogens Herman Hansen & Thomas Heine Nielsen (2004) (en inglés). An inventory of archaic and classical poleis. Nueva York: Oxford University Press. pp. 454-457. ISBN 978-0-19-814088-1.
Categorías:- Localidades de la periferia de Grecia Central
- Antiguas ciudades griegas
Wikimedia foundation. 2010.